Kate Winslet

Ambientado en los años cincuenta, la película de la cineasta australiana Jocelyn Moorhouse estrenada en 2015 se encuentra entre las tendencia dentro de la popular plataforma de streaming.

El domingo se estrenó "El régimen", la nueva miniserie satírica de HBO y Max, con Kate Winslet como la tirana de un país inventado. El creador y la actriz hablan del proyecto y aclaran: "No es un programa de actualidad".

CLARÍSIMA la nacion / GDA Es una de las actrices más talentosas, versátiles y exitosas de su generación. Sin embargo, hay espectadores que no le perdonan a Kate Winslet las decisiones que toma en relación a su apariencia. En una reciente entrevista, la protagonista de Titanic, de 47 años, se hizo eco de esas críticas y redobló la apuesta. "No voy a pedir disculpas por lucir como un desastre", dijo en el podcast Woman’s Hour, de la BBC. Parte de las críticas surgieron al verla interpretar a una oficial de policía pueblerina en la serie Mare of Easttown. Como exigía la trama, la actriz no dudó en mostrarse casi al natural, con el pelo recogido y ropa holgada, algo que, según algunos defensores a ultranza del glamour de cartón y a cualquier precio de Hollywood, una estrella no debería hacer. "Nunca harían tanto alboroto por la apariencia de un actor masculino, ¿verdad?", preguntó Winset en el podcast. De esta forma marcó, otra vez, el doble estándar a la hora de juzgar a las estrellas masculinas y femeninas. Mare of Easttown "Me causa gracia la crítica. De hecho, tenía maquillaje puesto mientras interpretaba a Mare. Y cuando encaré mi siguiente proyecto, I Am Ruth, pensé: ‘Bueno, solo tengo una opción, ir un paso más allá'. Allí no solo no usé nada de maquillaje, sino que usé el cabello recogido en una cola de caballo, como lo hago todos los días de mi vida", reveló. "Me preocupa apasionadamente destacar los temas de los que es necesario hablar y de los que quizás a la gente le resulte difícil hablar", dijo y agregó: "No tengo miedo de parecer un desastre la mayor parte del tiempo. Quiero decir, ¿quién se maquilla mientras hace la carrera escolar? Yo no". La actriz reconoció que a los 40 cambiaron sus prioridades y dejó de preocuparse por cosas triviales, como su apariencia. De hecho, esta semana dejó una vez más en evidencia que no piensa hacerse demasiado problema por seguir las reglas de etiqueta de Hollywood, cuando volvió a usar, en el estreno de Avatar: el camino del agua, un vestido que ya había lucido siete años atrás. Se trata de un traje gris perlado de corte sirena que ya había llevado en 2015, durante el Festival de Cine de Toronto. "Hay partes de mi cuerpo que ya no hacen lo que quiero que hagan", bromeó en la entrevista. Y aclaró: "Pero hay algo fabuloso en decir: ‘Bueno, así son las cosas’". De todos modos, instó a las mujeres que atraviesan como los 40 a que no sientan esta situación como "el comienzo del declive". "Nos volvemos más mujeres, más poderosas, más sexys", aseguró. "Creo que es asombroso. Vamos chicas, solo tenemos que hacernos cargo de nuestro poder. ¿Por qué no? La vida es demasiado corta", concluyó. Esta no es la primera vez que Winslet les habla a sus congéneres. En el Día Internacional de la Mujer, la actriz aprovechó para compartir su experiencia en la industria del entretenimiento con las actrices que recién comienzan o están esperando su primera oportunidad: "No esperes que el mundo te dé algo que vos misma no trabajaste duro para conseguir. No te van a servir las cosas en bandeja". Y recomendó: "Seguí experimentando y practicando, aunque sea en casa. No actúes delante de un espejo, lo único que hace eso es mostrarte cuáles son tus expresiones faciales. Es más importante empezar desde adentro. Intentá no ser dura con vos misma si no conseguís un papel que realmente querías, simplemente seguí adelante". "No analices demasiado tu aspecto, sólo te acomplejará y se convertirá en una distracción", agregó, y culminó afirmando que lo esencial es "disfrutar". "Actuar es una alegría y un placer. Seguí disfrutando de lo que se siente".

