Redacción El País
El exfiscal de Homicidios Carlos Negro, oficializado por el presidente electo Yamandú Orsi como futuro ministro del Interior, afirmó este martes que "el problema carcelario es una de las tres patas más importantes" que debe "abordar cualquier política pública de seguridad, junto con armas y narcotráfico", y que específicamente el de las cárceles es "el problema más urgente".

En este sentido, durante una rueda de prensa fue consultado acerca de cómo compatibilizar esta premisa con el concepto de desprisionalización que se inscribió en el programa del Frente Amplio y que el futuro gobierno intentará llevar adelante.

En su momento, el concepto fue criticado por Álvaro Delgado, entonces candidato a la Presidencia de la República por el Partido Nacional, que interpretó la desprisionalización como "abrir las puertas de las cárceles", algo que fue desmentido por el Frente Amplio.

Negro explicó que el concepto, tal como lo utilizó la coalición de gobierno para criticar el programa del Frente Amplio, "no fue el correcto", porque "desprisionalizar no significa sacar gente de la cárcel".

"Significa que las políticas públicas de persecución no vayan todas enfocadas en meter gente a la cárcel, sino que tengan un abanico de posibilidades", dijo. Entonces habló de las "alternativas que tiene que tener cualquier política pública de seguridad para atacar el delito, que no siempre son la cárcel".

Foto: Estefanía Leal/Archivo El País

En el capítulo 13, de "Convivencia pacífica, seguridad y combate a la criminalidad", el Frente Amplio estableció en sus bases programáticas algunas "acciones prioritarias" como "definir una política de seguridad basada en una perspectiva de prevención, de la descriminalización de la pobreza, desprisionalización, desarme, entre otras".

En setiembre, uno de los redactores de ese capítulo, Diego Olivera, secretario general de la Junta Nacional de Drogas en el segundo gobierno de Tabaré Vázquez, dijo a El País que la desprisionalización "debe ser concebida como una orientación de política pública en el terreno penal", y "no quiere decir que haya una acción de liberación de personas que actualmente están privadas de libertad".

"Queremos orientar nuestro sistema penal hacia uno que tenga más opciones, más alternativas para que puedan ser aplicadas a nivel judicial, que no incluyan de manera mayoritaria como es en la actualidad el encierro carcelario como prácticamente única medida", apuntó en referencia a delitos menores como el narcomenudeo, que en muchos casos no incluye "violencia".