Publicidad

Martín Kesman: "Me echaron a dos semanas de ser padre, fue muy jodido"

Compartir esta noticia
Martín Kesman junto a sus hijos León (3 años) y Sofía (2 meses). Foto: Marcelo Bojour
Nota a Conrado Hughes Alvarez, contador publico uruguayo director de Gestam Uruguay, empresa dedicada a la gestion de servicios, en su domicilio en Montevideo, ND 20210909, foto Marcelo Bonjour - Archivo El Pais
Marcelo Bonjour/Archivo El Pais

NOTA DE TAPA

El periodista habla de su nueva vida dedicado casi exclusivamente a su familia a dos meses de su salida de Teledoce, canal que había sido su hogar por casi 20 años.

Martín Kesman junto a sus hijos León (3 años) y Sofía (2 meses). Foto: Marcelo Bojour
Martín Kesman junto a sus hijos León (3 años) y Sofía (2 meses). Foto: Marcelo Bojour

Dos meses después de su polémica salida de Teledoce, el periodista Martín Kesman analiza el proceso con serenidad. Evalúa que tiene más tiempo para dedicarle a su familia, en un momento especial tras convertirse en padre de Sofía, su primera hija. Pero a pesar de no guardar rencores, la herida por la desvinculación no está del todo cicatrizada. “Me echaron dos semanas antes de ser padre, fue muy jodido”, recuerda.

En un diálogo íntimo, el relator de Universal cuenta los entretelones de la ruptura con el lugar que fue su casa durante casi 20 años. También habla de su nueva vida luego de dejar de trabajar de lunes a lunes para pasar a ser un papá dedicado al hogar y al cuidado de Sofía y León, su otro hijo de tres años. “Me reconozco en él porque es muy familiero”, señala el comunicador que lleva el apellido Kesman tatuado sobre su espalda.

-¿Cómo estás viviendo esta etapa de tu vida, después de tu salida de Teledoce y haber vuelto a convertirte en papá?

-Miro la mitad del vaso lleno. Perdí rutina, perdí la televisión que es un medio que me encanta, perdí trabajar con gente que quiero; pero gané mucho más. Gané tiempo para estar con mi familia.

-¿Cómo fue reencontrarte con la paternidad al recibir a Sofía cuatro años después del nacimiento de tu primer hijo León?

-Bien, nos dividimos las tareas en casa. Sofía igualmente se porta muy bien, es más santa que León. En el primer hijo uno encara todos los miedos, y en el segundo es distinto porque ya tiene más experiencia. Aparecen cosas nuevas como los celos, tener que dividirse entre dos hijos. Es toda una cadena de aprendizaje.

-¿En qué aspectos te reconocés en León?

-Primero en lo físico porque es muy parecido a mí cuando tenía cuatro años. Y después en lo familiero. Le encanta estar con los papás, los abuelos, la hermanita. En eso me reconozco un 100%.

-¿Tenés tatuado tu apellido?

-Sí. Tengo tatuados los nombres de mis hijos, las firmas de mis padres, las iniciales de mis abuelos, el apodo de mi hermana y el apellido Kesman en la espalda. El de Sofía me lo hice poco después del alta. Mi suegra fue a casa a verla, y le pedí que me cubriera un ratito. Llamé al mismo tatuador de siempre y le dije “Gonza (Tagliaferro), voy para ahí”.

"Miro la mitad del vaso llena: tengo más tiempo para mi familia", evalúa Martín Kesman a dos meses de su desvinculación de Teledoce. Foto: Marcelo Bonjour
"Miro la mitad del vaso llena: tengo más tiempo para mi familia", evalúa Martín Kesman a dos meses de su salida de Teledoce. Foto: Marcelo Bonjour

-¿Extrañás la televisión?

-Sí. La televisión no es salir y punto, sino preparar, producir y ponerle ganas a lo que uno va a presentar. Yo tengo vocación por esto y es lógico que ya haya pensado en mi vuelta. Me gusta hacer periodismo deportivo en televisión.

-¿Te gustaría volver como periodista deportivo de noticiero o en otro rol?

-Yo hice un canal de La Cocina de Kesman en internet y me encantaría hacerlo por televisión, incluso lo tengo guionado y preparado. Pero eso es un hobby, mi vocación es el periodismo deportivo.

-¿Qué reflexión hacés a la distancia dos meses después de tu desvinculación de Teledoce?

-Simplemente que cuando uno estuvo 19 años en un lugar, o evoluciona o se va. Y yo me tuve que ir. No podía pasar de ocho horas a cuatro y con un 50% del salario como me propusieron. Mucha gente me dijo "estuvieron muy mal en pegarte una patada en el ort... a dos semanas de ser padre". La verdad es que sí. Si una empresa echa a una embarazada tiene una indemnización muy grande, pero si echan a un hombre que está por tener familia la única indemnización es el despido. Yo tengo otros ingresos, pero hay muchas familias en las que el padre es el único ingreso del hogar y la ley no ampara esa situación. A veces hay igualdad para un lado y no para otro. La mujer tiene todo el derecho del mundo a pelear por sus situaciones, pero también lo tiene el hombre. Si el padre de familia queda sin trabajo y la mujer no trabaja se perjudica toda la familia. Si yo no tuviera la radio, me morfaban los piojos.

-Eso desde el punto de vista contractual, ¿desde lo humano quedaste dolido?

-Fue muy jodido. Ya se sabía que iba a ser papá, pero tenían todo el derecho del mundo a echarme si no les servía. No es mi estilo irme con escándalos.

