Redacción El País
El gobierno de Javier Milei anunció una reforma migratoria que endurecerá los requisitos para obtener la ciudadanía argentina, y facilitará la expulsión de aquellos extranjeros que cometan delitos en el país.
El encargado de hacer la notificación fue el vocero Manuel Adorni. Estuvo acompañado en la previa y durante la conferencia por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
El portavoz de Milei planteó diferencias entre la migración de fines del siglo XIX y la que llega actualmente a la Argentina. Dijo que en el pasado era “virtuosa, a base de trabajo y respeto por la ley”, y que “aportó su parte a construir la gran potencia que supo ser la Argentina”.
No obstante, contrastó: “En algún momento el rumbo se desvió y desde hace tiempo tenemos una normativa que invita al caos y al abuso de vivos que lejos están de venir de forma honrada a construir un futuro de prosperidad. Hoy entra casi cualquiera, sin mediar muchas preguntas, y las condiciones de deportación son demasiado flexibles”.
Además, Adorni indicó que en los últimos 20 años ingresaron 1.700.000 personas de manera irregular al país.
“Cualquier condenado con pena menor a tres años puede ingresar a la Argentina, también los inmigrantes que vienen a utilizar servicios públicos gratuitos, que no contribuyeron a financiarlos con sus impuestos. En los tours sanitarios vienen, se atienden y se vuelven inmediatamente a su lugar de origen. (...) Lo que es peor: la Argentina tampoco expulsa a quienes infringen la ley. Cualquier inmigrante con una condena menor a cinco años puede seguir viviendo en la Argentina, para peligro de todos los demás”, enumeró.
Al respecto de esto, ofreció cifras de la Ciudad: planteó que de los 4.300 extranjeros detenidos en el último año y medio, 40% fueron por robo y hurto. “Digo en la Ciudad porque son los números que tenemos, a otros datos es dificultoso acceder”, aclaró, para despegarse de una supuesta utilización electoral de estos registros.
Después, entonces, enfatizó antes de dar paso a las medidas: “Entran delincuentes, siguen delinquiendo y nadie hace nada. Con este gobierno eso se termina”.
Según el vocero presidencial, la reforma migratoria incluirá los siguientes puntos:
-Cualquier condenado que intente ingresar a la Argentina será rechazado.
-Quienes sean encontrados en flagrancia por pasos no habilitados serán expulsados inmediatamente.
-La persona que mienta en la información durante su ingreso será expulsada.
-Todo extranjero condenado por cualquier delito será deportado.
-Se acortarán los plazos de apelación de la deportación.
-Los inmigrantes ilegales y los residentes transitorios y temporales deberán pagar los servicios de salud.
-Quienes ingresen a la Argentina deberán presentar seguro médico.
-Se habilitarán a las universidades a cobrar los servicios de educación, si así lo desean.
-Serán más severos los requisitos para obtener la residencia permanente y la ciudadanía, que solo se otorgará a quienes residan de forma continua dos años en la Argentina sin abandonar el territorio nacional
-Quienes permanezcan de forma irregular no podrán obtener la ciudadanía. La Nación (GDA)