Redacción El País
Cualquier clásico de fútbol, en cualquier parte del mundo, deja la pasión de los hinchas y de los jugadores a flor de piel y puede que los partidos terminen con el ambiente un poco caldeado. El derbi entre Cercle Brugge y Club Brugge por el fútbol de Bélgica no fue la excepción y mucho menos después de lo que hizo Ardon Jashari.
El futbolista suizo de 22 años fue titular y una de las figuras del partido brindando una asistencia para uno de los tres goles con los que Club Brugge le ganó 3-1 a Cercle Brugge. El espectáculo de Jashari no solo ocurrió durante los 90 minutos, también siguió una vez finalizado el encuentro.
Apenas terminó el partido, Jashari tomó una bandera de Club Brujas y, en cancha de su acérrimo rival, comenzó a correr con una bandera de su equipo cual conquistador e intentó clavar el estandarte en la mitad de la cancha.
Su rivales explotaron. El arquero del Cercle, Maxime Delanghe, reaccionó pateando la bandera aún en el piso, luego se encargó de sacarla, y uno de los futbolistas del equipo verdinegro empujó en repetidas ocasiones al joven Jashari que fue defendido pro sus propios compañeros.
Gracias a la victoria en el derbi, Club Brujas quedó segundo aunque está aún a nueve puntos del líder Genk y este miércoles definirá su suerte en Champions League cuando visite a Aston Villa desde las 17:00 por el partido de vuelta de los octavos de final que los tiene en desventaja de 3-1.
Al dejar la cancha camino a vestuarios, Jashari fue silbado y abucheado por el público local y el joven suizo respondió mostrando y besando el escudo en su camiseta.
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