Es el uruguayo que logró infiltrarse en el hostil mundo del chimento argentino hasta llegar a domarlo. Rodrigo Lussich, quien saltó a la fama como panelista de Viviana Canosa, se convirtió nada menos que en el conductor de uno de los principales programas del género en la vecina orilla, Socios del Espectáculo por El Trece. En un breve paso por Punta de Este para entrevistar a Susana Giménez por su despedida de los escenarios, el comunicador hace un repaso de la actualidad y apunta contra Flor de la V, con quien se cruzó mediáticamente luego de coincidir con ella en suelo uruguayo. “Habla mal de la gente a sus espaldas”, sentencia.
-¿Cómo fue tu paso por Punta del Este para entrevistar a Susana Giménez?
-La estadía fue específicamente para entrevistar a Susana. Llegué por Carrasco y fui directamente a hacer la nota. Punta del Este estaba precioso como siempre. No pude ni ver a mi familia, pero siempre es lindo estar ahí. Mis ancestros fundaron Punta Ballena, así que siempre tengo ese guiño familiar.
-¿Cómo la viste a ella?
-Me sigo sorprendiendo con Susana Giménez. ¡Uno está acostumbrado a cruzarse cada cachivache en Buenos Aires que hace cinco minutos que tiene eso que llaman “fama”! En cambio después uno ve a Susana espléndida, después de estar dos horas haciendo notas. La vi fresca, atenta, ocurrente en las respuestas. Sabe tratar: te habla como si te conociera de toda la vida. Uno todavía se sorprende de ese ángel, ese brillo que tiene solo ella y que por eso es Susana Giménez.
-¿Cómo ves a la televisión actual como un espacio para el que pueda desembarcar ella con su clásico programa?
-La televisión está pobre. La televisión, el país y la realidad. Ella se acostumbró hace rato a que la cosa está más difícil y que ya no puede pretender hacer el programa que hacía en los 90. La gente igual la sigue eligiendo y por lo que ha dicho tiene pensado volver el año que viene.
-Florencia De la V también viajó para entrevistar a Susana y después hubo cierta tensión entre ustedes: trascendió que ella habría pedido no cruzarse con vos y vos la criticaste fuertemente en el programa.
-No le doy mayor trascendencia que a la anécdota en sí misma. Ella se maneja de esa forma: pide no cruzarse y tiene actitudes de diva que tienen que ver más con su pasado en el teatro de revista que como conductora de un programa de este género. Nosotros si nos decimos algo es a través de la tele, pero ella está acostumbrada a hacerlo a las espaldas. Por eso digo que le falta tomar mucha sopa para aprender a hacer chimentos e instalarse en el género. Yo he sido bastante crítico con ella incluso antes de que llegue a conducir Intrusos y desde ese momento quedó muy ofendida conmigo. A partir de eso intenta no cruzarse o no hacer referencia a nosotros. Me tiene sin cuidado.
-¿Qué balance hacés de estos dos primeros años de Socios del Espectáculo en El Trece?
-Si Dios quiere vamos para el tercero. Estoy contento. Si la tele que le pueden ofrecer a Susana es pobre, imagínate lo que queda para un programa de la mañana como el nuestro. Dentro de ese panorama y en el contexto de El Trece que viene de dos años muy difíciles, tenemos una buena performance y estamos en competencia. Hay días y días. En este medio se trata de rodar, un día estás arriba y al siguiente abajo, pero seguís rodando. Mientras estés arriba de la rueda se puede pedalear.
-Este año incursionaron con Adrián Pallares en un formato teatral bajo la obra Dos hombres buenos, ¿cómo es esa experiencia?
-Nos parecía que nuestro formato tenía una estructura de show como para hacer algo en teatro. Igualmente no es la versión teatral del programa ni un espectáculo de chimentos como hacían Rial o Polino. Si bien tiene alguna cosa sobre famosos, es un espectáculo de humor ligado al stand up con baile y muchas anécdotas. Hicimos gira en el interior, tuvimos una fecha en Calle Corrientes en la que llenamos el teatro y estamos arreglando para llevarlo a Montevideo.
-Vos sos actor, ¿pero cómo se desempeña Pallares en ese rol sin experiencia en el escenario?
-Sorprende lo suelto que está, baila, tira chistes, hace remates. Él se ha soltado mucho en el transcurso del programa.
-¿Cómo has visto la llegada de Marcelo Tinelli al canal América?
-Teniendo en cuenta las expectativas de América fue positivo porque subió el número del canal. Era obvio que eso iba a pasar. Este Tinelli le es más funcional a un canal como América que a un canal líder. Y América es un canal que tiene mucho rebote. Más allá de lo que diga el número de la planilla, tiene mucho alcance con repercusión en redes y reproducciones virtuales. Eso le viene bárbaro a él. Además es el canal de los chimentos y Tinelli tiene el principal programa de chimentos de la televisión. A lo largo de los años nos mató a todos porque el gran programa de chimentos con todos los famosos lo hacía él.
-¿Qué te parecieron los participantes uruguayos de esta edición del Bailando?
-No veo mucho el programa. Disfruté muchísimo las performances de Maxi De la Cruz. Es un capo, un consagrado. Es un cómico impresionante con mucho carisma que ya tiene el cariño de los uruguayos y se a ganar el de los argentinos que todavía no lo conocen. Se le van a abrir un montón de puertas. A Mónica Farro la quiero, la conozco de toda la vida. A Fernanda Sosa no la llegué a registrar demasiado y ya quedó eliminada. Es uno de esos personajes que nadie recordará por su paso por el programa de Tinelli. Diría lo mismo si fuera argentina o de otro país. No pasó nada con ella.
-¿Qué sensación te dejó el escándalo en torno a Martín Insaurralde, el dirigente que quedó en la mira de la Justicia por las fotos en un yate con Sofía Clerici?
-No me sorprendió, como no me sorprende nada de ningún político.
-¿Y te sorprende de Jésica Cirio, su exesposa que también está siendo investigada?
-Tampoco. Estaba casada con un político, sabía de dónde venía la plata y cómo la ostentaban. Es cierto que ella tiene su carrera y gana muy bien, pero no hay dudas de que sabía al lado de quién estaba. Está repleto de políticos que suben modelos a yates y a aviones privados para pasear por el mundo. La diferencia está en que algunos son más torpes que otros. No lo digo por Jésica, pero hay chicas que hicieron su dinero acompañando a estos políticos o a empresarios. Ninguno tiene la declaración jurada al día. Lo que pasó con Insaurralde es que la de él era demasiado obscena. Pero ninguno dice lo que tiene. Si empezamos a buscar no se salvan ni los del gobierno ni los de la oposición ni ninguno. A toda la gente que odia al peronismo esto le cae como anillo al dedo, pero si mañana cae uno del otro lado espero que se indignen con la misma furia. Están todos sucios como una papa.