Redacción El País
Existen múltiples plantas y hierbas medicinales que aportan beneficios a la salud del organismo. Sin embargo, a la hora de elegir, hay una que destaca por su sabor, aroma y versatilidad en la cocina: la albahaca.
En su libro Hierbas: especies medicinales y aromáticas usadas en Uruguay (Ediciones de la Plaza), Alejandro Sequeira explica que la albahaca es un potente analgésico y antiinflamatorio y que su consumo abre el apetito y facilita la digestión.
Uno de los beneficios principales de esta planta, dice Sequeira, es su acción antienvejecimiento. Los antioxidantes presentes en la albahaca neutralizan los radicales libres, responsables del envejecimiento celular.
Además, se ha comprobado que el extracto de albahaca ayuda a calmar el estrés, ya que reduce la concentración de las sustancias como el cortisol y la adrenalina. Y aún hay más: combinado con otros compuestos, el extracto sirve para tratar afecciones de la vista (conjuntivitis, ojos rojos, etcétera), incluido el tratamiento posoperatorio de cataratas.
En el libro, el experto expone cómo preparar una infusión con albahaca y así aprovechar sus propiedades nutricionales. Primero, debe colocar en un recipiente 2 cucharadas de hojas frescas de albahaca cortadas en tiras con jengibre fresco rallado (o media cucharadita de jengibre en polvo) y sumar agua hirviendo. Deje unos 5 minutos en reposo, luego cuele y agregue una cucharadita de jugo de limón y miel.
Incluir albahaca fresca en la dieta es sencillo. Basta con agregar algunas hojas a una botella de vinagre o preparar un pesto sencillo como condimento de cualquier pasta. También pueden agregarse hojas cortadas a mano en ensaladas o sobre tostadas de pan de campo.
El libro Hierbas: especies medicinales y aromáticas usadas en Uruguay ofrece decenas de recetas simples con albahaca. Está disponible haciendo clic aquí.