Jair Bolsonaro, que prevé regresar a Brasil hoy jueves por primera vez en calidad de expresidente luego de tres meses en Estados Unidos, se encontrará con varios frentes abiertos ante la Justicia.
El expresidente enfrenta cinco investigaciones en el Supremo Tribunal Federal (STF), susceptibles de penas de prisión. Cuatro fueron abiertas durante su presidencia, mientras que en la última es investigado como presunto instigador del asalto a los tres poderes el 8 de enero en Brasilia.
En uno de los casos, Bolsonaro fue acusado por su exministro de Justicia, Sergio Moro, de interferir en la policía para proteger a familiares sospechosos de corrupción. También es investigado por difundir desinformación sobre el sistema de urnas electrónicas.
Las otras dos pesquisas son por haber filtrado informaciones confidenciales de una investigación policial por un ataque cibernético a la Corte Electoral, y por declaraciones sobre la pandemia del covid 19, en las que asoció la vacuna anticovid con un supuesto riesgo de contraer VIH.
Al dejar la presidencia y perder su fuero privilegiado, una decena de pedidos de investigación recibidos por el STF comenzó a ser derivada a primera instancia.
Entre ellos, es señalado por “subversión al orden” por su participación en actos con consignas antidemocráticas el 7 de septiembre de 2021, cuando atacó a jueces de la Corte Suprema. En el caso “muy poco probable” de que fuera condenado de forma definitiva y a las penas máximas por esos delitos, Bolsonaro enfrentaría casi 40 años de cárcel, según Carla Junqueira, doctora en derecho por la Universidad de San Pablo.
Según la ley brasileña, un detenido puede ser encarcelado solo cuando se hayan agotado las instancias de apelación, o bien si un juez considera, durante las investigaciones, que su libertad compromete el proceso.
La primera hipótesis es poco probable a corto plazo, dados los tiempos de la Justicia. La segunda tiene un precedente reciente: en 2019, el expresidente Michel Temer fue a prisión preventiva menos de cuatro meses después de dejar el cargo por supuesto desvío de dinero, pero un tribunal revirtió la decisión de primera instancia al cabo de cuatro días.
Con información de AFP