Redacción El País
El uso de células madre en tratamientos de dolor articulardolor articular se ha convertido en una alternativa cada vez más consultada en medicina privada y centros de rehabilitación.
El traumatólogo colombiano Carlos Guerrero Silva, con formación en ortopedia y estudios de posgrado en medicina regenerativa, sostiene que estos avances permiten intervenir en procesos internos del cuerpo para que la edad biológica pueda mantenerse más baja que la cronológica, algo que repercute directamente en la movilidad y la calidad de vida.
Tratamientos que actúan desde dentro del organismo
Para el especialista, uno de los indicadores clave del envejecimiento son los telómeros, estructuras ubicadas en los extremos de los cromosomas. Según explica, cuando se logra que los telómeros se conserven más largos, el organismo mantiene mejores condiciones de funcionamiento, lo que abre la puerta a terapias que apuntan no solo a tratar enfermedades, sino también a sostener el bienestar general. Este enfoque forma parte de la medicina regenerativa, un campo en expansión que busca estimular los procesos de reparación natural del cuerpo.
Guerrero Silva señala que actualmente estas células madre se utilizan en patologías como artritis, artrosis, hernias de disco, accidente cerebrovascular, párkinson, alzhéimer o parálisis cerebral, pero también en pacientes que buscan desacelerar el deterioro articular propio de la edad. En el terreno del antienvejecimiento, comenta, se aplican en personas interesadas en mejorar la apariencia física, el rendimiento mental o incluso la salud sexual.
De dónde se obtienen y cómo se aplican
Las células madre pueden obtenerse del hueso, de la grasa abdominal, del interior del muslo o del cordón umbilical. Este último, detalla el traumatólogo, puede representar una fuente para tratar a decenas o incluso cientos de pacientes. Las aplicaciones se realizan por vía intravenosa, mediante infiltraciones locales o combinando sueros enriquecidos con vitaminas y nutrientes.
Guerrero Silva añade que, en promedio, el organismo de una persona contiene alrededor de un millón de células madre por kilo de peso. Estos tratamientos se realizan en países como España, Tailandia, Costa Rica, México y China, con costos internacionales estimados en unos 25 mil dólares.
Cambios de estilo de vida tras el procedimiento
El traumatólogo recomienda adoptar ciertos cuidados luego del tratamiento, entre ellos llevar durante un mes una dieta libre de gluten y sostener hábitos saludables relacionados con la nutrición, el movimiento, la exposición ambiental y las relaciones sociales. Estas medidas, asegura, favorecen que el organismo aproveche plenamente los beneficios de la terapia y logre un impacto positivo en el dolor y la funcionalidad articular.
En base a El Tiempo/GDA
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