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La Junta de Mujeres Líderes Políticas (WPL, en sus siglas en inglés) instaron este lunes a sus colegas masculinos a deshacerse de "estereotipos nocivos" tras el incidente del "Sofagate", la afrenta protocolaria que sufrió la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, en Ankara la semana pasada.

"Ya es hora de deshacerse de los estereotipos nocivos, de cambiar la imagen de los roles de liderazgo que sigue centrándose en los hombres, y de garantizar el respeto mutuo y la igualdad entre hombres y mujeres en los ámbitos político y de toma de decisiones", escribieron las ocho integrantes de la Junta de la WPL.

En su viaje oficial a Ankara, Von der Leyen fue relegada el martes pasado a un sofá lateral en una reunión en la que el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, tuvo un trato preferente al reservarle una silla junto al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, en el centro de la sala donde tuvo lugar el encuentro entre los tres líderes.

Para romper ese "techo de cristal" con el que se encuentran incluso las mujeres en primera línea, "necesitamos que los líderes masculinos trabajen como aliados y agentes de cambio para desmantelar las percepciones de prejuicio, y no para perpetuarlas", añaden en la carta encabezada por la presidenta de la Junta de WPL y ex primera ministra de Nueva Zelanda (1999-2008), Helen Clark.

La WPL es la red mundial de mujeres políticas, cuya misión es aumentar tanto el número como la influencia de mujeres en puestos de liderazgo, ya que "se calcula que se necesitarán 145,5 años para alcanzar la paridad entre hombres y mujeres" en este terreno, precisan.

Las otras siete integrantes de la Junta de la WPL y firmantes de la carta son la presidenta y fundadora de esta organización, Silvana Koch-Mehrin; la exvicepresidenta del Banco Mundial para la región de África (2007-2012) Obiageli "Oby" Katryn Ezekwesili y la expresidenta de Ecuador (1997) y presidenta Ejecutiva de la Fundación FIDAL, Rosalía Arteaga.

Completan el cuadro directivo la vicepresidenta de Liberia, Jewel Howard-Taylor; la presidenta de Eurochild y expresidenta de Malta (2014-2019), Marie-Louise Coleiro Preca; la presidenta del Consejo de Ginebra para Asuntos Internacionales y Desarrollo (GCIAD), Nurhayati Ali Assegaf; y la presidenta del Consejo del Foro Mundial de Reikiavik, Hanna Birna Kristjánsdóttir.

"El acceso de las mujeres a la política en todo el mundo no solo se ve obstaculizado por barreras estructurales, socioeconómicas, institucionales y culturales, sino que las que han conseguido romper el techo de cristal de la política pueden enfrentarse a más barreras una vez que ocupan un alto cargo", señalan las ocho firmantes.

Para ellas, "el incidente del #SofaGate nos recuerda tristemente que el liderazgo sigue considerándose un juego de hombres".

La Fundación Millenia para el empoderamiento y la igualdad de las mujeres ha escrito otra carta abierta a Michel, que ya lleva más de 5.700 firmas, para pedirle que dimita por su actitud en Ankara.

De forma reiterada, Michel lamentó la situación vivida por Von der Leyen en Ankara, que explicó por una interpretación "estricta" del protocolo por parte de las autoridades turcas, mientras que desde la Comisión Europea insisten en el mismo rango de los dos presidentes, de la Comisión y del Consejo.

Esa imagen de Von der Leyen "apartada" mientras dos líderes masculinos "hablaban de política" es el mejor ejemplo de que "la paridad no es sólo una cuestión de números, sino también de influencia", ya que "incluso después de llegar a la cima, las mujeres líderes pueden seguir estando alejadas del centro de la acción", lamentan las directivas de WPL.

A las mujeres líderes, como dijo la congresista Shirley Chisholm ya hace unos 50 años, el consejo sigue siendo válido: "Si no te dan un asiento en la mesa, lleva una silla plegable", concluyen.