Redacción El País
En Estados Unidos las protestas universitarias por la guerra en Gaza comienzan a ceder, pero surgen otros focos de estas manifestaciones en Europa. La tensión en Estados Unidos bajó ayer viernes tras una serie de operativos policiales y el firme mensaje del jueves del presidente Joe Biden para restaurar el orden.
La policía de Manhattan despejó el campamento en la Universidad de Nueva York después del amanecer. Los manifestantes salieron de sus carpas y se dispersaron cuando se les ordenaba hacerlo por altavoz.
La escena parecía relativamente tranquila en comparación con las medidas represivas en otras universidades de Estados Unidos.
Las autoridades universitarias, que han tratado de equilibrar el derecho a la protesta y la atención a las denuncias de violencia y discurso de odio, han pedido cada vez más a la policía que desaloje a los manifestantes antes de los exámenes de fin de año y las ceremonias de graduación.
En las últimas dos semanas se han realizado más de 2.000 detenciones en todo Estados Unidos, algunos durante enfrentamientos violentos con la policía.
El presidente Biden afirmó el jueves que “el orden debe prevalecer”, en sus primeros comentarios sobre las protestas. “No somos una nación autoritaria en la que se silencia a la gente o se aplasta a la disidencia”, dijo Biden desde la Casa Blanca. “Pero tampoco somos un país sin ley. Somos una sociedad civilizada y el orden debe prevalecer”, agregó.
“No debería haber lugar en ningún campus, ningún lugar en Estados Unidos para el antisemitismo o las amenazas de violencia contra los estudiantes judíos”, dijo Biden.
Mientras tanto, han surgido protestas estudiantiles similares en otros países.
En la Universidad McGill, de Canadá, las autoridades del establecimiento exigieron el miércoles el desmantelamiento “sin demora” de un campamento estudiantil. Sin embargo, hasta ayer viernes la policía aún no había tomado medidas al respecto.
En Francia, la universidad de élite Sciences Po París fue el epicentro de las protestas.
Las autoridades educativas pidieron el lunes el desalojo de la Universidad de la Sorbona, símbolo de las protestas de Mayo del 68, y este viernes llegó el turno de otros campus.
Otras universidades también registran una importante movilización en Alemania, Canadá, Suiza, Australia.
En España, la organización proisraelí Acción y Comunicación sobre Oriente Medio (ACOM) pidió ayer viernes el desmantelamiento de la acampada propalestina iniciada el lunes en la Universidad de Valencia. En una carta a la rectora de la Universidad, Mavi Mestre, ACOM afirma que esta acampada es “la temeraria importación de un conflicto”, alentada por “grupos radicales” que ocupan zonas comunes y crean “un ambiente coactivo” contra quien esté en desacuerdo”.
En Alemania, la Policía de Berlín interrumpió ayer mediante el uso de la fuerza una sentada de unas 300 personas en la Universidad Humboldt cuando la multitud empezó a gritar consignas que incitaban al odio, informó este cuerpo de seguridad.
La presidenta de la universidad, Julia von Blumenthal, dejó claro que el intercambio de opiniones formaba parte de la naturaleza de una universidad, pero se debía hacer “mediante un diálogo respetuoso y no gritando y utilizando megáfono”. “El antisemitismo, el racismo y cualquier tipo de discriminación no tienen cabida aquí”, recalcó en el comunicado.
En Suiza, un grupo de estudiantes propalestinos que se encuentran desde el jueves haciendo una sentada en la Facultad de Ciencias Humanas y Políticas de la Universidad de Lausana (UNIL) anunció que se quedarán allí al menos hasta el lunes. Según el diario local Blick, acordaron con el rectorado de la UNIL, una de las universidades más prestigiosas de Suiza, para prolongar su acampada. (AFP, EFE)
Tregua: esperan la respuesta de Hamás
Israel esperaba ayer la respuesta de Hamás a su última oferta para una tregua en Gaza, en un ambiente cada vez más tenso, con desavenencias dentro del Gobierno, el corte de relaciones comerciales con Turquía y de relaciones diplomáticas con Colombia.
Nada nuevo se ha sabido de las cábalas de Hamás, después de que el jueves una fuente del grupo terrorista palestino dijera que la respuesta a la propuesta israelí no llegaría hasta principios de la semana que viene.
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