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Gobierno retira dos artículos de ley de urgencia sobre Antel; FA celebra remoción

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Una de las construcciones más altas de Montevideo: la torre de Antel. Foto: Gabriel Rodriguez

ESTE LUNES 

Se quitaron los artículos 268 y 269 de la ley de urgente consideración que entró al Parlamento a fines de mayo para su discusión.

Se retirarán de la ley de urgente consideración los artículos 268 y 269, según señaló la senadora frenteamplista Carolina Cosse en su cuenta de Twitter. Se "pretendió" a través del proyecto "forzar" a Antel "a brindar su infraestructura a los privados", sostuvo la legisladora. El anuncio se realizó este lunes cuando el ministro de Industria, Omar Paganini, visitó la comisión especial que discute la ley de urgencia en el Senado. 

El senador Mario Bergara también se refirió a este hecho: es una "buena noticia y un logro de la prédica que desde el Frente Amplio y organizaciones sociales se venía enfatizando en las últimas semanas. Más tranquilos y a seguir en la lucha".

En la misma línea, el senador Óscar Andrade publicó en su cuenta de Twitter que "por más" que el gobierno "sostuvo que lo intentará más adelante, es un avance. Celebrar el logro, sin dejar de tener en cuenta cuánto queda por modificar".

Fuentes del gobierno, en tanto, dijeron que esto se había discutido días atrás en la coalición y que "parte" de lo que se elimina de la ley de urgencia con la quita de esos dos artículos se incluirá en la ley de medios, que actualmente también está en el Parlamento.

El artículo 268 de la ley de urgencia sostiene que "los prestadores de servicios de telecomunicaciones podrán celebrar de manera voluntaria acuerdos entre sí para determinar las condiciones para la ubicación o el uso compartido de sus infraestructuras". 

Además, establece que "el Estado fomentará la celebración de acuerdos voluntarios entre operadores para la ubicación compartida y el uso compartido de infraestructuras situadas en bienes de titularidad pública o privada".

Asimismo, "la ubicación compartida de infraestructuras y recursos asociados y la utilización compartida del dominio público o de la propiedad privada también podrá ser impuesta de manera obligatoria a los operadores que tengan derecho a la ocupación de la propiedad, sea pública o privada".

A tal efecto, el Ministerio de Industria, Energía y Minería, con asesoramiento de la Unidad Reguladora de Servicios de Comunicaciones "podrá imponer, con carácter general o para casos concretos, la utilización compartida del dominio público o la propiedad privada en que se van a establecer las redes públicas de comunicaciones electrónicas o el uso compartido de las infraestructuras y recursos asociados".

Por otra parte, el artículo 269 expresa que las entidades estatales que sean titulares de infraestructura "prestarán servicios mayoristas" a aquellos "prestadores de servicios de telecomunicaciones interesados en el acceso o uso, para promover la inversión eficiente en el despliegue de redes".

A su vez, "los precios deberán ser razonables, considerando el costo de las inversiones, su operación y mantenimiento. Se buscará que los diversos prestadores, puedan competir de forma razonable en el mercado minorista".

El proyecto de ley de urgente consideración fue parte clave de la campaña del presidente Luis Lacalle Pou. En enero del presente año se conoció un primer borrador y el 23 de abril ingresó al Parlamento. 

El 24 de abril durante un vivo en Instagram junto a la diputada frenteamplista Verónica Mato, Cosse señaló sobre el artículo 268: "Obliga a Antel a arrendar a precios, dice que de mercado, la fibra óptica del lugar. ¡Chan!, es gravísimo, es el comienzo, es la nueva forma de privatizar".

La candidata a la intendencia de Montevideo consideró que esta medida es innecesaria porque "hay más de 130.000 hogares que tienen fibra al hogar sin costo con un límite de tráfico de no sé cuántos gigas, los precios de las telecomunicaciones son competitivos a nivel mundial, es absolutamente innecesario, estos cambios se hacen en los países cuando hay una necesidad real", indicó.

"Esto es para desguazar a Antel, va en contra de la enorme inversión adecuada que hizo nuestra empresa de telecomunicaciones para ponernos en el lugar del mundo que hoy en plena pandemia nos demuestra y nos rompe los ojos sobre la necesaria reconversión laboral porque el mundo es digital", agregó.

"Me parece que es alevoso, es un atropello verdaderamente", opinó.

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