Redacción El País
La Policía trata intensamente de identificar a, por lo menos, cuatro delincuentes que, en la mañana de ayer domingo, asaltaron dos joyerías ubicadas en el Punta Carretas Shopping.

El hecho se produjo poco después de la hora de apertura del centro comercial, a las diez de la mañana, mientras ingresaban los primeros clientes, cuando el shopping estaba sumido en s tranquila rutina habitual.

La información primaria confirmada por El País indica que, por lo menos, uno de los delincuentes vestía uniforme policial. Los demás llevaban ropas oscuras. Todos portaban lentes oscuros y tapabocas.

Según declaró el jefe de Policía de Montevideo, Mario D’Elía, los asaltantes habrían ingresado al centro comercial a través de área de mantenimiento y servicios, y subieron por las escaleras hasta el segundo piso del shopping. En el camino, redujeron a los guardias de seguridad presentes en el lugar.

Al llegar al local en el que funcionaba una de las joyerías, y en presencia de dos empleadas que estaban detrás del mostrador, uno de los integrantes de la banda, que simulaba ser un funcionario policial, rompió tres de las vitrinas con una maceta y, calmadamente, comenzó a sustraer los objetos que allí se exhibían y los iba colocando en un bolso de grandes dimensiones que traía en la mano. Luego de vaciar las vitrinas, la cámara de seguridad allí instalada muestra cómo este individuo se retira rápidamente. La operación no se extendió por más de un minuto.

Lo mismo sucedió en el otro local asaltado, donde los delincuentes también redujeron al personal de seguridad allí presente. En ningún momento reclamaron la entrega de dinero.

El ruido de los macetazos fue confundido inicialmente con un disparo de arma fuego, aspecto descartado posteriomente por D´Elía que, en declaraciones a la prensa en el lugar, aseguró que los integrantes de esta banda “portaban armas, o al menos réplicas, pero no las exhibieron”, sino que “las llevaban dentro de la funda”. Durante el asalto, no hubo lesionados.

Algunas horas después la Policía logró ubicar un vehículo rojo, sin matrícula, abandonado en Joaquín Núñez y Lagunillas, a pocas cuadras del centro comercial. Ese auto fue utilizado por los delincuentes para escapar del lugar. Varios testigos indicaron que el grupo de delincuentes salió del shopping por el mismo sector por el que habían ingresado.

Según consignó Telemundo, las cámaras de seguridad ubicadas en la zona muestran a un individuo con ropa deportiva y capucha estacionando un auto gris en ese punto a las seis de la mañana. Lo estaciona y se marcha del lugar. Ese vehículo sería tomado horas después por los asaltantes para abandonar el barrio.

Hasta este domingo no estaba claro el valor de la mercadería robada. En el lugar trabajó un equipo de Policía Técnica relevando posibles huellas y otros indicios.

Al respecto, la Policía esperaba información de la firma y de la empresa de seguridad encargada. Lo que sí está claro entre lo sustraído había relojes cuyo precio oscila entre los US$ 2.000 y los US$ 15.000.