El Ejército ruso tomó en la última jornada otras dos localidades en la región ucraniana de Donetsk, anexionada por Rusia en 2022, según informó ayer domingo el Ministerio de Defensa de Rusia. Asimismo, el presidente ruso, Vladimir Putin dio sus argumentos sobre el conflicto entre su país y Occidente, en una entrevista que mostró su forma de pensar y visión histórica.
“Gracias a la ofensiva de las unidades de la agrupación militar Centro fue liberada la localidad de Mikolaivka de la república popular de Donetsk”, señaló en Telegram el mando militar ruso. La toma de esta pequeña localidad permite a las fuerzas rusas mantener la presión en el sector de Pokrovsk, uno de los principales objetivos rusos en la región oriental de Ucrania.
Además, Defensa señaló que las fuerzas de la agrupación Vostok (Oriente) tomaron la localidad Karl Marx (conocida por los ucranianos como Mirne). Esta localidad está ubicada al suroeste del Chasiv Yar, una ciudad que las fuerzas rusas llevan meses tratando de conquistar, y su captura podría abrir a Rusia una nueva dirección de ataque contra la urbe.
La semana pasada Rusia anunció la toma de seis localidades ucranianas, tres de ellas en la región de Donetsk, cuya ocupación es uno de los objetivos declarados por el mando militar ruso.
Visión de Putin
Las contradicciones entre Occidente y Rusia son geopolíticas y no ideológicas, afirmó este domingo el presidente ruso, Vladímir Putin, al señalar que las tensiones no terminaron con la desintegración de la Unión Soviética ya que los enemigos buscan sacar provecho geopolítico de la Federación Rusa.
“Muchos consideran, y yo también creía, aunque parezca extraño, que las principales contradicciones eran de carácter ideológico”, afirmó en una entrevista a la televisión pública rusa. Sin embargo, argumentó el mandatario, tras la desintegración de la Unión Soviética “la actitud de desprecio hacia los intereses estatales y estratégicos de Rusia se mantuvo”. “Esto está vinculado al deseo evidente de lograr determinadas ventajas geopolíticas. Es más, cuando yo asumí la presidencia tampoco comprendí de inmediato”, dijo.
Putin recordó que pese a todos los intentos de transmitirle los puntos de vista de Rusia a Occidente, este se mantuvo indiferente a sus intereses y preocupaciones. “Para mí se tornó evidente que la ideología tal vez tenía determinada importancia, pero en base de todas estas contradicciones radica en intereses geopolíticos. Esto es lo principal, lo fundamental”, añadió.
Según el mandatario ruso, tras “todas las acciones inamistosas de Occidente hacia Rusia” que siguieron a la desintegración de la Unión Soviética se tornó evidente que “mientras no seamos una potencia independiente, soberana, capaz de defender su futuro, nadie nos tomará en cuenta”.
Putin ha echado en cara a Occidente en reiteradas ocasiones que este prometió al líder soviético que la OTAN no avanzaría “ni una pulgada más” al este, tras lo cual varios países, incluyendo algunos del campo socialista y de la antigua Unión Soviética se sumaron a la Alianza Atlántica pese a las protestas de Moscú.
Zelenski
Ante una mayor ofensiva rusa, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, pidió ayer a todos sus socios que le ayuden a neutralizar la amenaza de los drones rusos, después de contabilizar el lanzamiento de más de 1.800 vehículos aéreos no tripulados por parte de Rusia solo en la última semana. “Siete días de ataques rusos a gran escala contra Ucrania: más de 1.800 drones, más de 1.200 bombas aéreas guiadas y 83 misiles de diversos tipos. Los rusos están intensificando el terror contra ciudades y comunidades para intimidar cada vez más a nuestro pueblo”, escribió enl X.
Zelenski recalcó que los sistemas antiaéreas ucranianas obtienen “buenos resultados” a la hora de interceptar “cientos” de drones Shahed lanzados por Rusia, especialmente a través de los nuevos drones interceptores que ha desarrollado Ucrania. No obstante, Ucrania ha insiste en que necesita más ayuda antiaérea y en todas sus reuniones con sus socios la pide.
Lavrov en conversaciones con China
El ministro de Exteriores de China, Wang Yi, conversó ayer domingo con su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, sobre las relaciones de sus países con Estados Unidos, la situación en Ucrania y otros temas “candentes” de interés internacional.
“Las partes debatieron las relaciones con Estados Unidos y las posibilidades de solución de la crisis ucraniana en correspondencia con los principios de la Carta de Naciones Unidas (...) Fueron abordados otros temas ‘candentes’, incluyendo el conflicto iraní-israelí y la situación en la península de Corea”, señaló el Ministerio de Exteriores ruso en un comunicado.
El ministro de Exteriores de Rusia llegó ayer a Pekín procedente de Corea del Norte en el marco de una gira por varios países asiáticos para participar en el Consejo de ministros de Exteriores de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) previsto para el próximo martes.
Lavrov y Wang sostuvieron “un profundo intercambio de opiniones” sobre temas de interacción en el marco de la OCS y “dedicaron especial atención a los contenidos de la próxima reunión del consejo de jefes de Estado de la OCS y las reuniones de alto nivel en el formato OCS+”, señaló Exteriores ruso. EFE
Ejército ruso incrementó sus ataques
El Kremlin no se niega a las negociaciones indirectas para el fin de la guerra, pero tampoco deja de lado su ofensiva sobre Ucrania. Ha puesto condiciones, consideradas “inaceptables” para Ucrania, y las conversaciones están estancadas. Según Ucrania, los Shahed (drones) son una de las formas que tiene Rusia de prolongar la guerra, los que deberían ser neutralizados para poner en marcha la diplomacia nuevamente. Ucrania informó que, de acuerdo a sus cálculos, Rusia lanza en cada ataque unos 300 drones Shahed, muchos de ellos interceptados. EFE
EFE, AFP/ Moscú y Kiev