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El FA busca candidato de consenso para suceder a Javier Miranda

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En mayo del año próximo, Miranda debe dejar la presidencia, según lo resuelto por el Plenario. Foto: Fernando Ponzetto

ELECCIONES EN MAYO

Dirigentes del Partido Comunista le pidieron una reunión a Márcos Carámbula para hablar de su posible candidatura.

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Javier Miranda

seguirá siendo el presidente del Frente Amplio hasta mayo del 2021, pero los sectores ya comenzaron a hablar sobre quién será su sucesor y encontraron un punto en común: debe haber un candidato de consenso.

Desde julio de 2016 Miranda es el titular de la coalición de izquierda. Fue electo por menos de 5.000 votos de diferencia con su competidor, el senador Alejandro Sánchez (MPP), seguido por el exsubsecretario de Relaciones Exteriores Roberto Conde, y el exministro de Defensa José Bayardi, que quedó en cuarto lugar.

Sus años como presidente del Frente no estuvieron exentos de polémica. Desde el inicio tuvo dificultades para armar su equipo de trabajo: la exsenadora Ivonne Passada y la exdirectora general de Secretaría de Turismo Hyara Rodríguez (PS), no aceptaron las vicepresidencias, y en sus lugares asumieron Sandra Lazo (MPP) y la dirigente socialista Blanca Elgart. A su vez, al inicio de su gestión chocó con el Partido Comunista al negarle la presidencia de la comisión de Organización. A lo largo de su mandato también enfrentó cuestionamientos internos del Movimiento de Participación Popular (MPP) y hasta llegó a afirmar en entrevista con el semanario Búsqueda que casi sufrió un “golpe de Estado”.

Con la fecha de la elección ya fijada por el Plenario para el 23 de mayo del 2021, en el Frente se comenzó a delinear la estrategia para definir al sucesor de Miranda. No hay nada formal, pero ya comenzaron los contactos entre los diferentes sectores para fijar los criterios de la elección.

Hasta ahora, la mayoría entiende necesaria la búsqueda de un “candidato de consenso”, es decir, una persona que cuente con el respaldo mayoritario. Esto no significa necesariamente que se presente un candidato único, ya que están habilitadas las candidaturas múltiples.

Junto con el “candidato de consenso”, los sectores entienden que se debe definir todo un “equipo” de conducción del FA, que respete los equilibrios internos producto del peso de los sectores en la orgánica, algo que no sucedió en la presidencia de Miranda. Esto implica un equipo similar al armado por la expresidenta del FA Mónica Xavier, que otorgó vicepresidencias a Juan Castillo (Partido Comunista), Rafael Michelini (Nuevo Espacio) y Passada.

Mientras se discuten los criterios para la elección del nuevo presidente comenzaron a circular los nombres de posibles candidatos al FA. El exintendente de Canelones y extitular de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), Marcos Carámbula, fue el primero propuesto para la responsabilidad. El que lo puso sobre la mesa fue el expresidente José Mujica, según informó El Observador.

Fuentes consultadas para este informe indicaron que Carámbula es visto con buenos ojos por varios sectores. Consultado por El País, el secretario general del PCU dijo que nadie le ha preguntado al sector su opinión acerca de la candidatura de Carámbula. “No nos podemos hacer los distraídos de que se rumoreaba el nombre de Marcos. En función de la historia, la experiencia y la forma de ser, Marcos reúne todas las condiciones para ser un referente de mucho peso para esta etapa, pero no hemos tenido la oportunidad de analizarlo orgánicamente”, dijo.

Castillo indicó que se comprometió a mantener una reunión con Carámbula para consultarlo acerca de la posibilidad de ser candidato del FA. “En realidad, la entrevista la tenemos prevista para hablar de política y de muchas cosas; pero entre ellas era obvio que este tema iba a estar”, admitió. Co-mo hasta el momento no hubo tal encuentro, Castillo dijo que no puede afirmar si hay un consentimiento de Carámbula para que se maneje su nombre como candidato a presidente del Frente Amplio.

Marcos Carámbula, presidente de ASSE. Foto: Fernando Ponzetto.
Marcos Carámbula. Foto: Fernando Ponzetto.

El País se comunicó ayer con Carámbula para preguntarle sobre la posibilidad de que se presente como candidato a presidente del FA. “Prefiero no hacer declaraciones”, fue el único comentario que hizo al respecto de la propuesta de Mujica, que viene circulando con fuerza dentro de la coalición.

Carámbula asumió como senador en el período pasado por la lista 1001 y luego renunció a la banca para ser presidente de ASSE, , cargo que desempeñó hasta que el presidente Luis Lacalle Pou definió el nombramiento del nuevo directorio liderado por Leonardo Cipriani, a mediados de marzo.

Nombres en danza.

Los otros nombres en danza son los de Graciela Villar, la excompañera de fórmula de Daniel Martínez, Michelini -que asumió hace algunos meses como secretario político del Frente-, y en las últimas horas apareció uno nuevo: Christian Di Candia, el intendente de Montevideo que hasta ahora no fue incluido dentro del equipo de gobierno de Carolina Cosse.

Otra alternativa que quedó prácticamente descartada es que se presente como candidato Álvaro Villar, ya que regresó a la medicina como neurocirujano. Además, el MPP pretende que sea integrado dentro de la estructura partidaria, pero no como presidente del FA.

A su vez, hay quienes entienden que la presidencia debe ser ocupada por una mujer, ya que en la anterior elección todos los candidatos fueron hombres.

Derrota electoral y números en rojo

Después de 15 años de gobierno, el Frente Amplio perdió las elecciones y debió volver a ser oposición. El proceso de autocrítica comenzó y muchos son los partidarios que la presidencia de la coalición de izquierda -a cargo de Javier Miranda- también haga un análisis de lo actuado y de cómo eso incidió en la derrota electoral de noviembre del año pasado en el balotaje con Luis Lacalle Pou.

Además de las consecuencias políticas de haber perdido las elecciones, el Frente sufre las secuelas económicas y por eso definió una reestructura total de sus costos, que implicó también una rebaja del sueldo que cobraba Miranda.

Fuentes de la coalición indicaron a El País que a raíz de las medidas aprobadas (mayor aporte económico de los sectores, envíos al seguro de paro de personal y cesación de contratos con profesionales), la situación financiera mejoró.

Sin embargo, el Frente tiene el desafío de equilibrar sus cuentas, ya que perdió una cantidad importante de cargos de gobierno y de legisladores, que mes a mes con sus aportes obligatorios solventaban el funcionamiento de una estructura interna que tiene presencia en todo el país por medio de los cientos de locales de los comités de base.

La tarea de mejorar las cuentas del Frente Amplio, sin perder presencia en el territorio, es uno de los puntos centrales que deberá encarar el próximo presidente de la coalición de izquierda.

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