Redacción El País
Iban solo 10’ de fútbol en el Parque Saroldi cuando llegó la primera jugada polémica de la tarde, en el partido entre River Plate y Peñarol por la cuarta fecha del Torneo Intermedio.
La incidencia fue por un posible penal para el Carbonero por mano de un futbolista darsenero adentro de su área, por la que debió intervenir el VAR.
Peñarol salió rápido de contragolpe tras una pelota que recuperó David Terans por el sector izquierdo del campo propio, y enseguida descargó para Leo Fernández que apareció sin marca en el círculo central.
El 10 del Manya avanzó con la pelota y apenas cruzó la mitad de la cancha, mandó a correr a Javier Cabrera por derecha, que antes de llegar al fondo y ante la marca del marcador de punta de River, Franco Cabrera, tiró un centro bajo que intentó controlar Maxi Silvera en las puertas del área grande.
El delantero de Peñarol tuvo que retroceder pasos más atrás del punto penal para alcazar la pelota, que mientras iba en el área rebotó en el codo de Nicolás Ramos.
El árbitro Javier Feres dejó seguir la jugada y Peñarol no pudo finalizar la misma. Pero cuando paró el partido, fue a revisar la incidencia luego de ser alertado por el VAR que podía tratarse de penal para el aurinegro.
Al cabo de pocos segundos, Feres determinó que no se trató de penal sancionable, a pesar del contacto en el brazo del futbolista, ante el malestar del público de Peñarol que reclamó desde las tribunas del Saroldi.