El Poder Ejecutivo aprobó un decreto que tiene como objetivo acelerar las contrataciones de personal dentro del Estado, con medidas que tienden a la digitalización y a evitar la realización de sorteos, ante la problemática de ingresos que demoran hasta dos años.

El documento, formulado en Consejo de Ministros y firmado por el presidente Luis Lacalle Pou, considera que "por razones de economía y celeridad, y a los efectos de procurar una administración ágil y eficiente, resulta necesario efectuar ajustes a los procedimientos de planificación, reclutamiento y selección”.

El director de la Oficina Nacional del Servicio Civil, Conrado Ramos, señaló que una de las ventajas de la nueva normativa es “facilitarle la vida al ciudadano para que pueda llenar su currículum digitalmente, y una vez que está acreditada la información, osea los comprobantes de lo que dice en el currículum (como títulos educativos, por ejemplo), no tiene que estar presentándolos cada vez que se va a presentar a un concurso del Estado". "Eso lo vamos a sacar también para los funcionarios que quieran ascender, que (se) genere un legajo digital y no andar al hombro con carpetas y validando mil veces la información, que ya posee el Estado”, agregó.

“Lo otro es achicar los tiempos, nos preocupamos mucho cuando llegué a esta oficina de que veía que había ingresos que demoraban un año y medio, dos años. Cuando estas cosas son digitalizadas y (con) formularios electrónicos, el formulario avanza si está toda la información, si falta información, no avanza. Y si está mucho tiempo en un lado, salta, nosotros pusimos plazos para que esté en cada oficina de contralor”, indicó el jerarca, en conversación con Canal 5.

El decreto también establece que "los concursos de ingreso serán bajo la modalidad de oposición y méritos. De forma excepcional, y por razones debidamente fundadas se podrán realizar por concursos de méritos y antecedentes previo informe favorable de la Oficina Nacional del Servicio Civil". Sobre esto, Ramos apuntó que por méritos y antecedentes "la gente no tiene que prepararse a un concurso, (y) al no prepararse a un concurso es fácil que se presente todo el mundo, siempre que tenga los requerimientos”.

“Cuando se presenta demasiada gente la tendencia y la norma era ir a sortear, entonces podés estar muy calificado pero no saliste sorteado (para luego hacer el concurso). La idea es dejar que todo el mundo pueda concursar, lo que pasa es que hay que poner prueba de oposición. Si aún con prueba de oposición hay demasiadas personas, excepcionalmente se habilita un concurso. Pero que no sea la norma, sino la excepción”, destacó.

Por su parte, el secretario general de Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (COFE), José Lorenzo López, señaló que al sindicato le “parece que es una buena medida que haya un decreto que establece determinados plazos sobre todo en la parte inicial de los concursos para cómo se deben hacer los llamados”. De todas formas, apuntó que “el problema que sigue existiendo, es que si acá no hay voluntad política, si no hay una acción política concreta de los actores políticos en cada uno de los ministerios, los plazos igual no se van a cumplir”.

A su vez, el secretario general puntualizó que en lo que va de este gobierno se perdieron más de 4.000 puestos de trabajo y que "en algunas áreas hay una situación angustiante, servicios que hoy ya no se pueden cumplir".