SORIANO | HUMBERTO RAMÍREZ

Una jornada inusual se vivió ayer en una localidad ubicada a unos 40 kilómetros de Mercedes: sus ciudadanos fueron a las urnas para definir democráticamente si el pueblo deberá llevar el nombre de Villa Darwin o Sacachispas. Esta última opción fue la ganadora y ahora va al Parlamento.

Desde hacía muchos años se cuestionaba que en ningún lado figuraba el verdadero nombre del pueblo, por lo que la Junta Departamental de Soriano, la Intendencia y la Corte Electoral decidieron organizar una consulta popular.

En un pueblo de unos 700 ciudadanos, 438 sufragaron en los dos circuitos designados. Las papeletas de color amarillo por el nombre Villa Darwin, perdieron por 20 votos contra las verde agua de Sacachispas. Es decir, por una diferencia de cerca del 4%.

Los "chisperos" festejaron ayer con una caravana por el pueblo y esperan volver a celebrar en 2009 por los 100 años.

De acuerdo a documentos, en 1909 se hizo el fraccionamiento de un campo en la décima sección del departamento de Soriano, en paraje Perico Flaco. Por esa época se reunieron en la pulpería de Juan Sánchez un grupo de vecinos que, según una poesía que recitó Bernardino Pereira Peralta, mientras tranqueaba el porrón, decidieron: "Es la ocasión, de darle a este pueblo un nombre, así ninguno se asombre, ni aflojemos una pizca, combinaron entre todos, le ponemos Sacachispas".

Un vecino del pueblo, Marcos Gil, ofendido porque en la escuela número 18 los maestros enseñaban a los niños el nombre de Villa Darwin y no Sacachispas, comenzó distintas gestiones. Encontró, por ejemplo, que en 1932 se remataron 23 solares y que en la propaganda figuraba el nombre que venció en la votación.

"Tengo en mi haber un contrato de carreras que data del año 1937 y otro de una carnicería del lugar de 1950, todos tomando como referencia el nombre del pueblo Sacachispas", dijo Gil.

A su vez, "en 1999 la Junta Departamental de Soriano, a solicitud de los vecinos descendientes de los que le pusieron Sacachispas, aprobó por unanimidad de los ediles presentes en sala nombrarlo así. Elevó este documento al Parlamento Nacional, solicitando su estudio y aprobación, expediente que hoy sigue archivado sin resolución", contó Gil.

Para él es "incompresible" que los maestros del pueblo enseñen a sus alumnos que el sitio se llama Villa Darwin, ya que "eso determina que la denominación vaya afincándose como ha ocurrido hasta ahora". Gil sostuvo que "no existe ninguna resolución de que el centro poblado lleve ese nombre en homenaje a un biólogo que llegó hace muchos años a la zona, donde hoy (junto a las costas del río Negro) existe un cerro con un monolito que lo recuerda".