Mujer jugó en una tragamonedas de Salto y ganó el premio mayor de $ 380.000 pero el casino se negó a pagarle

María Fernanda (nombre ficticio) acostumbra acompañar a su suegra cuando, en las ya regulares vacaciones en la ciudad de Salto, concurre a jugar en las maquinitas tragamonedas de los casinos.

De 36 años y casada con un empresario de la construcción de Maldonado, María Fernanda no se considera una jugadora compulsiva. Sus idas al casino, según dijo a El País, son muy esporádicas.

María Fernanda y su esposo de 44 años se dedican a la edificación de inmuebles. Poseen un fraccionamiento y tienen casas para alquilar. “Trabajamos todo el año y luego vamos unos 10 días a Salto a descansar junto con mis suegros. A ellos les gusta mucho esa ciudad”, señaló la mujer.

El sábado 8, María Fernanda y su suegra ingresaron a una sala de juegos de un hotel de Salto. Ambas mujeres se dirigieron a las tragamonedas administradas por la Dirección General de Casinos.

Minutos más tarde, María Fernanda se separó de su suegra y apostó en otras máquinas. Hasta ahí la velada transcurría sin inconvenientes.

“En un momento, una de las máquinas me muestra en la pantalla que había ganado un premio y se detuvo. Un vecino me dijo que había sacado el premio mayor que era de $ 380.000”, relató la mujer.

La apostadora dijo que sintió una fuerte adrenalina recorrer su cuerpo. Revolvió su cartera buscando el teléfono celular. Cuando lo encontró, trató de comunicarse con su esposo y no pudo. El empresario no la atendió porque se encontraba disputando un partido de frontón.

María Fernanda, luego, se comunicó con su suegro. Le dijo que fuera al casino del hotel porque había ganado el premio mayor de una tragamonedas.

Según relató la mujer, el suegro no le creyó y hacía bromas al teléfono en forma continua. Después de tanto insistir, el hombre se dirigió al casino.

“Cuando llegaron mis familiares, yo estaba en una disputa con una funcionaria del casino que me decía que había ganado el premio pero que la máquina no se abrió”, dijo María Fernanda. Agregó que otros jugadores la asesoraron de que llamara a un abogado y que pidiera que se labrara un acta sobre lo sucedido.

La turista sostuvo que los funcionarios de Casinos le dijeron que la máquina había fallado y que el premio que mostró la pantalla no era real.

Durante el diálogo con los empleados públicos, María Fernanda les pidió que llamaran a las oficinas de la Dirección General de Casinos, cuyo titular es Gustavo Anselmi, para que analizaran las cámaras de seguridad y confirmaran que la máquina le había otorgado un premio de $ 380.000.

Según la jugadora, la funcionaria no llamó a Montevideo y se limitó a sentarse en silencio en una silla. “Los funcionarios no me querían pagar el premio. Reiteraban que la máquina no había emitido ningún ticket que generara dicho pago”, reiteró.

Asesorada por el abogado Adrián Báez, María Fernanda presentó una denuncia penal contra la Dirección de Casinos ante la Policía, según informó el portal de noticias Salto al Día.

“Yo voy a seguir con esto hasta que me paguen. Mi abogado ya firmó esos documentos. Ayer (jueves 13) presenté denuncia contra la Dirección General de Casinos y sus funcionarios”, señaló.

Una alta fuente policial confirmó a El País que la turista había efectivizado una denuncia penal.

En tanto, una fuente de Casinos del Estado dijo a El País que el organismo no pagó porque la máquina no emitió premio alguno. “En caso contrario, se hubiera pagado (a la apostadora) lo que emitiera la máquina”, explicó la fuente.

Según supo El País, la Dirección Nacional de Casinos inició una investigación interna para analizar el episodio.

El casino funciona en el hotel de Salto en forma mixta como otros centros de juegos que operan en otros puntos del país. La Dirección General de Casinos se ocupa de la operativa de las máquinas tragamonedas y el hotel de la gastronomía y la seguridad de los turistas.

Una fuente del hotel dijo a El País que analiza iniciar acciones legales contra la turista porque en las redes sociales se culpa a la empresa de no pagar el supuesto premio otorgado por un slot.

Por falta de propuestas, el gobierno decidió dejar sin efecto la licitación del Hotel Casino Carmelo.

El 20 de diciembre de 2024, El País consignó que el subsecretario del Ministerio de Turismo, Remo Monzeglio, afirmó que en Carmelo existe una oportunidad de inversión a través de la licitación para la compra del Hotel Casino Carmelo. El inmueble tiene un valor cercano a los US$ 2,2 millones, e incluye la licencia para operar un casino privado por 20 años. El proceso se inició hace tres años y nueve grupos extranjeros mostraron interés, incluso uno adquirió el pliego de condiciones, pero aún no se han hecho ofertas. El Ministerio de Turismo amplió el plazo de licitación hasta el 10 de enero de este año. Al no haber interesados, el llamado quedó vacante como ya se dijo. Según Monzeglio, todos los grupos mostraron interés en acceder al juego online, algo que en Uruguay no es legal.