Por Amalia Nierenberg, The New York Times
¿Ya nadie toma agua común y corriente? Cuando Brigette Ramirez y su familia fueron en automóvil a Houston para asistir a un concierto de Taylor Swift, Ramirez hizo una importante parada técnica. Ramirez, de 33 años, y docente de historia, estaba buscando jarabes sin azúcar que los demás amantes del agua saborizada habían agotado en el único supermercado cerca de su casa en el sur de Texas.
En este nuevo capítulo de la obsesión de los estadounidenses con la hidratación, los sedientos transforman el agua corriente para que todo mundo lo vea en TikTok bajo la etiqueta de #WaterTok. Presumen “barras de agua” ordenadas de manera muy minuciosa y surtidas con jarabes sin azúcar, polvos bajos en calorías saborizados como los dulces Skittles y Nerds, y vasos de colores brillantes. En este proceso, algunos se han convertido en influencers. Una sola de las “recetas” de estos mixólogos del agua —tres chorros de esto, un paquete de aquello— tiene el poder de impulsar muchísimo las ventas. Varias empresas de agua saborizada afirmaron que sus productos se agotaron en los últimos meses y, por ende, las ganancias están en pleno auge.
Desde que arrancó #WaterTok en marzo, el jarabe color azul brillante sin azúcar Mermaid con toques de cítricos, piña y coco de Jordan’s Skinny Mixes se ha agotado ocho veces. La empresa fue fundada hace 14 años y registró un crecimiento durante la pandemia, señaló Dana Paris, su directora de mercadotecnia. Pero #WaterTok “ayudó a impulsar Jordan’s Skinny Mixes, la cual pasó de ser una marca casi secreta a tener un nombre más reconocido”, comentó. En abril, las ventas por comercio electrónico aumentaron 143 por ciento en comparación con el año pasado.
Las ventas del jarabe de coco sin azúcar Torani se han duplicado desde marzo, señaló Andrea Ramirez, gerente de conocimiento del mercado de clientes y consumidores. Esta empresa ha existido desde 1925 y quizás es más conocida por sus saborizantes de café.
Al principio, la tendencia fue recibida con burlas en todo el internet y los críticos han tildado a los aficionados de #WaterTok de “colibríes”, lo cual varios influencers dijeron que sonaba sexista. Quienes promueven estos jarabes y polvos saborizantes casi siempre tienen sus propios enlaces afiliados hacia los productos, y el elemento de patrocinio también ha motivado algunas reacciones de rechazo, señaló Tiffany Ferguson, creadora del programa de YouTube Internet Analysis, en el cual profundiza sobre las tendencias populares en internet.
Si #WaterTok es una secta, la hidratación es una religión a nivel nacional. Más o menos en la última década, en Estados Unidos han abundado las propuestas de saborizantes para el agua, donde las empresas de gaseosas ha conquistado el paladar de los estadounidenses por varias generaciones.
Estas empresas de aditivos para el agua formulan los productos —que casi siempre están hechos con edulcorantes y saborizantes artificiales— como una manera de ayudar a que la gente alcance sus metas de hidratación. Es el razonamiento de Mary Poppins: con un poco de (jarabe de coco sin azúcar) esa (agua común y corriente) pasará mejor. “Siento que es beber mi propia saliva”, dijo Ramírez, la profesora de historia del sur de Texas, sobre el agua del grifo.
“En mi casa, éramos ávidos bebedores de Dr. Pepper Zero o Diet Coke”, Ramírez dijo. “Ávidos. Como que comprábamos al por mayor”. Desde que cambió al agua saborizada, dijo, tres cajas de gaseosas han permanecido intactas en la despensa. #WaterTok también está vinculado con cirugías de derivación gástrica. Los pacientes no deben tomar bebidas gaseosas después de una operación para bajar de peso, así que las bebidas saborizadas pueden ser una herramienta de hidratación, sobre todo para los pacientes acostumbrados a consumir los refrescos gasificados.
“Todo el mundo está tratando de beber más agua”, dijo Tonya Spanglo, de 45 años, quien se sometió a una cirugía para bajar de peso hace tres años y posiblemente sea el rostro más reconocible de #WaterTok. “Esta es solo una forma divertida de hacer algo que ya estamos haciendo”.
La discusión en redes sobre hidratación es inseparable de la cultura de la dieta. Es frecuente que la etiqueta #WaterTok aparezca junto a #WeightLoss, ya que los influentes destacan la hidratación como una herramienta importante para perder peso. El lunes, la Organización Mundial de la Salud advirtió sobre el uso de edulcorantes artificiales para bajar de peso y mencionó que su consumo constante podría incrementar el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y aumentar la mortalidad en adultos.
Y queda una pregunta: ¿algo de esto siquiera es agua? “Yo tengo mis reservas para llamar a esto ‘agua’”, señaló Fatima Cody Stanford, médica especializada en obesidad y científica de la Universidad de Harvard. “Puesto que no es solo agua”. Stanford nos ayudó con la definición de agua como “aquello que esperaríamos tener si fuéramos a tomar una ducha o lavarnos las manos”. “El agua es la base”, dijo. “Pero el agua también es la base de los refrescos gasificados”.