El colectivo “Todos somos Familiares Lavalleja” denunció en ayer, que agentes del Ministerio del Interior controlaron, fotografiaron y persiguieron la movilización que realizaron el pasado sábado en Minas, en una nueva edición de la Marcha del Silencio.
La denuncia fue realizada ante la opinión pública, a través de un comunicado que la agrupación divulgó en sus redes sociales. Emitida en la noche del domingo, la misiva del grupo señaló que los funcionarios policiales no estaban uniformados y además aseguraron que realizaban tareas de “inteligencia nacional”.
La publicación generó la respuesta desde el Ministerio del Interior que rápidamente inició una investigación administrativa de urgencia para esclarecer los hechos. En las próximas horas deberán declarar los oficiales implicados y las autoridades a cargo del operativo.
Respuesta
“Al comienzo de la marcha se constató el control de las personas que se disponían a participar de la jornada cívica, con tomas de fotografía desde un auto particular de uso policial (con tres agentes policiales no uniformados). (...) El móvil policial siguió la marcha y, luego de finalizada, se instaló a unos metros del acto”.
Así describió la situación la organización en el comunicado. Luego agregó que “si el motivo es el amedrentamiento y la provocación al pueblo uruguayo, la respuesta no es otra que nunca más terrorismo de Estado”.
El mensaje concluyó con una exigencia al Ministerio del Interior para que se pronuncie sobre los hechos.
Como parte del organismo, el jefe de Policía de Lavalleja, Jorge Khazzaka aseguró que detrás del operativo por la movilización “no hubo intención de amenazar”, sino de velar por la seguridad de este evento que podía ser multitudinarios.
Cuando se realizan movilizaciones de esta dimensión, dijo, se notifica previamente desde el Ministerio a todos los jefes del país, para desplegar operativos de diferente índole.
“Nosotros queríamos asegurar la seguridad de quienes participaban, por eso dispusimos que oficiales uniformados y Policía Caminera trabajara en la fluidez de la marcha; junto a ellos estaban los oficiales no uniformados de investigaciones”, sostuvo el Jefe.
Según Khazzaka, estos últimos se encargaban de evitar hurtos o delitos que pudieran entorpecer la movilización. Incluso, agregó que las imágenes que fueron tomadas por uno de los policías fueron enviadas a quien estaba a cargo del operativo como reporte de la situación. Se trató de fotos panorámicas del evento.
“No hubo intención de amenazar, ni molestar en la marcha. Algunos de sus participantes se sintieron molestos y les plantearon sus interrogantes a los policías, que no ocultaron información sino todo lo contrario”, agregó Khazzaka.
De todas formas, el jefe de Policía de Lavalleja dejó en claro que para futuras movilizaciones se tomará nota de lo ocurrido.
“El reclamo no tiene colores políticos. Es legal y popular, por eso queremos brindar respeto y apoyo. Para la próxima apuntaremos a coordinar con quienes organizan la movilización para no enviar oficiales de investigaciones. Es en desmedro de la seguridad, pero estamos dispuestos”, expresó el jerarca.
Informe
Los hechos generaron repercusiones políticas, entre ellas las de representantes del Frente Amplio del departamento, quienes acudieron exigieron explicaciones a las autoridades policiales.
El diputado Pablo Fuentes adelantó que realizará un pedido de informes al Ministerio del Interior para conocer en detalle qué ocurrió el pasado sábado. De todas formas, el representante aseguró que mantuvo un intercambio con el jefe de Lavalleja, quien le transmitió que se trató de un accionar dentro de lo legal.
“Queremos conocer qué alcance tienen estas medidas, es decir, si se realizaron solo en Minas o en todo el país; si es una práctica habitual y para qué se utilizaron las fotos tomadas en el lugar”, aseguró el legislador frenteamplista.