Por Pablo Méndez
Esta temporada viene siendo una de las peores en materia de incendios forestales. Desde el 1° de diciembre de 2022 hasta el 20 de enero de este 2023 se produjeron 1.829 incendios forestales y de campos, los que provocaron pérdidas de más 13.000 hectáreas.

Según figura en el informe elaborado por la Dirección Nacional de Bomberos, adelantado ayer por El País, esta cifra es mayor a la registrada en el mismo período de 2022, con “incendios que aún continúan” y condiciones ambientales que no cambian. Las cifras recabadas equivalen en promedio a más de 35 incendios por jornada; el lapso es de 51 días.

Según el Director Nacional de Bomberos, Ricardo Riaño, hubo un 24% más de intervenciones en lo que va de esta temporada que en la de 2022, pero se debe tener en cuenta que las condiciones no eran similares.

“Solo el incendio de Río Negro y Paysandú afectó 22.000 hectáreas, este año tenemos una cifra menor en daños”, pese a que hubo más focos, dijo el jerarca.

Foto: Ricardo Figueredo

En un principio Bomberos manejaba una cifra estimada de 1.400 incendios, los cuales se habían obtenido a través de una búsqueda por palabras claves en el sistema de registro de los incidentes. En este caso se trató de un análisis de todos los datos recabados por cada destacamento en el país.

En la zona metropolitana -donde se dio la mayor cantidad de focos ígneos- las pérdidas que responden a 1.214 incendios fueron de 2.598 hectáreas. En tanto, en el interior la cifra fue de 614 incendios, los cuales provocaron daños mayores, en 10.373 hectáreas.

Canelones encabeza la lista como el departamento donde se han registrado más incendios (581) en este período; allí fueron afectadas 1.794 hectáreas. Montevideo y San José continúan el listado con 447 y 186 incendios. Por debajo aparecen Salto (80), Rocha (58), Colonia (56) y Maldonado (47). Cierran la lista Tacuarembó (45), Rivera (44), Florida (43), Soriano (43) y Artigas (41).

En cuanto a áreas afectadas, Canelones es seguido por Tacuarembó (1.238 hectáreas) y Artigas con (1.274 hectáreas). Luego resaltan las 874 hectáreas dañadas en Florida y las pérdidas en Maldonado de 725.

Foto: Archivo El País

El informe hace hincapié en aquellos casos que representaron la mayor cantidad de esfuerzos para mitigar las llamas. Entre estos aparece el incendio ocurrido en los departamentos de Soriano y Colonia.

Según informó Martín Bogao, comandante de los 16 departamentos del interior, participaron en este cuatro destacamentos (Cardona, Rodó, Nueva Helvecia y Colonia), a pesar de que en el informe figura que participaron divisiones de los 12 destacamentos con los que se cuenta. “En este incendio las dotaciones trabajaron por 51 horas ininterrumpidas para mitigar el fuego, que culminó por consumir más 300 hectáreas”, aseguro Bogao.

Unos días más tarde en Tacuarembó se dio otro foco ígneo, que según Bogao “tuvo como particularidad que se quemó pajonal en bañado”, lo cual generó la rápida y extensa propagación de las llamas. Según el informe, este incendio fue el más extenso en lo que va del año. Allí se quemaron 538 hectáreas.

Dentro del informe, además, se menciona la dificultad que han suscitado algunos procedimientos este año, en que se llegó a tener “cinco incendios complejos de forma simultánea”. Estos se propagaban de forma violenta y rápida, poniendo en riesgo viviendas y a sus moradores. Entre estos el producido en Laguna del Sauce, el que afectó un monte nativo.

“En este lugar trabajaron a lo largo de cinco días destacamentos de San Carlos, Piriápolis y hasta bomberos zafrales”, aseguró Bogao. Este explicó que los días de trabajo se determinan en función de las vigilancias permanentes que se montan luego de apagar las llamas.

Los incendios reportados en Cerro del Toro (Piriápolis) y en La Floresta no formaron parte del reporte -pues sucedieron luego del 20 de enero. Estos también representaron una gran labor de Bomberos y equipos del Centro Coordinador de Emergencias Departamentales de Maldonado (Cecoed). Los daños en Maldonado fueron de 310 hectáreas, mientras que en Canelones oscilaron entre 250 y 300.

En este último, rachas de viento de 60 km/h provocaron que las llamas arrasaran con un aserradero, además de pasar al otro lado de la Ruta Interbalnearia.

Fotos: Joaquín Silva

Para cerrar el informe, Bomberos renovó el pedido a la población en general de extremar los cuidados y en esta línea llamó a “no realizar fuegos de ningún tipo”. Se refirió en especial a no quemar residuos o restos de poda y no arrojar colillas de cigarrillos.