El efecto del calor intenso en personas con problemas cardiovasculares: ¿qué riesgos corren y cómo cuidarse?

Los días calurosos vuelven con el verano, y las personas con enfermedades del corazón deben tener especial cuidado para que este no perjudique su salud.

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Pantalla que indica altas temperaturas.
Pantalla que indica altas temperaturas.
Foto: Leonardo Mainé

Redacción El País
Con la inminente llegada del verano, son de esperar días de intenso calor en los próximos meses. Las temperaturas extremas incrementan los riesgos para la salud de las personas con problemas cardíacos.

La exposición a altas temperaturas no solo aumenta el riesgo de agotamiento por calor y de golpe de calor, sino que además pone una carga adicional en la salud del corazón. Esto genera estrés en el sistema cardiovascular y obliga al corazón a trabajar más, lo que puede aumentar las posibilidades de ataques cardíacos, arritmias e insuficiencia cardíaca, indicaron desde la Universidad de Harvard.

La interacción del calor elevado con enfermedades cardiovasculares contribuye a alrededor de un cuarto de las muertes relacionadas con el calor, según la Agencia de Protección Ambiental estadounidense (EPA, por sus siglas en inglés).

Un estudio reciente publicado en la revista Circulation analizó las tasas de mortalidad cardiovascular durante siete años en Kuwait, donde las temperaturas diurnas pueden superar los 38°C en los meses más calurosos. Los investigadores encontraron una relación entre el aumento de temperaturas y el riesgo de muertes cardiovasculares, siendo la mayoría de estas entre los 35°C y 43°C. De esto, se concluye que a mayor temperatura, mayor es el riesgo.

"El cambio climático nos está trayendo cada vez más olas de calor sin precedentes que pueden ser mortales, especialmente para personas con enfermedades del corazón", señala el Dr. Aaron Bernstein, director interino del Centro para el Clima, la Salud y el Ambiente Global en la Escuela de Salud Pública T.H. Chan de Harvard.

Cómo se deshace el cuerpo del exceso de calor

El cuerpo humano tiene dos mecanismos principales para expulsar el calor:

  • Radiación: cuando el aire alrededor del cuerpo es más frío, este irradia calor al entorno. Este proceso requiere un cambio en la circulación sanguínea para permitir un mayor flujo hacia la piel
  • Evaporación: el sudor al evaporarse enfría la piel, extrayendo el calor. Cuando el aire es seco, esto es eficiente, pero en ambientes calurosos y húmedos, el sudor se estanca en la piel y la temperatura corporal sigue aumentando

Cuando la temperatura del aire se acerca o supera la temperatura corporal, en un ambiente de alta humedad, el corazón debe latir con más frecuencia y bombear con mayor fuerza para ayudar al cuerpo a eliminar el calor. En días de mucho calor y humedad, el corazón puede hacer llegar a circular de dos a cuatro veces más sangre cada minuto en comparación con un día fresco.

Algunos medicamentos para el corazón pueden causar problemas adicionales en días de calor, apuntaron desde la universidad. Por ejemplo, los betabloqueantes reducen la frecuencia cardíaca e impiden la circulación sanguínea necesaria para un intercambio de calor efectivo. Los diuréticos incrementan la producción de orina y aumentan el riesgo de deshidratación.

Dolor en el pecho.
Un hombre con su mano en el pecho.
Foto: Archivo El País.

Cómo proteger la salud cardiovascular cuando suben las temperaturas

La exposición a altas temperaturas afecta a todos, pero si se tienen problemas cardíacos preexistentes, el riesgo de padecimientos y hospitalización relacionados con el calor aumenta. Por lo tanto, es esencial seguir estrategias básicas para mantenerse fresco, como las que recomienda el especialista de Harvard:

  • Monitorear los pronósticos meteorológicos y quedarse en casa durante las alertas de calor
  • Si es necesario salir, hacerlo en las horas más frescas: la mañana y la noche. Descansar en la sombra siempre que sea posible
  • Beber un cuarto de litro de agua cada 20 minutos cuando se esté al aire libre, utilizando un temporizador como recordatorio, puesto que no se debe esperar a tener sed para hidratarse. Las personas con insuficiencia cardíaca deben consultar a su médico sobre el consumo adecuado de líquidos, mientras que quienes toman diuréticos deben ajustar su ingesta durante el calor a las recomendaciones médicas
  • Evitar refrescos y jugos de fruta y limitar el consumo de alcohol, puesto que pueden ralentizar el paso del agua del sistema digestivo al torrente sanguíneo. Algunos estudios indican que un consumo excesivo de alcohol podría aumentar el riesgo de golpe de calor
  • Proteger la piel es fundamental. Las quemaduras solares comprometen la capacidad del cuerpo para enfriarse y fomentan la deshidratación. Se recomienda usar sombreros de ala ancha, gafas de sol envolventes y ropa ligera de colores claros y holgada. Además, aplicar protector solar con protección UVA/UVB de SPF 30 o mayor en toda la piel expuesta unos 30 minutos antes de salir, y reaplicar cada hora

Este contenido fue hecho con la asistencia de inteligencia artificial y verificado por un periodista de El País.

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