Redacción El País
El sur de Europa seguía ayer jueves con su verano infernal, sufriendo una ola de calor que dura ya casi dos semanas e incendios forestales que dejaron un tercer muerto en España.
“Nos golpea de nuevo la muerte de un segundo voluntario que pierde la vida en (la provincia de) León”, lamentó el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, al día siguiente de que Madrid solicitó ayuda a la Unión Europea para combatir los incendios.
El hombre fallecido tenía 36 años y murió como resultado de las quemaduras sufridas cuando acompañaba a otro voluntario de 35 años, que murió el martes. El tercer fallecido es un hombre rumano empleado en una hípica de Madrid. Además, hay miles de personas desalojadas de sus casas por la amenaza del fuego.
El ministro español del Interior, Fernando Grande-Marlaska, explicó, en la televisión pública TVE, que hay 11 incendios en nivel 2 en España (sobre un total de 4 niveles). Algunos podrían ser intencionados o provocados por negligencias, y, con las nuevas detenciones anunciadas por la Guardia Civil ayer jueves, hay ya más de 30 detenidos por este asunto desde inicios de verano.
En unos pocos días, han ardido en España más de 70.000 hectáreas, según las autoridades regionales, una cifra superior a las 42.000 que ardieron en todo 2024.
En lo que se lleva de 2025, han ardido 157.000 hectáreas, lejos aún de las 307.000 que ardieron en 2022, el peor año en décadas.
Antonio Jordán Lopez, especialista en incendios de la Universidad de Sevilla, explicó que el tipo de incendio que sufre España ahora es sexta generación, “tan intenso, rápido e impredecible que parece tener vida propia, capaz de modificar el clima a su alrededor y saltar kilómetros en un momento”.
Los dos aviones contra incendios solicitados el miércoles por la noche por España a la Unión Europea llegaron ya, prestados por Francia.
En primera línea del calentamiento global en Europa, España está acostumbrada a las temperaturas extremas, pero desde hace algunos años se enfrenta a una multiplicación e intensificación de las olas de calor.
Además de Castilla y León, Galicia, la Comunidad Valenciana y Extremadura son motivo de gran preocupación, formando un triángulo ardiente en todo el país.
Mejora en Grecia
En Grecia, donde ardieron 20.000 hectáreas desde principios de verano, los bomberos lograron controlar el incendio que amenazaba Patras, principal puerto griego hacia Italia y tercera ciudad más grande del país. Hay focos “aislados”, aunque el fuego “sigue activo” en los suburbios del este de esta ciudad de más de 200.000 habitantes, según los bomberos.
En otras partes del país, los aviones cisterna luchaban en otros tres frentes: la isla jónica de Zante y la ciudad de Preveza, ambas en el oeste, y la isla egea de Quíos, en el este.
En los Balcanes, los incendios causaron la muerte de al menos dos personas y provocaron la evacuación de miles de habitantes.
El calor sofocante sigue azotando Italia, relativamente indemne por los incendios, y 16 ciudades, entre ellas Roma y Venecia, se encuentran en alerta roja por altas temperaturas.
Los incendios afectan también al norte de Europa, a Inglaterra, a la región de North Yorkshire, donde los bomberos combatían un fuego que se ha extendido unos 5 km2.
“Es probable que permanezcamos en el lugar durante algún tiempo”, pronosticaron los bomberos en un comunicado. AFP
Aumenta la temperatura en el norte
El cambio climático elevó en unos 2°C la reciente ola de calor que afecta el norte de Europa, desafiando así los ecosistemas en una región poco equipada para enfrentar estos fenómenos, declaró ayer jueves la red científica World Weather Attribution (WWA). Finlandia, Noruega y Suecia experimentaron un clima excepcionalmente cálido durante dos semanas en julio, con temperaturas que superaron los 30 °C. EFE