La creciente del río Uruguay sigue afectando al litoral del país y tanto Salto, como Paysandú y Artigas atraviesan momento difíciles con miles de personas desplazadas de sus hogares. 

Este sábado se espera el pico de la creciente con una altura de 14,20 metros frente al puerto de Salto, cuando la media es de 7 metros. Solo en esa ciudad los desplazados superan las 600 personas y esperan que puedan ser 1.000 en las próximas horas.

"Estamos trabajando 24 horas al día, con evacuaciones permanentes de personas pero también con un importante número de personas autoevacuadas, que son los casos que más tenemos. A ellos los registramos para darle la atención que necesiten y le hacemos un seguimiento día a dia", dijo a El País, el coordinador del Cecoed de Salto, Josué Lima. 

"Nuestra preocupación puede darse a partir del lunes porque están anunciando que seguiría el mal tiempo para el sur de Brasil y eso sin dudas que significa más agua que viene y complica más las cosas", expresó el funcionario. 

Lima viene articulando las tareas de rescate, seguimiento, asistencia y control de la situación junto con Salto Grande, ASSE, el Ejército Nacional, el Mides, Bomberos, Prefectura y la Policía. 

"El INDA, a través del Mides, aporta los alimentos, la comida se elaboración en el comedor municipal y el Ejército junto con funcionarios del Cecoed los distribuyen. A los damnificados se les dan 4 comidas al día", expresó Josué Lima. 

Por otro lado, el intendente de Salto, Andrés Lima, expresó que si bien "se aceptan todas las colaboraciones que los uruguayos quieran hacer llegar, les decimos que desde el Sinae y el gobierno departamental, en conjunto con las instituciones que comprenden el Comité de Emergencias pueden brindarle a todas las personas afectadas hasta el momento la atención necesaria". 

Pero argumentó que "como sabemos que el pueblo uruguayo es solidario y puede llegar a hacer donaciones, ya hablamos con los clubes de Leones y con los clubes de Rotary Internacional que están en Salto, para que puedan canalizar las donaciones que lleguen. Encomendamos a esas instituciones por su probada trayectoria social de seriedad, responsabilidad y compromiso con la sociedad". 

Este viernes, el ministro de Defensa, Javier García y el director nacional del Sinae, Santiago Caramés, recorrieron las ciudades de Salto y Paysandú. Allí se reunieron con todas las autoridades departamentales, con el fin de hacer una puesta a punto de la situación.

García dijo luego de la reunión y en conferencia de prensa, que el gobierno nacional estaba dispuesto a ayudar en todo lo necesario a los damnificados por la creciente.

En tanto, en Paysandú el número de personas fuera de sus hogares por esta causa ya supera largamente las mil y se espera que en el caso de que el río siga creciendo, los refugios también en la capital sanducera, deban multiplicarse.

El intendente de ese departamento, Nicolás Olivera, expresó su "preocupación" y advirtió que dispuso "la mayor capacidad de colaboración posible por parte de la Intendencia y del Comité de Emergencias, para atender a las personas afectadas".

José y su familia salieron de su casa en la esquina de 19 de abril y Albisu, a poco mas de 100 metros del puerto de Salto, cuyo muelle también está bajo agua. Viven allí desde hace más de 30 años, por lo que han podido ver muchas inundaciones. La mayoría de las veces lograron quedarse, ya que su casa esta construida en una zona alta. 

Pero como en las últimas dos crecientes, ocurridas en los años 2015 y 2017, esta vez la inundación fue muy importante y también terminó corriendo a José y a los suyos de su hogar. 

Sentado en su propia cama pero en plena calle, a pocos metros de donde ingresó el agua a su casa y pensando cómo serán los días venideros, José sabe que tampoco va a dejar su casa sola y que volverá más de una vez para vigilar sus pertenencias. 

Al cruzar breves palabras con El País, resaltó que en su familia "todos están bien" y pide a las autoridades que estén más presentes que nunca. Porque ellos están dispuestos a defender su lugar y sobre todas las cosas, a volver pronto.