CATAR 2022

Cómo olvidar aquel 16 de julio de 2011. Justo ese día, fecha patria para los futboleros uruguayos por recordarse el Maracanazo de 1950, la Celeste dio otro golpe sudamericano y Mundial. En Santa Fe, en el estadio de Colón llamado el Cementerio de los Elefantes, Uruguay eliminaba a la anfitriona Argentina en la Copa América y empezaba su andar hacia lo que sería la consagración número 15 a nivel continental.

Cómo olvidar la definición por penales, en la que Fernando Muslera se lució al detenerle el disparo a Carlos Tévez que terminó siendo la diferencia. Diego Forlán, Luis Suárez, Andrés Scotti y Walter Gargano habían puesto sus tiros en la red, pero faltaba el último. Y allí fue Martín Cáceres, con su habitual paso cansino como si lo que estuviera en juego no fuera algo trascendente, a ejecutar el quinto penal. No falló y valió la clasificación a semifinales.

El Pelado era una de las piezas fundamentales del equipo por su versatilidad. Tanto así, que en 2013 Óscar Tabárez, en una conferencia de prensa previo a un partido en el cual Cáceres estaría ausente, expresó que tenía un problema difícil de resolver porque era el Luis Suárez de la defensa.

Es cierto, pasaron ya ocho años desde entonces, aunque en 2017 el técnico lo  refrendó porque el futbolista surgido en Defensor Sporting seguía siendo vital. En el inicio de las Eliminatorias para Rusia 2018 Uruguay le ganó por primera vez en la historia a Bolivia en La Paz y el Pelado había marcado, algo que repitió luego ante Chile.

La cuestión es que Cáceres (34 años igual que Luis Suárez y Edinson Cavani) hoy ya no entra tanto en la consideración del técnico celeste. En lo que va de las actuales Eliminatorias ha disputado seis de los 11 partidos y todos como titular, pero básicamente cubriendo ausencias.

Luego de haber jugado en todas las posiciones de la retaguardia, ya que fue lateral por ambas bandas, defensa en línea de cuatro y stopper en línea de tres, actualmente Cáceres es la última opción de Tabárez en el fondo. Repasemos:

Diego Godín y José María Giménez son los centrales titulares, pero ante sus ausencias han jugado Ronald Araújo y Sebastián Coates. En el lateral derecho el dueño del puesto es Nahitan Nández y como alternativa ha aparecido Giovanni González, mientras que para marcar la banda izquierda el técnico ha optado por Matías Viña o Joaquín Piquerez.

Otro dato: Cáceres no había entrado en la convocatoria para la pasada triple fecha, pero fue finalmente llamado ante la lesión a último momento de Coates. Y en la actual triple fecha quedó afuera del banco en el partido ante Colombia disputado en el Gran Parque Central.

Para el juego de este jueves ante Brasil estará en el banco porque es el único zaguero que habrá como alternativa ante las nuevas lesiones de Araújo y Giménez. Otro punto significativo es que para el partido ante los brasileños y luego de la goleada sufrida ante Argentina, Tabárez recurre a los de la vieja guardia (Fernando Muslera, Godín, Coates, Suárez y Cavani) pero no a él, que es el restante sobreviviente de la Copa América 2011.

Los años pasan y los ciclos se cumplen. Tabárez ya dejó entrever que Catar 2022 (en caso de clasificar) será su último trabajo al frente de la selección ("yo voy a seguir así por lo menos en el poco tiempo que me queda", dijo el martes en conferencia de prensa) y seguramente junto con él pondrán fin a su carrera como celestes los que quedan de la última Copa América ganada. La duda a esta altura es si Cáceres llegará a ser parte de la eventual presencia uruguaya en la Copa del Mundo que se viene, porque ya no es el Suárez de la defensa.