La Intendencia de Montevideo (IMM) invirtió un total de $ 1.153.351, equivalentes en la fecha a US$ 29.573, en la contratación de las siete artistas uruguayas que actuaron el pasado de 19 de marzoen el festival "Acá Estamos", desarrollado en la rambla de Punta Carretas. Esto representa el 11% de lo que se le pagó por su desempeño ese día a la estrella principal del evento, la argentina Lali Espósito.
Así lo clarificó en las últimas horas la comuna capitalina ante un pedido de informes efectuado el 20 de marzo por el edil nacionalista Fabián Bravetti, al que accedió El País.
En todos los casos, las contrataciones fueron ejecutadas antes de contar el aval formal de la Dirección de Recursos Financieros, según el documento. Dicho gasto "no contó con el tiempo necesario para tramitar el proceso de compra", se detalla en cada una de las resoluciones correspondientes, fechadas a lo largo de las semanas siguientes al evento.
De la siete artistas nacionales, Laura Canoura fue la que percibió el cachet más alto. Según los datos a los que accedió El País, fueron $ 300.000 (unos US$ 7.692), abonados a través de Tinkering UY SRL. La grilla también contó con la contratación de Catherine Vergnes, a través de CoopAudem. Se le pagó por su actuación $ 254.124 (US$ 6.516).
A través de Cooparte, la Intendencia pagó $ 196.175 (US$ 5.030) por la actuación de Agustina Padilla. Por la misma cooperativa cobró Vanesa Britos. En su caso, el monto fue de $ 129.158 (US$ 3.311).
Por la misma vía se abonaron $ 103.400 ( US$ 2.651) a Agustina Morales Lestido, y un montó exactamente igual a Soledad Ramírez Albónico. También a través de Cooparte se le pagaron $ 67.094 (US$ 1.720) a Sofía Álvez.
Según fue informado el contrato de Lali Espósito significó unos U$S 256.000. En el evento también participó la artista brasileña Daniela Mercury, a la que se le pagaron US$ 62.387. La Intendencia defendió esas erogaciones como una inversión en cultura.
Preguntas sin responder
Bravetti cursó otro pedido de informes, en el que la mayoría de las interrogantes no fueron respondidas oficialmente aún por la Intendencia: cuántas entradas se entregaron como obsequio en el evento, quiénes fueron sus sponsors, cuánto cobró la empresa privada que brindó seguridad en el festival y de qué manera se la contrató.
Un día después del evento El País informó en base a fuentes de la comuna que se habían logrado vender 24.866 entradas para el festival, que contó con una asistencia aproximada de 50.000 personas. Dado que el valor de las entradas era de $ 400, se puede determinar que por la venta la Intendencia recaudó $ 9.946.400, unos US$ 246.198.
Otras 20.000 entradas fueron obsequiadas a "colectivos de mujeres, usuarias de Comuna Mujer y programas de violencia en género, a Centros culturales, ABC Barrios, Coordinadora Nacional de Asentamientos, Motocarros, ollas populares, programas Plan Barrido Inclusivo, Programa Fortalecidas Juntas, Programa de IM Mujeres que Reverdecen, Programa Comunal 14-Red de Ollas y Casa de las Ciudadanas".
También se dieron entradas de gentileza para "ediles, municipios, concejos vecinales, red escenarios populares, sorteos en prensa, entre otros", apuntó el gobierno departamental.