TURISMO

"Agua que corre”. Ese es el significado de Aiguáen guaraní, un valle surcado por numerosos cuerpos de agua entre las sierras. Pero a este pueblo ubicado a 54 kilómetros de la ciudad de Maldonado y a 94 de Punta del Este llegan pocos turistas durante el verano porque no saben lo que Aiguá tiene para ofrecer.

Sin entrar en los detalles naturales, una propuesta es realizar un paseo histórico y patrimonial por las casas de principios del siglo XX que se han venido restaurando sin pausa desde agosto de 2017.

Desde ese año hasta ahora, 68 viviendas ya han sido completamente recuperadas y actualmente se está trabajando en tres más. El proyecto, liderado por la profesora Liliana Bernárdez y el maestro Ariel Larrosa, tiene la meta de completar la puesta en valor de 120 casas repartidas entre el casco histórico, centro y puntos específicos de la ciudad.

“Las fachadas son parte de la identidad de Aigúa; son lo que caracteriza al pueblo. No solo le estamos devolviendo al pueblo su identidad sino que estamos mejorando la calidad de vida a las personas; estamos recuperando el patrimonio para las futuras generaciones”, dijo Bernárdez a El País.

La primera obra del proyecto fue en la capilla San Antonio; incluso se recuperó la imagen del santo. “Tal como está hoy es como estaba en 1903”, apuntó la profesora.

Entre las casas restauradas está la de la fundadora de la ciudad, Margarita Muñiz. En este caso, fue reconstruida desde los cimientos debido a su avanzado estado de deterioro. primero se realizaron excavaciones arqueológicas y luego se reconstruyó la casa tal como era la original; se la amuebló con piezas de la época.

El respeto por lo original es la base del proyecto: cada puerta y ventana colocadas son exactas a las originales (se buscan en remates y demoliciones), se reconstruyen los balcones como eran en su época, se fabrican las molduras de forma artesanal, entre otros detalles que mantienen ocupados a un equipo de cinco albañiles, todos vecinos de la localidad.

“Primero hacemos un hidrolavado y arenado. Sacamos el revoque viejo. Arreglamos molduras, frisos, goterones, carpintería. Le devolvemos a la fachada su aspecto original”, comentó la responsable.

Por ejemplo, cada moldura se copia en cartón, luego se pasa a una chapa de hierro y luego se la fabrica en trozos. También se arman los faroles siguiendo los modelos antiguos. Finalmente, se pinta toda la casa según una paleta de colores que armoniza el conjunto.

Los vecinos no pagan nada por los trabajos en sus hogares o comercios. Todos los trabajos se solventan con fondos de la Intendencia de Maldonado.

Una vez que los 120 inmuebles hayan sido intervenidos, Bernárdez cree que Aiguá, una vez un centro agropecuario muy próspero, estará en condiciones de atraer a más turistas al establecerse un circuito histórico a escala departamental y regional que complemente la oferta de sol y playa del departamento. “Esto trae oportunidades de generación de empleos relacionados con el turismo”, afirmó.

Más adelante se hará lo mismo con unas casas que pertenecen al estilo Art Decó.

Los lugares más emblemáticos y cercanos a Aiguá son el cerro Catedral (el más alto del país con 513 metros) y las Grutas de Salamanca, consideradas las más grandes de Uruguay.

Aiguá y su paisaje natural fueron uno de los tres nominados uruguayos para el Best Tourism Villages, el sello de la Organización Mundial de Turismo (OMT) que reconoce los mejores pueblos turísticos.