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MARCELA DOBAL

El 99% de las trabajadoras domésticas no perciben salario vacacional, según un estudio del Ministerio de Trabajo. Además, si bien hay cinco de cada 10 que creen tener derecho a cobrar aguinaldo, solo una lo recibe.

El estudio titulado "Trabajo doméstico e impacto de las políticas públicas en Uruguay" elaborado por el área de evaluación y seguimiento de la Dirección Nacional de Empleo revela que en 2009 había 118.154 trabajadoras domésticas, de las que el 75% son empleadas domésticas propiamente dichas, otro 10% son cuidadores de enfermos y un 15% son cuidadores de niños. El informe, al que accedió El País, será presentado públicamente el miércoles próximo en el Ministerio.

El 98,8% del total de trabajadores del sector dice no percibir salario vacacional, que es uno de los beneficios sociales amparados por la ley. Por otra parte el 53,9% cree tener derecho a recibir aguinaldo, pero el 91,4% afirma no cobrarlo, según resalta el informe en base a datos de la encuesta continua de hogares del Instituto Nacional de Estadística.

El estudio muestra que del total de personas que aportan a la seguridad social casi la totalidad saben que tienen derecho a percibir aguinaldo (97,8%). Sin embargo entre quienes no aportan, el 70,6% desconoce tener derecho a ese beneficio.

La cobertura de seguridad social de los trabajadores domésticos es casi la mitad que el promedio de los ocupados del país. Mientras 68% del total de ocupados realiza aportes, solo 35,9% de los domésticos lo hacía en 2009, destaca el informe.

Al interior de las tres categorías, quienes más realizan aportes son las domésticas propiamente dichas (42,5%), mientras que en los cuidadores de enfermos y de niños son 15,8% y 16,7%, respectivamente.

El informe destaca que entre que se promulgó la ley 18.065 de trabajo doméstico en noviembre de 2006 y 2009, el número de trabajadoras domésticas que aportan a la seguridad social registró un crecimiento anual promedio de 8%.

Del total que aportaban en 2009, el 76,8% declara que lo hace por el importe del salario que recibe, dice el informe. El 87,9% de los aportes se realizan al Banco de Previsión Social (BPS) y solo el 12,1% que resta vierte sus aportes al BPS y a una Administradora de Fondos de Ahorro Previsional (AFAP).

El estudio también analiza el impacto de la política salarial. La remuneración promedio mensual de las diferentes ocupaciones consideradas como trabajadoras domésticas equivalía en 2009 al 45,2% de las remuneraciones promedio del total de ocupados, concluye.

No obstante, ese tipo de empleadas trabajan en general un número menor de horas que la media de ocupados. El 46,2% de sus trabajadoras en 2009 cumplía hasta 20 horas, otro 19,8% trabajaba entre 21 y 30 horas y un 14,3% realizaba labores por entre 31 y 40 horas. Además, un 12,7% trabajaba entre 41 y 50 horas y un 7,1% superaba esa carga horaria.

Medido por hora, el salario doméstico representa 68,4% del salario promedio de los ocupados. Se destaca que ese porcentaje era de 55,5% en 2006, "lo que implica una reducción de la desigualdad de remuneraciones del mercado de trabajo en detrimento de las categorías de ocupación de menor nivel de calificación". El nivel educativo predominante en los trabajadores domésticos es hasta primaria, que representa casi la mitad (47,2%), mientras que entre los ocupados del país el 27,8% tiene educación hasta primaria.