El nuevo régimen sirio mata “a sangre fría” a unos 500 civiles alauitas en tres días, según ONG

Quienes tomaron el gobierno para “salvar al pueblo” de Bachar al Asad, arremetieron y cometieron “masacres” de “remanente del exrégimen”. Observatorio Sirio de Derechos Humanos los señala duramente.

Miembro de las nuevas fuerzas de seguridad sirias.
“Masacre”. ONG denuncia que el nuevo régimen arremetió contra civiles.
Foto: Bakr Alkasem/AFP.

Agencia EFE, AFP
En medio de la peor ola de violencia desde la caída del expresidente Bachar al Asad el pasado 8 de diciembre, las nuevas fuerzas de seguridad de Siria han ejecutado en los últimos tres días a cientos de civiles de la minoría alauita, a la que pertenece la familia del exmandatario, en las zonas costeras del país.

Según el reporte del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) de ayer sábado, al menos 500 civiles han muerto a manos de las fuerzas de Damasco desde el jueves, cuando grupos insurgentes leales a Al Asad efectuaron un ataque contra las tropas de la nueva administración en la provincia de Latakia, feudo de la familia Al Asad y de mayoría alauita.

Según el OSDH, “532 civiles alautias fueron abatidos en las regiones de la costa siria y de las montañas de Latakia [oeste] por las fuerzas de seguridad y grupos afiliados” desde el jueves, lo que lleva el balance total de estos episodios violentos a 745 muertos, incluyendo 213 miembros de las fuerzas de seguridad y de combatientes leales al clan Al Asad.

Vídeos que circulan en redes sociales, muchos de ellos verificados por el Observatorio y grupos de activistas, muestran a las nuevas fuerzas sirias y a grupos armados aliados disparando a quemarropa contra civiles desarmados y realizando “ejecuciones a sangre fría”.

Ante esta situación y la “masacre” de ciudadanos, entre ellos mujeres y niños, la ONG hizo un llamado a la comunidad internacional “para que adopte medidas urgentes y envíe equipos internacionales especializados de investigación para documentar las graves violaciones que han afectado a los civiles”.

Asimismo, pidió a las autoridades de Damasco que “exijan responsabilidades” a sus efectivos implicados en estas acciones, al considerar que “la impunidad alienta la repetición de crímenes en el futuro, lo que amenaza la estabilidad política y social en Siria tras la caída de Al Asad”.

Las nuevas fuerzas sirias están mayoritariamente compuestas por excombatientes de la ahora disuelta alianza islamista Hayat Tahrir al Sham (HTS), la agrupación que lideró la ofensiva contra Al Asad y cuyas raíces proceden del Frente Al Nusra, la exfilial de Al Qaeda en Siria.

La nueva administración siria no ha reconocido explícitamente estos actos, aunque sí ha afirmado que tomará medidas legales y hará rendir cuentas a todo aquél que haya cometido “excesos” o “actos de venganza” contra la población civil durante las operaciones militares dirigidas a apagar los focos de insurgencia de los grupos leales a Al Asad.

De hecho, el Ministerio de Defensa sirio anunció la formación de un “comité de emergencia” encargado de “seguir las infracciones y mandar a juicio militar a quienes se saltaron las instrucciones de la Comandancia durante la última operación militar y de seguridad”.

Mientras tanto, países como Egipto y Turquía han insistido en la necesidad de iniciar un proceso político en Siria que lleve a elecciones generales, e incluya a todas las comunidades religiosas y etnias, en un momento de máxima tensión exacerbada por las heridas aún abiertas en la guerra civil que asoló el país árabe en los últimos 13 años.

Naciones Unidas

Naciones Unidas pidió este sábado el cese de los combates y la protección de la población civil en las zonas costeras y centrales de Siria, donde el jueves se están produciendo intensos choques entre las fuerzas de seguridad y grupos insurgentes que han provocado la muerte de más de 500 personas.

“Instamos a todas las partes a que cesen inmediatamente las hostilidades y protejan a los civiles, la infraestructura civil y las operaciones de ayuda, de conformidad con el derecho internacional humanitario”, dijeron en un comunicado el coordinador residente y humanitario de la ONU para Siria, Adam Abdelmoula, y el coordinador humanitario regional para la crisis de Siria, Ramanthan Balakrishnan.

Los responsables de la ONU afirmaron que siguen de cerca “los inquietantes acontecimientos en las zonas costeras y centrales de Siria”, donde se están produciendo intensos choques entre las fuerzas de seguridad y grupos de la minoría alauita leales al depuesto presidente sirio, Bachar al Asad.

“Según se informa, miles de personas han sido desplazadas en las zonas costeras”, indicaron en la nota, en la que apuntaron que el impacto de los ataques en la infraestructura civil “es grave” y que seis hospitales y varias ambulancias “han quedado inoperaticos debido a los combates”.

El OSDH denunció que gran parte de los civiles alauitas fallecidos fueron “ejecutados a sangre fría” por las nuevas fuerzas de seguridad sirias y otras agrupaciones aliadas.

Nuevo mandatario promete persecución

El presidente interino de Siria, Ahmed al Sharaa, prometió seguir “persiguiendo a los remanentes del exrégimen” de Bachar al Asad, en su primera aparición pública el pasado viernes tras días de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y grupos leales al anterior mandatario que han dejado más de 500 muertos. “Continuaremos persiguiendo a los remanentes del exrégimen (…) y mandaremos a un juicio justo a quienes hayan cometido crímenes contra el pueblo”, dijo Al Sharaa en un discurso televisado, en el que felicitó a las nuevas fuerzas de seguridad bajo su mando su “compromiso con la protección de los civiles”.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, sin embargo, denunció que durante estos combates las fuerzas de seguridad sirias cometieron “masacres”. La ONG denunció que estas acciones tuvieron lugar en Baniyas, en la provincia de Tartús, donde al menos 60 civiles fueron “ejecutados por un pelotón de fusilamiento”; en la aldea de Al Sher, en Latakia, donde tuvo lugar una “ejecución masiva” o en el pueblo de Al Mujtareya, en la misma provincia y donde 38 civiles “fueron alcanzados por disparos a quemarropa”, según la ONG.

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

Siria

Te puede interesar