La contundente aclaración de Marcel Keoroglian al video viral donde le arrebata el celular a hombre que lo filma

Redacción El País
No todo es alegría para Marcel Keoroglian. El actor y humorista de La culpa es de Colón, el ciclo de Canal 12 que esta semana llegó a los 700 programas, debió publicar este sábado una aclaración al video viral en el que se ve cómo le arrebata el celular a un hombre que lo estaba filmando mientras hacía ejercicio en el Prado.

El video, originalmente publicado en TikTok por el usuario @fernandoderigo, fue eliminado de la red social pero empezó a circular en X y Facebook hasta hacerse viral. "Hago notas a gente conocida, lo vi, quise hacerle una nota y me agredió mal", dice el texto incluido en el video como si fuera marca de agua.

En las imágenes, el hombre se acerca a Keoroglian, que está acostado en una colchoneta, y empieza a presentar una especie de entrevista sin avisarle al humorista que lo está filmando. "Amigos de TikTok, acá tenemos a un personaje muy conocido de la televisión: Marcel Keoroglian, que está haciendo un poco de ejercicio", comenta. Enseguida, interrumpe su rutina: "Perdón, maestro, ¿unas palabras para TikTok?".

Keoroglian, tratando de controlar su molestia, atina a responderle que su pedido es "inoportuno". "¿Cómo me vas a venir a molestar?", le reclama. Entonces, el hombre, que sigue filmando, le replica: "Ah, pero tan macanudo que se ve en la tele...". El humorista lo interrumpe y dice: "Yo estoy laburando, haciendo cosas, y vos venís e interrumpís tres veces. Además, me filmás sin mi permiso. Es algo raro, ¿no? El respeto es lo primero".

El hombre primero le pide disculpas, pero luego redobla la apuesta y le dice, con tono irónico: "Pensé que eras más macanudo, disculpe la molestia, maestro". El comentario hace que Keoroglian se levante de la colchoneta y se acerque con notoria molestia a la persona. "Usted es un atrevido, porque si me pide permiso la cosa es diferente. Pero usted no tiene derecho de venir a filmarlo", dice justo antes de arrebatarle el celular. "¿Me entiende o no me entiende?", le dice con furia pero tratando de no levantar la voz.

"Si, le entiendo", responde el hombre con tono culposo. Entonces, Keoroglian, con el celular del individuo en la mano, le pide a la mujer que lo acompaña en su entrenamiento que borre las imágenes.

Sin embargo, las tomas no fueron borradas por completo y Keoroglian hizo una contundente aclaración luego de que se viralizaran. A través de su cuenta de Facebook, publicó un largo mensaje titulado "Sobre el video del Prado" en el que, al principio, aclara que el video fue filmado hace un año. Allí, además, escribe: "La historia fue así. El señor de unos 40 años vino e interrumpió la clase, y comenzó a hablar. Yo estaba en el pasto haciendo un ejercicio, la profe paró el cronometro, a pesar del desubique me paré respetuosamente y lo escuché hablar todo lo que quiso, aguantando el aliento alcohólico en mi cara a las tres de la tarde, nos despedimos con abrazo y todo".

"Retomamos la clase y a los quince minutos volvió y se me puso hablar. La profe paró el cronometro, me paro del piso respetuosamente, pero con las bolas por el mismo, lo escucho hablar de toda su vida, nos despedimos con un abrazo y todo", agregó. "La profe retoma la clase y cuando estoy en el piso tratando de hacer abdominales aparece nuevamente, esta vez grabándome con el celular, yo tirado en el pasto le dije que era inoportuno dos veces y le recordé que era la tercera vez que interrumpía, y siguió grabando. Me levanté del piso, le dije que era un desubicado, siguió grabando, le chapé el celu y le pedí a la profe que borrara, pero se ve que no".

"En las redes hay un mar de puteadas, amenazas de muerte, invitaciones a pelear, odio de todos colores y también gente sorprendida por mi fastidio", advirtió. "A mí me parece que nadie tiene derecho a grabarnos y subir videos sin preguntarnos si queremos salir y en qué condiciones queremos salir; hasta debe ser un delito informático".

"Hace 40 años, en mi niñez y adolescencia, abracé esta profesión a pesar de lo que fuera y como me fuera porque ser payaso es mi orgullo, vivo en mi barrio y recorro las calles mi ciudad todos los días, la gente es mi alegría, cruzarme, saludar, sacarme fotos, mandar videitos para un cumple del abuelo, quedarme hablando con quien sea donde sea y principalmente decirles alguna pavada para reírnos un rato. Soy así, más que simpático a veces soy empalagoso, la gente se me para a hablar y me dejan hablando solo", sumó. "No lo hago de humilde, me hace feliz a mí, siempre fui así. Los que me conocen lo saben. Lo que no quiere, decir que en la vida tengo momentos buenos y malos como este que vieron en el video".

"Con respecto al señor que grabó, creo que se equivocó, pero no me hace menos hombre pedirle disculpas y si le tengo que dar otro abrazo se lo doy, no en la clase de gimnasia. Por mi parte fue todo y ahora a tratar de retomar el ejercicio que hace un año que no muevo ni una ceja. PD: Les agradezco mucho si lo comparten. ¡Abrazo!!", cerró.