RECUERDO la nacion / GDA Imaginarse a otro actor que no sea Leonardo DiCaprio en el papel de Jack, el galán de Titanic, parece una tarea casi imposible. Sin embargo, la estrella de Hollywood estuvo a punto de perder el personaje que terminó de catapultarlo a la fama, o al menos eso reconoció en los últimos días el director del largometraje, James Cameron. En un video publicado en la revista GQ, en donde realizaba una retrospectiva de su carrera, el cineasta ganador del Oscar dedicó varios minutos a hablar del film inspirado en el hundimiento del "barco más grande del mundo", que se estrenó en 1997 y estuvo en el podio de la película más taquillera de todos los tiempos durante muchos años. Además de hablar sobre su idea inicial de reconstruir todo el barco para la grabación y de su interés por Gwyneth Paltrow para el papel de Rose antes de conocer a Kate Winslet, Cameron se explayó sobre el casting de DiCaprio como Jack, que estuvo a punto de fracasar por la mala actitud del actor durante las audiciones. Leonardo DiCaprio. Foto: Archivo "Hubo una reunión con Leo y luego hubo una prueba de pantalla con él", recordó el director. "La reunión fue divertida porque estaba yo sentado en mi sala de conferencias simplemente esperando a conocer a un actor. Cuando miro a mi alrededor, todas las mujeres de la oficina estaban ahí, todas querían conocer a Leo. Fue muy gracioso". El cineasta dijo que la primera reunión fue bien y que DiCaprio le "encantó a todo el mundo", por lo que le pidieron que volviera para una lectura con Winslet, que ya había sido contratada. Allí, la cosa no fue tan bien o al menos en un principio. "Volvió un par de días después y yo tenía la cámara preparada para grabar el vídeo", rememoró Cameron. "Él no sabía que iba a hacer una prueba, pensó que era otra reunión para conocer a Kate, así que le dije: ‘Ok, vamos a ir a la habitación de al lado, hacemos unas líneas y las voy a grabar’. Y él dijo, ‘¿Querés decir que voy a tener que leer?’. Le dije, ‘Sí’ y él dijo, ‘Oh, yo no leo.’ Le di la mano y le dije: ‘Gracias por venir’", continuó. James Cameron dirigiendo a dos jovencísimos Leonardo Di Caprio y Kate Winslet "Enseguida él me dijo: ‘Esperá, esperá, esperá. ¿Si no leo no consigo el papel? ¿Así de simple? Y yo le dije: ‘Sí ¡Vamos! Esta es una película gigantesca que a mí me va a llevar dos años de mi vida mientras que vos vas a estar afuera haciendo otros cinco proyectos durante el tiempo en el que yo trabaje en la postproducción. Esa es la razón por la que no voy a fastidiarme y tomar una decisión equivocada en el casting, por lo que vas a leer o no vas a conseguir el papel", contó. DiCaprio aceptó leer las líneas que le pedían a regañadientes y se mostró indignado hasta que la cámara estuvo rodando, según afirmó Cameron. “Arrancó y fue como si cada gramo de todo su ser impusiera un sentido negativo al momento, hasta que dije: ‘Acción’. Entonces se convirtió en Jack”, explicó el director. “Kate se iluminó y representaron la escena. Se habían abierto nubes oscuras, y un rayo de sol bajó e iluminó a Jack. Yo dije: ‘Muy bien. Él es el tipo’”. más Titanic. Foto: difusión Hace unos meses salió a la luz un hecho muy poco difundido que ocurrió durante la filmación. Fue un caso de intoxicación masiva que llevó a los actores al hospital y provocó que el propio director del film terminara confundido y con el rostro lleno de sangre. La historia que recrea la tragedia del transatlántico británico, que se hundió en abril de 1912 en las aguas heladas del norte del Océano Atlántico, se grabó en parte en la provincia canadiense de Nueva Escocia. Allí, más precisamente en la ciudad de Dartmouth, se encontraban el 8 de agosto de 1996 unos 50 miembros del elenco y del equipo técnico de Titanic. Participaban en el rodaje de las escenas que en el film transcurren en el tiempo "presente". Kate Winslet fue nominada al Oscar por su papel en "TItanic". Foto: Archivo Cansados por la larga jornada de trabajo, el equipo completo decidió hacer un alto a la filmación alrededor de la medianoche y juntarse a comer. La compañía de catering contratada por la producción sirvió entonces a los presentes una sopa que, según los testimonios posteriores que recogió el medio Vanity Fair, habría sido de almejas, o de mejillones o de langosta. Lo cierto es que la preparación trajo en su interior un ingrediente que distaba mucho de pertenecer al universo gastronómico. Y pronto todos comenzaron a sentir los efectos de lo que habían consumido con la comida. El propio Cameron contó en una entrevista al citado medio estadounidense que tuvo que pararse de la mesa para vomitar. Estaba convencido de que se había intoxicado con alguna "neurotoxina de mariscos paralizante", pero se equivocaba. El director continuó con su relato y contó que al volver al lugar de la cena "no había nadie". Al respecto, señaló: "Estoy de pie frente a los monitores, cerca de la cámara, y la habitación está vacía. Era como La dimensión desconocida".

