Redacción El País
De los cinco nombres que tienen los blancos como posibles candidatos a intendente de Canelones -Sebastián Andújar, Alfonso Lereté, Álvaro Dastugue, Amin Niffouri y Leonardo Cipriani- hay uno que por estos días genera ruido, y es el del presidente de ASSE.

El nombre de Cipriani comenzó a sonar con fuerza en las últimas semanas, ya que en el sector Aire Fresco, que comanda el precandidato a presidente Álvaro Delgado, ven en la figura de este médico atributos más que suficientes como para ser una de las opciones de la Coalición Republicana para disputarle el poder al Frente Amplio. El titular de ASSE es oriundo de Las Piedras.

Pero la realidad es que, aunque todavía no hubo una definición formal -más allá de que el jerarca de los hospitales públicos planea dejar su cargo el 9 de mayo, como ya informó El País, para dedicarse de lleno a la actividad política-, el solo hecho de que este médico integre la grilla de posibles candidatos blancos generó “molestia” entre dirigentes de Canelones, sobre todo por “la forma” en que se instaló su nombre: desde la “cúpula” del partido, sin participar a los dirigentes locales, como indicaron a El País varios nacionalistas.

Hay varios blancos que reclaman “al menos ser parte de este tipo de decisiones”, indicó a El País uno de los dirigentes consultados, que prefirió mantener su nombre en reserva.

Lereté, en tanto, plantea este cuestionamiento con nombre y apellido. “Genera molestia la verticalidad”, reconoció. Lo que no cae bien, explicó el legislador, es que se “marque quién tiene que ser candidato a intendente”.

Pero el nombre de Cipriani también genera otro conflicto: engrosa la cantidad de aspirantes blancos a ocupar los dos cupos que el Partido Nacional tendrá bajo el paraguas de la Coalición Republicana. Porque la Constitución permite tres lugares por lema, y se da por descontado que los blancos, por fuerza electoral, tendrán derecho a dos lugares en Canelones, mientras que el Partido Colorado y Cabildo Abierto se quedarán con el tercero, algo que se dilucidará según quién saque más votos en las elecciones de este año.

“Creo que lo de Cipriani es un comentario que anda en la vuelta, pero oficialmente no hay ningún compromiso”, sostuvo, en tanto, el diputado Dastugue a El País.

Richard Charamelo, dirigente canario y exdirector de Ancap, aseguró por su parte, al ser consultado por la posible candidatura de Cipriani, que en estos momentos suele haber “autobombo” y que en realidad todo se termina definiendo por “los votos que tenga cada uno” en la Convención Departamental.