"Es una persona que no se casa con nadie y eso cuando dirigís un club grande es muy importante porque hay un montón de cuestiones”, indicó Juan Pedro Damiani a Ovación en las horas previas del arribo de Diego Aguirre como nuevo entrenador de Peñarol.

El expresidente aurinegro lo conoce, y mucho, y sabe que es un entrenador al que no le pesa tomar decisiones cuando sus equipos lo necesitan y como ya lo hizo alguna vez en el aurinegro, también lo está demostrando en su actual pasaje por la institución mirasol.

De hecho, ya tomó una decisión muy importante el día antes del partido de la pasada jornada ante Fénix y fue que no incluyó a Carlos Sánchezen la lista de convocados. La ausencia del Pato fue una de las novedades de la nómina presentada por el técnico ya que más allá de que no siempre fue titular, es uno de los hombres más experientes que hoy tiene la institución en su plantel.

Lo propio hizo al momento de dar a conocer el once inicial que saltó al campo de juego en el Parque Capurro, sobre todo por la inclusión de algunos futbolistas y la posición de otros.

Aguirre no dudó en adelantar a Matías Aguirregaray, un hombre de su confianza, para pasar a jugar en zona de volantes en un momento donde las lesiones y los rendimientos hacían que ese sector del campo estuviera en el debe.

Y a su vez, también dejó fuera del equipo a Sebastián Cristóforo quien integró el banco de suplentes luego de ser un habitual en el mediocampo junto a Damián García que en la pasada jornada fue acompañado por Sebastián Rodríguez.

Otra de esas decisiones fuertes y que siempre suenan cuando se toman se dio a los 35’ cuando no dudó y sacó a Bruno Bentancor a quien le había dado la titularidad.

“Son circunstancias, Bruno estaba con amarilla, con riesgo de una roja y el cambio fue básicamente por eso porque no me había gustado el rendimiento en general del equipo”, aseguró Diego Aguirre en conferencia de prensa tras el encuentro sobre una variante que le permitió ingresar a Franco González de correcto partido.

Sabido es que Diego Aguirre es un entrenador, como lo dijo Damiani, que “no se casa con nadie” y que cuando tiene que tomar decisiones que entiende que son a favor del equipo, las toma. Ante Fénix no dudó si su mano ya se nota.