LISTA fernán cisnero Este es el mundo de las series, nosotros solo vivimos en él. El formato se volvió un lenguaje universal que excede orígenes y culturas. Podrá ser un grupo de ladrones de bancos españoles, un juego mortal coreano, un crimen en los fiordos noruegos o la historia de un ídolo del fútbol pero siempre termina en evento global. La acumulación de plataformas de streaming (en Uruguay hay disponible, fácil, más de media de docena) es un razón del persistente auge. Ayudan la experiencia doméstica y la comodidad de un formato corto para tiempos de atención tan abreviada. Por lo que sea, algo ha convertido a las series, miniseries y hasta telenovelas en fenómenos globales del que hay que ser parte para no quedar afuera de las charlas cotidianas. Esta no es una lista de las mejores porque no hay nada más subjetivo que las series. Hay una para cada uno y es difícil replicar la experiencia sin caer en tecnicismos, aportes cinematográficos, explicaciones sociales que poco aportan a eso de distraerse un poco. El orden es, se avisa, caprichoso. en netflix Fue, más allá de consideraciones personales, lo más importante que se estrenó en el rubro serie en 2021. Al igual que Parásitos, la película de Bong Joon-ho que arrasó en los últimos Oscar prepandémicos, este drama liviano de ciencia ficción está hablando de las disparidades económicas de Corea del Sur que llevan, en este caso, a que haya 456 participantes de un juego mortal convertido en atracción televisiva. De algo de eso hablaba Los juegos del hambre, pero acá el despliegue es más colorido y abarca nueve episodios. Ese comentario social y algunos facilismos le reportaron una base de seguidores global que Netflix evaluó en 148 millones de hogares convirtiéndola en la serie más vista en la historia. Ya hay confirmada una segunda temporada; parecía inevitable. en hbo, hbo max La segunda serie de Kate Winslet para HBO (la otra había sido Mildred Pierce de Todd Haynes en 2011) le dio a la cadena un poco de aire en la competencia del rubro con Netflix. Son siete episodios escritos por Brad Ingelsby y dirigidos por Craig Zobel, sobre una mujer policía (Winslet) en un ambiente económico, social y moralmente empobrecido de pueblo chico. Debe investigar la desaparición de unas muchachas y es una negligente serial. Es un drama fuerte que, a pesar de algunas resoluciones facilonas y líneas narrativas subutilizadas, sabe mantener la tensión de policial sin perder el ojo en el drama personal. en amazon prime video Generó cierto revuelo que alimentó la expectativa por esta versión de Amazon de la vida de Diego Armando Maradona. El escándalo es que sería una versión morbosa y algo amarillista de una vida que, si la vamos a contar en una serie, hay que contarla con morbo y amarillismo. Es, en todo caso, una exaltación aún en sus contradicciones de un ídolo popular y para contarla hay exageraciones y ficcionalizaciones. La cantidad de estrellas que figuran y los alardes de producción, la convierten en un producto muy pensado. Incluso como para saber cómo hacer enojar a unos cuantos. en hbo max No podremos ver, porque está en Apple TV, Ted Lasso, la sitcom con Jason Sudeikis que ya ganó siete premios Emmy, pero por lo menos tuvimos Hacks, la sitcom más premiada en los últimos Emmy. Es la historia del vínculo entre una joven comediante (Hannah Einbinder) que termina al servicio de Deborah Vance (Jean Smart), una estrella del humor que es leyenda viviente en Las Vegas y todo lo intolerablemente caprichosa que puede ser alguien así. Es una típica comedia de malos entendidos que, más o menos se terminan resolviendo en el vínculo entre estas dos mujeres tan distintas. El final, un