Redacción El País
Una llamativa visita, una polémica, algún destaque individual, el triunfo de un plantel imposible y un batacazo: de eso, y de tantas otras cosas, estuvo hecho el tramo final del Concurso de Carnaval, que se cerró este martes con Nos Obligan a Salir, Sociedad Anónima, Zíngaros, Valores y Tabú celebrando sus conquistas.

La lectura de puntajes de un jurado presidido por Ramiro Pallares y la fascinante conformación de una planilla de Excel hicieron una Noche de Fallos que acaparó una madrugada entera, y terminó con el justo triunfo de una murga que, desde la primera rueda, hizo méritos suficientes para celebrar el campeonato.

Con el título Sed, Nos Obligan a Salir llegó a 2024 con un plantel estelar. Combinó a Martín Angiolini en dirección escénica y unos preciosos arreglos corales con la voz como un bastión del Zurdo Bessio, acompañado de su compinche en otras trincheras musicales, Emiliano Muñoz. Alejandro Balbis, en su vuelta al Concurso tras cuatro años de ausencia (su última vuelta había sido con otra murga, Doña Bastarda, en 2019), fue otro pilar. Y para robarse las miradas desde la previa y, definitivamente, a partir del Desfile Inaugural del 25 de enero, una dupla de cupleteras y letristas, Jimena Vázquez y Jimena Márquez, que le pusieron el cuerpo a dos personajes con potencial: la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, y su directora de Cultura, María Inés Obaldía. Fueron infalibles.

Un cruce entre originales e imitaciones tanto en el Desfile como en la Liguilla fueron fotos destacadas de una competencia netamente atravesada por el año electoral. La campaña se hizo sentir en textos y en visitas. Cosse y Yamandú Orsi se dejaron ver en un Teatro de Verano al que además volvió Jorge Gandini, uno de los reconocidos carnavaleros del Partido Nacional.

Con una propuesta contundente que equilibró con precisión la tradición murguera y la frescura, Nos Obligan a Salir entregó un espectáculo que hizo reír cuando tuvo que hacerlo, que criticó y que también supo emocionar. Una retirada bellísima fue clave en su encanto.

Segunda, apenas 15 puntos por detrás (2746 contra 2761) quedó la última campeona, Asaltantes con Patente, en un podio que completó La Gran Muñeca, en el año en que Aldo Martínez debutó en la categoría como un hilarante candidato presidencial. Queso Magro hizo seguramente su mejor Carnaval y tenía aspiraciones de título, pero se ubicó cuarta; siguieron, en orden, La Nueva Milonga, Doña Bastarda, La Cayetana, Los Diablos Verdes, Curtidores de Hongos, Gente Grande y La Trasnochada, a la que una sanción que causó controversia le arrebató el 30 por ciento del puntaje.

La murga había recurrido el fallo y solicitado la suspensión de la Noche de Fallos, sin suerte. La penalización fue una aplicación del artículo 39 del Concurso, que interpretó como “injurias de hecho o de palabra” un comunicado en el que la agrupación acusaba falta de garantías por la presencia entre los votantes de Paola Larrama, quien había apoyado “comentarios agresivos e infundados” sobre La Trasnochada.

La gran sorpresa del martes la dio Sociedad Anónima, que por un breve margen de ocho puntos cortó el tetracampeonato de Los Chobys, los grandes favoritos en la categoría de humoristas.

Los liderados por Leo Pacella habían apostado por una propuesta experimental que giraba en torno a Sheila Álvarez, quien se integró al plantel tras ganar un sorteo y sin experiencia alguna en el Concurso. Un mejor rendimiento en la Liguilla favoreció a los de Carlos Barceló, que tenían un texto sólido y un nivel alto en cada uno de los rubros valorados.

Zíngaros, con su celebración de la memoria de su referente Ariel “Pinocho” Sosa, se quedó con el título en la categoría parodistas y, además, fue reconocido con el mejor espectáculo del Carnaval y con el premio individual de figura máxima de la competencia. Fue para Gastón “Rusito” González que, con 32 años, validó su talento parodístico al interpretar al propio Pinocho.

En sociedad de negros y lubolos, Valores consiguió el primer premio de su historia en el Carnaval, una conquista histórica que remató con el galardón de Figura de Oro a Roberto Romero, el actor que fue central en el relato de Familia, el espectáculo 2024.

El martes, la primera en festejar fue Tabú, la revista que reclutó a Florencia Infante como figura de Diana, un espectáculo que sensibilizó al público al abordar la historia de una niña en el trastorno del espectro autista, sin descuidar ninguno de sus rubros.

Con todo, el paso fugaz de Moria Casán fue el inesperado toque final de una fiesta que, otra vez, se despidió con picante, color y una eterna promesa.