TENDENCIA

El video es del 10 de mayo de 2020. En la descripción dice “Nacha Guevara lee a Pablo Neruda”. Y entonces se la ve a la artista argentina —con una remera con las mangas a rayas y el cuello rojo, una boina negra y el pelo amarillo casi blanco enmarcándole la cara de cristal— sentada sobre un fondo de cuadros con fotografías mientras dice, con la voz gruesa como quebrada: “Hola. Me pidieron que grabara un videito con una poesía. Y ustedes saben que la poesía siempre ha estado cerca de mi trabajo y de mi vida, así que me ha costado elegir el poema. Me decidí por uno de Pablo Neruda. Es un poema que él escribió alrededor de los años 60, soñando cómo sería el mundo en el año 2000. El año 2000 llegó y el sueño de Pablo Neruda no se cumplió, pero el poema es bellísimo y vamos a seguir recitándolo, a ver si ese sueño se hace realidad”. Y entonces, lee: “Hoy quiero hablar con las últimas estrellas elevada en este monte humano sola estoy con la noche compañera y un corazón gastado por los años”. Y así sigue, leyendo las palabras del poeta chileno por dos minutos.

Nacha Guevara es una más de las y los artistas de Argentina y de Uruguay que leyeron poemas para compartir en Maratón de poesías, una cuenta de Instagram que surgió como consecuencia directa de la pandemia. Su primera publicación es del 3 de abril de 2020.

“Surge a raíz de la necesidad de fomentar y compartir un estado que sirve para sobrepasar la situación actual que estamos viviendo. La poesía es un refugio y un constante compartir de extrañeses que nos permiten despertar y profundizar. Sumergirse en ella es pura transformación, siendo la única forma de poder cambiar la realidad actual”, dice Damián Lomba, al frente de esa iniciativa.

“La esencia del ser humano, la reconciliación y armonía que habita en cada poema es lo que nos hace repensar nuestra conexión con el mundo. Sin duda es un camino que permite despertar y navegar ante los misterios de la palabra y de la vida. También es una gran forma de sentirse acompañados y pensábamos en la cantidad de gente que lo podía necesitar, sobre todo en estos tiempos”. Esta es una de las tantas cuentas de Instagram que, en los últimos años, se han dedicado a la poesía.

Desde la creación de contenido propio, hasta la generación de espacios para difundir poesía en un formato diferente, las redes se prestan para todo.

Históricamente, la poesía no ha sido un genero demasiado masivo. Ahora, las redes sociales y, en particular Instagram, sirven como soporte para amplificarla y hacerla llegar de otra manera a públicos que, quizás, no eran consumidores asiduos de poemas ni de poetas.

En marzo de 2020 la poeta españolaElvira Sastrecreó Poesía en tu sofá, un festival en el cual diferentes personas de la cultura leen poesía propia o de alguien más por 10 minutos a través de sus cuentas de Instagram y luego le pasan la posta a otra persona. Esa movida fue para celebrar el Día Internacional de la Poesía.

Después surgió la segunda edición en Argentina y entonces, Mayela Arteaga, actriz y gestora cultural uruguaya, escritora de poesía, se contactó con España para poder traer el formato a Uruguay.

El 6 y 7 de abril del año pasado se realizó la primera edición uruguaya del festival. Hubo cuatro ediciones más y una a nivel de Latinoamérica en la que España fue el país invitado. La próxima se hará en abril de este año.

La artista dice que en Uruguay hay una movida de poetas jóvenes que es cada vez más grande. Así, menciona algunos poetas y cuentas a las que sugiere seguir: “Pablo Pedrazzi, Amorcito, Mer Cosco. Y también En el camino de los perros, un colectivo de poetas ultrajóvenes”.

Apropiarse de los medios disponibles para la difusión de su obra y autogestionarse espacios es parte de esa movida. En ese sentido, Mayela cree que las redes sociales juegan un rol fundamental. “Como hacedora te ves desafiada a habitar los medios a disposición para difundir tu obra. Puntualmente Instagram le permitió a la literatura transmutar a un espacio amigable de consumo masivo y accesible, algo que es sumamente bueno para descubrir lo contemporáneo, lo emergente; tanto para el escritor como para el lector es un nuevo punto de encuentro, que, por el código propio del medio, permite -entre otras cosas- desintelectualizar los sentimientos, algo que considero necesario para generar contacto con quien recibe tus textos”.

Para Nacho Algorta, que empezó a escribir poemas desde niño y hoy está detrás de la cuenta de Instagram Algo hecho de poesía, donde comparte su literatura, las redes sociales son “herramientas de conexión extremadamente potentes. Transformaron nuestra forma de relacionarnos y sentir al punto de que no solo difunden la poesía, también son fuente de poesía”.

Instagram, dice, “por definición prioriza todo lo que pueda ser procesado en un instante y eso hace que las poesías cortas tengan mas éxito de difusión dentro de la red. Por esa razón hay un esfuerzo generalizado en escribir más poesías cortas que epopeyas”.

En su cuenta, particularmente, no comparte videos ni artistas leyendo poesía. Allí hay textos -más largos, más cortos- escritos sobre una imagen blanca con letras negras.

Como no solo de escribir se trata, también hay cuentas que se encargan de difundir a otros. Ese es el caso de Idea Vilariño, una cuenta en homenaje a la poeta uruguaya. Detrás de ella está el artista Hugo Leal. Todo empezó cuando la madre de uno de sus amigos que trabajaba en la casa de Idea Vilariño le habló de ella. Después le regaló dos de sus libros autografiados, Última Antología y Antología de la violencia. “Me sumergí en su poesía, en la simpleza del decir y en el amor desgarrado”, dice.

En 2007 comenzó una cuenta homenaje en Twitter, en la que compartía su poesía. Después surgió Instagram y se le ocurrió que podía sumarle imágenes a ese contenido. “Pensé en acompañar su poesía con fotografías que yo sacaba por las calles de Montevideo y Buenos Aires. Me encantan las puertas antiguas, las fachadas de las casas con flores, el mar, y cada vez que tomaba una foto me inspiraba un poema de ella. Convive de manera más moderna y actual y, al mismo tiempo, genera empatía con lo que puede estar atravesándote en ese momento”.

Ahora en Instagram tiene más de 3.000 seguidores. Algunos, lectores y lectoras fieles de la poeta y otros que recién la conocieron. Hugo habla de sus versos así: “La poesía de Idea Vilariño toca fibras muy en carne viva y la gente se siente muy identificada”. Y sí, es fácil la identificación con sus versos.