verdadero cliffhanger, nos tiene a todos esperando la anunciada segunda temporada. hbo Es una serie rara aunque sea sobre las cosas más simples de la vida: es Wilson con su cámara doméstica y su micrófono de segunda mano, saliendo a recorrer Nueva York y dejándose llevar por lo que aparezca. Puede, por ejemplo, terminar en un congreso sobre “el efecto Mandela”, una extraña conspiración que asegura que hay un mundo paralelo en el que, por ejemplo, las marcas se escriben distintas entre otras inconsistencias dignas de Matrix. Wilson escucha y muestra con respeto y cariño a los personajes, por su ciudad y por la vida de los demás y lo hace una experiencia casi zen. hbo, hbo max Es como Dinastía para tiempos así de capitalistas. La serie, creada por Jesse Armstrong, se centra en la familia Roy, los dueños de un conglomerado de medios que se disputan la herencia del patriarca Logan Roy, interpretado con fiereza por Brian Cox. Este año se estrenó la tercera temporada y es Shakespeare en conglomerados globales y con mucho más dinero y mucho más poder que un empobrecido reino en Escocia. Ha sido consagratoria para sus actores de reparto, principalmente para Jeremy Strong que hace de Kendall, uno de los nenes que están detrás de ese trompo. Succession en netflix Hablando de fenómenos globales, uno de los más grandes llegó a su final. En este tiempo, la banda de los mamelucos rojos y las caretas de Dalí, ha vivido aventuras diversas que expandieron la idea más allá de aquel robo a la Casa de la Moneda española. La casa de papel generó estrellas (Úrsula Corberó; Jaime Lorente), modas, parodias y preocupación popular por el destino de gente que responde a nombres de capitales de países como en un tutti frutti. Había ido perdiendo algo de su fuerza pero sus seguidores le hicieron el aguante. en disney+ La entrada al mercado de Disney+ potenció y le dio nuevas vidas a muchos de sus productos estrella. Así, con Wandavision, Falcon and the Winter Soldier, Loki y Hawkeye extendieron el universo cinematográfico de Marvel al formato serie con las mismas estrellas y un despliegue de producción, digamos, cinematográfico. Por la originalidad del formato (es una sitcom) Wandavision debe ser saludada como una concesión divertida al serio mundo Marvel, mientras Loki (con Tom Hiddleston) y las otras dos le dieron vida a personajes que venían pidiendo pista propia. en disney+ Los Beatles son tendencia. Este documental en tres episodios sigue la última sesión de grabación de la banda, centrándose en el proyecto creativo y en la conciencia de que se estaba viviendo un momento histórico de la cultura occidental. Peter Jackson, que tuvo acceso a 55 horas de filmaciones inéditas, se concentra en eso y en las tensiones de una banda que había recorrido el largo camino de una revolución victoriosa y estaba transitando la despedida. Se ha dicho, con razón, que 468 minutos es mucho, pero debe haber sido difícil controlarse ante tanto para elegir. en netflix Creada por Molly Smith Metzler e interpretada por Margaret Qualley (la hippie que lleva a Brad Pitt al rancho en Había una vez...en Hollywood) este es un drama social sobre la lucha de una madre que acaba de salir de una relación abusiva, por proveer a su única hija en ambiente hostil. Consigue trabajo de limpiadora, mientras lidia con una madre problemática (intepretada por Andie MacDowell, la madre de Qualley en la vida real) y posterga sus sueños de ser una escritora. La historia revela un mundo de asistencia social, conflicto familiar que la aleja de cualquier ejemplo edulcorado, que suele ser una tendencia del género. Tiene tres nominaciones a los Globos de Oro, incluyendo mejor miniserie.