Stephie Bacque
La lengua es una ventana al funcionamiento real del organismo. Este órgano es un indicador fantástico de tu estado de salud, en particular, de tu sistema digestivo y del hígado.

Si cuando te mirás en el espejo notás que tu lengua está cubierta con una sustancia de color blanca, marrón, amarilla o verde, eso puede estar hablando de que tenés mala digestión, un hígado lento o que existen toxinas en el intestino. El problema es que si no te encargas de eliminar todas esas toxinas en la lengua, ellas seguirán circulando.

Los seres humanos necesitamos proteger nuestro cuerpo de la acumulación de toxinas y por ese motivo es clave la eliminación adecuada de los desechos de nuestro organismo. Eso es lo que hacemos cuando limpiamos nuestra lengua al levantarnos cada día, ya que de esa forma barremos todo eso que que el cuerpo expulsa mientras descansa durante la noche.

En el Ayurveda, un sistema de medicina tradicional integrativa basado en curas naturales y cambios en el estilo de vida, la digestión es el punto de partida de la salud. Según esta concepción holística del individuo, la digestión es la forma en la que nuestros cuerpos obtienen el alimento de nuestros tejidos y, en última instancia, de todo nuestro estado de conciencia.

Debemos tener en cuenta que cada año se agregan 25.000 nuevas toxinas a nuestro medio ambiente, incluso con una dieta saludable y cantidades modestas de cafeína y alcohol, que nos afectan a todos en el día tras día.

La lengua se puede utilizar como una ventana real al funcionamiento interno de nuestro cuerpo, ya que refleja la salud de muchos de los órganos. Estudios demuestran que distintas partes de la lengua están relacionadas con, por ejemplo, el corazón, los pulmones, el estómago, los riñones o los intestinos.

El procedimiento para hacer esta limpieza es bastante simple: debemos arrastrar un raspador de lengua (idealmente que esté hecho de cobre o acero inoxidable) en forma de U por la lengua.

Esta limpieza contribuye enormemente en mejorar la higiene bucal y eliminar las toxinas del cuerpo.

Lo mejor es que esta limpieza se realice a primera hora de la mañana, apenas nos levantamos, y que coloques el raspador tan atrás en la lengua como te resulte cómodo, jalando suavemente el mismo siempre de atrás hacia adelante de tres a cinco veces y luego tres veces a cada lado.

Es importante que luego de usar tu raspador lo laves y que lo reemplaces cada tanto.

Una capa de color blanco en la lengua indica que hay toxinas que reducen la correcta digestión. Por el contrario, cuando estés sano, notarás que habrá una reducción significativa del recubrimiento de tu lengua por la mañana.

La desintoxicación o limpieza periódica es la mejor manera de restablecer y recargar tu cuerpo para una salud a largo plazo. Si tu lengua emite alguna pista visual de que no es saludable, lo adecuado es consultar con tu dentista.

Espero que puedas agregar a tu rutina este simple paso que contribuirá con tu organismo en muchas formas.

CONOCÉ A NUESTRA COLUMNISTA:

Stephie Bacque

Es uruguaya, pero reparte su tiempo entre Montevideo y Buenos Aires y cambió radicalmente su vida convirtiéndose en health coach.

Su experiencia de vida, puede seguirse a través de la cuenta de Instagram.