"Si no tenía el trabajo en la radio (Universal), me morfaban los piojos", señala sobre la desvinculación.
"Si no tenía el trabajo en la radio (Universal), me morfaban los piojos", señala sobre la desvinculación. Foto: Marcelo Bonjour

-¿Habías percibido alguna señal que indicara que se podía dar esta ruptura?

-Yo conduje el segmento de deportes de Telemundo de Mañana desde 2005 hasta que me fui al mundial de Sudáfrica en 2010. Hubo cambios y tomé la decisión de no continuar. Seguí como notero y suplente de conductores hasta que (Alejandro) Figueredo se fue a vivir a Estados Unidos y el canal pensó en mí para ocupar su lugar en el noticiero del mediodía. Para aceptar no pedí plata ni ningún aumento, solo una cosa que nunca se me respetó.

-¿Qué pediste?

-Cuando yo viajaba por acontecimientos de campeonatos internacionales, el canal no me daba pantalla. En 2010 yo estaba en Sudáfrica y el canal tomó a otra gente. Tampoco me tuvieron en cuenta para salir al aire en los campeonatos que se disputaron en 2007, 2011, 2013 y 2016. Para los que trabajamos en el fútbol esos campeonatos son la cúspide de lo que se puede tener en materia de coberturas, y yo iba a cubrir por la radio y no podía enganchar mis dos trabajos como hace la mayoría de los que trabajan para radio y televisión. Pedí salir al aire con estos acontecimientos en un acuerdo de palabra que no se respetó. En el Mundial de 2018 sí salí, pero en la Copa América del año siguiente no. Volví de Brasil muy bajoneado. No entendía por qué yo que estaba hace 14 años en el canal no lo conseguía, y sí lo lograba gente que en ese momento tenía tres días en el canal. Pensé en irme, pero fue una bronca pasajera. Después con lo que pasó en la pandemia me ubiqué en el lugar que un año antes me habían mostrado que estaba.

-El año pasado el canal estrenó Polideportivo, donde tampoco tuviste participación.

-Es cierto, pero no me voy a poner a mí como centro cuando tampoco está Jose Carlos (Álvarez de Ron), que fue integrante del verdadero Polideportivo. Él estaba en los planes iniciales y fue despojado del proyecto. Salvo (Alberto) Kesman, el verdadero Polideportivo no era con los que están ahora.

-¿Creés que ser hijo de Alberto te jugó en contra para ganar más espacio al aire?

-Los motivos los saben los que no me tenían en cuenta.

-¿El sindicato se pronunció sobre tu salida del canal?

-No, yo me fui del gremio en 2016 porque se portaron muy mal conmigo. Aquella vez Alejandro Figueredo y Raúl Ortiz habían sido los designados para cubrir la Copa América Centenario y perdieron un vuelo. Cuando yo llegué a acreditarme con mi viejo tuvo lugar un espectáculo increíble que era la entrada y salida de una cancha que se producía cada 72 horas. Yo lo grabé con mi cámara y mi viejo me dijo “ya que estamos grabemos un reporte”. Lo mandamos al canal para respaldar a nuestros compañeros. Después hubo reuniones a nuestras espaldas que derivaron en cuestiones muy feas y agresivas. Cuando yo grabé aquello estaban trabajando dos compañeros del canal, sin embargo después pasó el tiempo y cuando se cubrieron el mundial de Polonia y la Copa América de Brasil se hizo sin la presencia de ningún camarógrafo del 12. No vi a nadie del sindicato quejarse.

-¿Había algo personal en tu contra?

-Si pasó algo anteriormente nunca me lo comentaron, ni a mí ni a mi padre.

-Yendo a lo deportivo, ¿considerás que Óscar Washington Tabárez tiene que seguir al frente de la selección?

-Si se va, ¿quién viene? Hay que reunir las aptitudes para ser escuchado por jugadores que forman parte de un proceso y conocen una metodología de trabajo. Tabárez puede gustar o no, pero desde que apareció en 2006 puso la casa en orden. En 1994 no fuimos al Mundial, en el 98 tampoco, en el 2002 fuimos un ratito y en 2006 tampoco fuimos. Después de que llegó Tabárez fuimos en 2010 y salimos cuartos, en 2011 ganamos la Copa América, en 2014 volvimos al Mundial y en 2018 también y fuimos la selección sudamericana mejor ubicada. ¿Tan malo es?

-¿Cómo es tu relación con él?

-Me llevo bien y creo que es un buen hombre. Me saludo con un abrazo y un beso. Él se ha manejado con mayor distancia para con la prensa nacional que internacional y eso responde a que tuvo abundantes reconocimientos en el exterior. Él tiene el récord de ser el técnico con más cantidad de partidos, y es movilizante el amor y el esfuerzo físico que le pone a su profesión. Acá en Uruguay, sin embargo, le hacen memes con la silla.

"Yannuzzi fue mi tío y el mejor comentarista que yo conocí. No tenía ataduras ni pelos en la lengua", recuerda sobre el periodista fallecido el pasado domingo. Foto: @mkesman
"Yannuzzi fue mi tío y el mejor comentarista que yo conocí. No tenía pelos en la lengua", recuerda sobre el periodista fallecido el pasado domingo. Foto: @mkesman

-¿Cómo definirías tu vínculo con Enrique Yannuzzi, que falleció el pasado domingo?

-Fue mi tío y el mejor comentarista que yo conocí. Yo hablaba permanentemente con él. Era un tipo sin pelos en la lengua, sin ataduras, con vocación y una honestidad en lo más alto que puede tener un periodista. El consuelo más grande que me queda es lo que me dijo Pablo, su hijo, apenas me enteré de la noticia. Yo no pude contener el llanto y le dije “¿vos sabés cuánto quería a tu papá?” y me contestó “él te quería como a un hijo”.

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

Martín Kesman

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad