"Mi cuñado": Brandoni y Darín en su mejor sociedad para la comedia y el enojo de uno de ellos cuando la repusieron

Redacción El País.
La televisión argentina de comienzos de los años noventa tuvo en Mi cuñado una de sus comedias más recordadas y queridas. Estrenada en 1993 por Telefé, la serie reunió a dos gigantes de la actuación: Luis Brandoni y Ricardo Darín, quienes consolidaron una dupla actoral que ya había mostrado química en el cine y el teatro, pero que en la pantalla chica alcanzó una popularidad masiva. Bajo la dirección de Carlos Olivieri, la ficción se convirtió en un fenómeno de rating y en una referencia obligada dentro de la comedia costumbrista argentina. En Uruguay se emitió las noches de viernes por Canal 4.

“Mi cuñado” cuenta la historia de Roberto Cantalapiedra (Luis Brandoni), quien mucho tiempo después de quedar viudo y con su hija Lili (Cecilia Dopazo), conoce a Andrea Fornari (Patricia Viggiano), con quien comienza una relación hasta llegar al matrimonio, sin saber que ese día recibiría lo que podría llamar el peor regalo de su vida: la llegada de su cuñado Federico “Chiqui” Fornari (Ricardo Darín), quien le dará muchos dolores de cabeza.

El contraste entre ambos mundos era la esencia del humor: mientras Roberto buscaba el orden, la disciplina y el respeto por las normas, Chiqui se movía en la informalidad, siempre encontrando atajos para evitar responsabilidades y vivir de la manera más cómoda posible.

La convivencia entre ambos derivaba en todo tipo de enredos, discusiones y situaciones hilarantes. Sin embargo, más allá de la comicidad, la serie también exploraba con ternura la relación entre dos hombres que, a pesar de sus diferencias irreconciliables, terminaban construyendo un vínculo de afecto y complicidad.

“Mi cuñado” funcionaba no solo por la eficacia de los guiones, que combinaban el gag rápido con situaciones de enredo, sino sobre todo por la química entre Brandoni y Darín. Brandoni aportaba la solidez de un actor con vasta experiencia en comedia televisiva y teatral, mientras que Darín, ya consolidado, desplegaba un carisma arrollador y un timing cómico que sorprendió a quienes solo lo conocían por su faceta dramática.

El elenco se completaba con figuras como Cecilia Dopazzo, como la hija de Roberto Cantalapiedra, Patricia Viggiano, Leonardo Vilches y la uruguaya Henny Trayles, entre otros.

La serie fue un éxito rotundo en audiencia, logrando altos niveles de rating y convirtiéndose en uno de los programas más vistos de 1993 y 1994, tanto en Argentina como Uruguay. También recibió premios y reconocimientos, entre ellos el Martín Fierro a la Mejor Comedia, confirmando su lugar destacado dentro del panorama televisivo de la época.

Telefé reprogramó la serie Mi cuñado a casi 20 años de su estreno. Fue en el año 2012 pero a uno de los protagonistas no le cayó muy en gracia esta medida en la programación del canal argentino.

“Me sorprendió. A Francella le han hecho lo mismo varias veces, ¿no? Pero en este caso no entiendo bien a qué necesidad responde. Nos metieron en un paquete con El superagente 86 y la Pantera Rosa. Es un combo de caricaturas (risas). Puede que me equivoque, pero creo que es un programa que puede quedar un poco anacrónico”, aseguró.

“Hubiera preferido que no lo repusieran porque ese programa significó mucho para mí. Dejé la piel ahí y no quiero que quede una imagen distorsionada”, añadió.