ENTREVISTA

Tiene una infinidad de canciones conocidas en sus 18 años como solista, son muchas más canciones si se cuentan aquellas que escribió para otros artistas que siguen sonando en la radio. El argentino Coti Sorokin atraviesa un gran momento profesional y personal. Le contó a Sábado Show acerca de su nuevo concierto, que será tanto virtual como presencial en Argentina. También habla sobre su carrera, acerca del final del conocido enfrentamiento con Diego Torres por la canción “Color esperanza” y también del disco que ya terminó y espera lanzar en marzo, junto a una gira promocional.

Esta tarde, a las 19.00 reabre sus puertas el Centro Cultural Konex con un show en vivo y al aire libre de Coti & Los Brillantes. Debido a las medidas sanitarias y respetando el protocolo de distanciamiento, el show contará con 100 personas que lo disfrutarán de manera presencial. El concierto también podrá disfrutarse en tiempo real por streaming para todo el mundo. Las entradas están a la venta por el portal del Centro Konex a 660 pesos argentinos.

Igualmente los reflectores estaban puestos frente a Sorokin desde que, el pasado lunes y antes de esta entrevista, el cantante rosarino dio a entender a través de las redes sociales que estaba en pareja con Candelaria Tinelli.

—Es un show distinto, el de hoy mezclando virtualidad y presencialidad.

—Sí, va a mezclar el streaming con poco público y al aire libre, y estamos contento que están reabriendo los teatros. Sé que en Uruguay están más adelantados, pero estamos felices de poder entrar en esta etapa. Igualmente lo vamos a hacer por streaming para que desde ahí puedan ser parte.

—La pandemia los golpeó fuerte a los artistas, pero también a los técnicos y sonidistas.

—Sí, hay mucha gente por cada concierto, directa e indirectamente. El público ve al artista, pero hay cientos de personas que nos acompañan que ahora están volviendo a trabajar.

—Lanzaste “La chica de la esquina rosada”. ¿Cómo fue hacer esta canción durante el confinamiento?

—Fue difícil. Complica muchas cosas de la logística, pero también las nuevas tecnologías permiten avanzar y trabajar a distancia. Eso es algo que esta pandemia nos obligó a prender y descubrir lo importante que es la conectividad. También a ser creativos en otras formas de trabajo.

—Esta pandemia hizo que se borren las distancias, y se puede trabajar con gente en cualquier parte del mundo.

—Sí, grabé mucho para este tema con gente en Madrid, La Plata, Entre Ríos. Todos son amigos que estaban en distintos lados pero que pudimos trabajar. Lo podíamos hacer de antes, pero ahora se instauró un modo de trabajo más global y eso está muy bueno. Tal vez, después de todo esto sea más valorado estar presencialmente en un concierto o en un partido.

—Lanzaste el video de este nuevo corte. ¿Cómo fue grabar en pandemia?

—Fue una filmación hermosa con Los Brillantes y estoy contento de cómo quedó con un vestuario impresionante y arte. También con animaciones muy lindas. Es una historia que empieza y termina, fue de las primeras que escribí en este formato de historia mínima de amor, desencuentro. Por eso la historieta, armar el video como si fuera un comic, así que estoy muy contento.

—Tenés una carrera enorme y llena de canciones conocidas. ¿Cuándo sentiste que habías alcanzado tu primer éxito?

—No sé, no siento que hubo un antes y un después. Hubo muchos momentos que vienen después de otro. Pero creo que fue cuando salió mi primer disco solista. Ese fue un momento importante porque fue un éxito y tuvo canciones que siguen siendo muy pedidas. Es un disco que sigue sonando muy actual. Después hubo mil cosas, conciertos, giras en distintos lados, también los premios que son lindos, pero la parte más hermosa es la obra que uno va forjando contra viento y marea y queda. El artista siempre está buscando hitos y nuevos desafíos. En eso estoy con estos temas y el próximo disco.

—¿Ya tiene fecha el próximo disco?

—Es para marzo. Estamos esperando que se normalicen las giras. Para un artista que está acostumbrado al escenario, a tocar en vivo, me resulta difícil sacar un disco sin hacer una gira. Ya tengo el disco pero voy a esperar a marzo por eso.

—Esta pandemia también te permitió reencontrarte o amigarte con Diego Torres después del lío con “Color esperanza”.

—Sí. Nunca fuimos grandes amigos y habíamos tenido algunas diferencias. La situación de esa canción que fue elegida por el público, surgió la posibilidad de hacer una campaña benéfica y cada campaña que me convocan, están por encima de las cosas personales. Me llamó, me pidió disculpas y sacamos esta nueva versión que tengo entendido recaudó mucho dinero para varias fundaciones. Fue una versión muy linda de la canción.

—Una vez que el público adopta una canción ya no importa ni quién la escribió ni quién la interpreta.

—Claro. Está por encima de nuestras cosas, las diferencias estuvieron pero ya quedó cerrado el tema.

—Con tantas canciones que escribiste para otros artistas, ¿no quedaste con las ganas de hacer alguna para vos?

—No. Las canciones que escribo van a seguir siendo mías para toda la vida. No me pasa eso porque no es real, no es que uno se despide y no escucho más la canción. Las canciones que escribo son parte de mi vida y siempre lo van a ser, la cante quien la cante. Además siempre tengo la posibilidad de cantarla y que sea parte de mi repertorio. No tengo ese sentimiento.

—Pensaba en canciones como “Me muero de amor” que cantó Natalia Oreiro.

—Sí, como con muchas otras también está esa posibilidad.

—Es la ventaja de escribir las canciones. Las cantás cuando quieras.

—De alguna manera sí. Es un lindo trabajo el escribir canciones. Últimamente estoy muy ligado para mis discos y giras y no tengo mucho tiempo para participar en proyectos que me invitan. Estuve participando en algunos featuring, porque tenía el tiempo. Estoy terminando de armar el disco número 11. En ese sentido me absorbe mucho tiempo pero también cada lanzamiento, video clip y gira, a veces no tengo el tiempo que tan honrosamente me invitan a participar.

—Lanzaste 11 discos en 18 años, eso es mucho tiempo para componer. ¿No te parece?

—Sí. Cada disco lleva mucho tiempo y si a eso se le suman los viajes, las presentaciones, promociones y giras y además todo el trabajo que requiere un disco con videos y demás, es mucho trabajo. Igual uno va ganando experiencia, acortando algunos caminos y abriendo paso y eso es importante también.