A menos de 600 días para entregar la banda presidencial -cuenta que lleva en forma precisa en una aplicación en su celular-, el presidente Luis Lacalle Pou ya empieza a identificar aquellos objetivos prioritarios que deben alcanzarse antes de cerrar este gobierno, gane quien gane en las próximas elecciones.
En diálogo con El País desde Bruselas (Bélgica), a horas de tomarse el primer vuelo de regreso a Montevideo -a donde llegará mañana jueves por la mañana-, el jefe de Estado aseguró que lo primero que tiene en mente como meta final es la recuperación salarial, tanto de los trabajadores públicos como privados, que perdieron capacidad adquisitiva con respecto a 2019 en gran parte debido a la crisis por la pandemia del coronavirus. Ahora, de hecho, está en pleno desarrollo la Décima Ronda de Negociación Salarial.
Lo segundo que enumeró el primer mandatario es una serie de obras “puntuales” que ya están en curso, y que involucran inversiones de infraestructura, saneamiento, reducción de asentamientos (en el marco del denominado Plan Avanzar) y la finalización de rutas y puentes. Todo esto es clave para el gobierno, que espera la concreción de obras con beneficio directo en la población para este año y el siguiente, y de allí el optimismo que hay en el Poder Ejecutivo en el rédito político que tendrán estos resultados en el tramo final de la venidera campaña electoral.
Pero hay más. Lacalle Pou también espera la construcción acordada con el gobierno brasileño de un nuevo puente sobre el río Yaguarón, obras portuarias previstas en Montevideo y la terminación de los trabajos para que seis aeropuertos del interior del país adquieran estatus internacional, lo cual será posible gracias a la inversión de US$ 67 millones que acordó con el gobierno la empresa Puerta del Sur (del grupo Corporación América), que tiene la concesión de las terminales hasta el año 2053 y que ya ha inaugurado el aeropuerto de Carmelo (Colonia), mientras que se esperan otros en el corto plazo.