BRASIL
Los números de las últimas encuestas levantan la posibilidad de una victoria en primera vuelta del expresidente de Brasil.
El expresidente brasileñoLuiz Inácio Lula da Silva mantiene una amplia ventaja (18 puntos) frente al actual mandatario Jair Bolsonaro faltando casi dos meses para la elección.
Lula, de 76 años, reúne el 47% de la intención de voto para las presidenciales del 2 de octubre, frente a un 29% de Bolsonaro, según los resultados de la consultora Datafolha.
En la encuesta anterior, publicada el 23 de junio, Lula también había obtenido 47% contra un 28% de Bolsonaro.
Bolsonaro, de 67 años, ganó tres puntos entre los más pobres (54% siguen apoyando a Lula, 23% a Bolsonaro) y seis puntos entre las mujeres (46% a favor de Lula y 27% de Bolsonaro), pero perdió seis puntos entre los votantes más ricos (33% prefieren a Lula, 41% a Bolsonaro).
El presidente todavía no parece beneficiarse por completo de las ayudas sociales que anunció su gobierno este mes, como el aumento de 400 a 600 reales (unos 110 dólares) mensuales del programa Auxilio Brasil, antiguo Bolsa Familia creado por Lula, o la transferencia de 1.000 reales mensuales (185 dólares) para camioneros, entre otras.
Faltando dos semanas para el inicio oficial de las campañas, pero ya con numerosas apariciones públicas de Lula y Bolsonaro, las cifras muestran una elección polarizada entre ambos.
Tercero se ubica el centroizquierdista Ciro Gomes, con 8% de los apoyos, seguido por la senadora Simone Tebet (2%), representante de una “tercera vía” que no logra despegar.
En un eventual balotaje, el 30 de octubre, Lula sumaría 55% de los votos contra 35% de Bolsonaro, una ventaja levemente inferior a la registrada el mes pasado (57% Lula, 34% Bolsonaro), según Datafolha.
“Hay una consolidación, los votantes de Lula y de Bolsonaro están bastante convencidos de su voto”, dijo el analista político Adriano Laureno, de la consultora Prospectiva.
Laureno sostiene que cuando la población más pobre empiece a recibir el aumento en sus transferencias (a partir de agosto) y “esa renta de hecho ingrese a la economía, eso genera un efecto de bienestar, aumenta el consumo, el empleo” y eso “puede ayudar a reducir la ventaja de Lula”.
Los números de las últimas encuestas levantan la posibilidad de una victoria en primera vuelta: contando los votos válidos -sin los blancos ni los nulos- Lula suma 52% de las intenciones de voto y Bolsonaro, 32%. Laureno, sin embargo, se muestra “escéptico” sobre este escenario.