CRUCE
"Es raro que movimientos, organizaciones, que dicen estar a favor de la sensibilidad social y de la justicia social tomen esta clase de medidas", dijo el ministro.
"Un golpe a los alumnos después de dos años de pandemia donde hubo suspensión de la presencialidad y donde hubo pérdidas de aprendizajes", valoró este jueves el ministro de Educación, Pablo Da Silveira, respecto al paro en la educación del próximo 15 de junio por reclamos salariales y laborales.
El paro abarca a todos los sindicatos de la enseñanza pública, tanto de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), como de la Universidad de la República (Udelar) y la Universidad Tecnológica (UTEC). Pero además, dijo a El País Olivera, a los trabajadores del sector privado de la enseñanza, nucleados en el Sintep.
Consultado sobre si esta medida afectará la alimentación de los estudiantes, fue enfático: "Por supuesto. Es raro que movimientos, organizaciones que dicen estar a favor de la sensibilidad social y de la justicia social tomen esta clase de medidas justamente golpeando de manera muy especial a los más débiles".
"La prioridad debería estar en compensar todas esas pérdidas, recuperar tiempo perdido. Es una medida que no tiene ningún justificativo (...) que va a dejar sin clases a centenares de alumnos", remarcó también el ministro en diálogo con Radio Monte Carlo.
Da Silveira aseguró que "esta clase de medidas afecta precisamente a lo que más importa, que son los alumnos".
Enfatizó que "no hay ninguna razón específica que justifique una medida de este tipo", y aseguró que hay "un cálculo absolutamente fantasioso del presupuesto". Para el ministro de Educación, esta iniciativa es "una demostración de fuerza".