El Palacio Salvo, bien de Interés Municipal desde 1995 y Patrimonio Histórico desde 1996, tiene derrumbes de su fachada desde hace años. La más reciente fue el sábado pasado cuando cayó mampostería sobre un auto estacionado. Por esa razón la Comisión Administradora del edificio solicitará apoyo económico y técnico a la Intendencia de Montevideo para refaccionarlo.

"No queremos fondos solamente. Como el Salvo es un monumento histórico, la verdad que no nos interesan solo fondos, nos interesa un apoyo técnico", indicaron fuentes de la Comisión Administradora del Salvo, consultadas por El País.

Ya desde 2013 el Palacio Salvo arrastraba una deuda con la Intendencia de Montevideo de más de US$ 2.000.000. Fuentes de la Comisión Administradora indicaron que esa deuda está saneada y que el edificio está pagando al día a través de un convenio que se hizo con la comuna capitalina.

El Salvo tiene una Comisión Administradora nueva, que comenzó a trabajar hace cuatro meses; una de las ideas que tiene este nuevo grupo de trabajo es "abrir el edificio a la ciudad y vincularlo a las actividades culturales de la zona".

Patricia Roland, directora de Espacios Públicos de la Intendencia, dijo que los responsables de las refacciones del Salvo "son pura y exclusivamente los propietarios, pero puede haber una discusión más filosófica que si todos creemos que esto tiene un valor, el mantenimiento podría no recaer solo en la gente que es propietaria". La directora de Espacios Públicos cree que debería haber una nueva ley de patrimonio que "ayude a este tipo de situaciones porque a veces es muy oneroso para los propietarios su mantenimiento".

Desde el jueves pasado la Intendencia cerró parte de la zona para evitar riesgos e intimó a los propietarios del edificio a construir una pasarela para que los peatones puedan cruzar en forma segura.

Los socios del Salvo están pidiendo presupuestos para construir esa pasarela.

Pretenden que la comuna les dé recursos y ayuda técnica para refacciones