ENTREVISTA

Egidio Arévalo Ríostiene 40 años y, aunque está sin equipo, no se considera retirado. Aún hoy espera que le llegue alguna oferta para seguir dentro del campo de juego y extender por un tiempo más su carrera.

La última temporada militó en el Sacachispas de Guatemala, pero hace dos meses volvió a México - donde está instalada su familia - y se prepara para que el día que tenga que retirarse como futbolista su vida siga vinculada al deporte.

“Por ahora estoy esperando a que se abra un nuevo período pases para ver si sigo jugando o si dejo el fútbol”, comentó el Cacha a Ovación desde su país de adopción.

El viernes, el mediocampista dio uno de los exámenes del curso y continúa sus estudios para obtener su licencia de entrenador pensando en el futuro en un nuevo rol.

“Estoy finalizando el curso. Ya terminé la primera parte y queda otra. Pero la intención es seguir metido en el fútbol y hacer la carrera de entrenador. Por ahora estoy con ese tema y si sale algo para seguir jugando, lo haré y si no me dedicaré al estudio y hacer el curso”, reveló.

“Salir de la noche a la mañana de las canchas, va a ser complicado, pero bueno, tenemos la oportunidad de hacer el curso de director técnico como una oportunidad para seguir vinculado y es ahí donde veo el futuro”, agregó.

Su mente está todavía en ser futbolista, no conformó cuerpo técnico y aún no sabe qué equipo le gustaría dirigir, lo primero es prepararse para un nuevo desafío.

Sobre la experiencia en Guatemala, explicó que se lo tomó para disfrutar los últimos años de la carrera. “Me llamaron nuevamente del equipo que había estado -Sacachispas- para ver si quería formar parte de proyecto que tenía el nuevo entrenador y le dije que sí. Fue una aventura nueva y muy buena, porque intenté ayudar a los más chicos del plantel. Como no se lograron los objetivos tuve que regresarme nuevamente a México y ahora a ver qué sale”, sostuvo.

Cuando evalúa los pasos de dio en su carrera y el tiempo que permaneció en cada equipo, el Cacha aseguró que no tiene cuentas pendientes.

“Jugué e hice todo lo que me gustaba. Estuve dónde y cuánto tiempo quise; disfruté cada momento en los equipos que estuve y los aproveché al máximo. No me quedaron pendientes, todo lo que jugué lo hice al máximo por completo y disfrutar fue lo más lindo de todo”, subrayó.

Arévalo Ríos fue referente de la selección uruguaya durante muchos años y pudo levantar varios trofeos a nivel de clubes. La entrega es lo que marcó su trayectoria, ese mediocampista incansable que iba detrás de cada pelota y que le valió integrar el equipo ideal de América y del fútbol mexicano en diferentes ocasiones. Según él, su entrega incansable no es una característica personal, sino algo que comparte con todos sus compatriotas: “Creo que todos los jugadores uruguayos son así, tratan de dejar todo y abrirle las puertas a quienes vengan después para que puedan sumarse a equipos internacionales”, afirmó.

Respecto a que cada vez hay menos volantes con sus características, explicó que entiende que este fenómeno está vinculado a que el fútbol cambió en los últimos años. “Va modificándose, aparecen futbolistas con otras características y no tanto de lucha, como antes. Ahora el mediocampista tiene más juego, de ir y venir; la parte de la lucha que es la que compartíamos en las generaciones anteriores tal vez se está perdiendo un poco, pero así es el nuevo fútbol y hay que adaptarse a todo”, indicó.

Arévalo Ríos pasó por el fútbol argentino, paraguayo, peruano, brasileño, estadounidense e italiano. Sin embargo, donde encontró su lugar definitivo fue en México, tanto que incluso accedió a la nacionalidad de ese país y lo convirtió en su hogar tras casarse con una mexicana y tener dos hijos.

“En 2007, la primera vez que llegué al fútbol mexicano, me adapté rapidísimo y disfruté del momento y el equipo en el que me tocó estar en cada etapa”, subrayó.

El futbolista aseguró que muchas veces sus colegas no ven la plaza mexicana como competitiva y piensan en Europa, pero que desde adentro se vive de forma diferente.

“Hay mucha competencia y no hay que dudar en venir a este fútbol. Siempre estuve muy cómodo y no tuve problema de pasar de un equipo a otro. No pensé en irme a otros países sin pasar por varios equipos aquí y cada vez que estuve fuera quise regresar porque me siento muy a gusto en el fútbol mexicano”, concluyó el futbolista.