Cirujanos pediátricos ponen en jaque al Pereira Rossell y apuntan a ASSE: "No les interesa trabajar por esa plata"

Sucipe y SAQ advierten que los especialistas del hospital van a elegir si trabajar o no, tras extenderse un régimen de suplencias con un salario por hora menor al que tienen los pediatras.

Hospital Pereira Rossell
Puerta de entrada del Centro Hospitalario Pereira Rossell.
Foto: Ignacio Sánchez/Archivo El País.

La Sociedad Uruguaya de Cirugía Pediátrica (Sucipe), que funciona bajo el paraguas del Sindicato Anestésico Quirúrgico (SAQ), advirtió por una posible “falta de cobertura” en el Hospital Pereira Rossell tras denunciar un incumplimiento salarial de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE).

“La eventual falta de cobertura en los próximos meses será responsabilidad exclusiva de ASSE, como consecuencia directa de no resolver el problema de inequidad salarial e incumplir con la obtención de la financiación prometida el pasado año”, indicó Sucipe en un comunicado, al que accedió El País.

Casi todos los cirujanos pediátricos que atienden en la puerta del Pereira Rossell son suplentes, contratados por régimen de Comisión de Apoyo, convocados mes a mes para ocupar las guardias, y mantienen una diferencia salarial con respecto a lo que ganan los pediatras.

En el centro de referencia nacional, los cirujanos pediátricos del Pereira Rossell, que son casi todos titulados y no residentes, cobran unos $ 750 pesos la hora —sin considerar el variable anestésico quirúrgico (VAQ), ligada a la productividad asistencial— y los pediatras unos $ 1.300.

El VAQ es variable, y depende de la cantidad de intervenciones: va desde no cobrar nada, si no se realiza ninguna operación, hasta unos $ 20.000 extra por mes. Médicos que trabajan en la institución, sostuvieron a El País que en lo que va de este año nunca llegaron a cobrar más de $ 3.000.

En este contexto, Sucipe y SAQ firmaron un convenio puente para acortar esta brecha, pasando de $ 750 la hora a $ 1.000. Fue firmado en la anterior gestión, se ratificó en abril y vence a fines de setiembre. Desde el 1° de octubre volverían a cobrar $ 750 la hora.

“La promesa era corregir la inequidad para llegar al mismo valor de la hora que los pediatras”, dijo a El País el titular de Sucipe, Carlos Kierszenbaum, quien además es cirujano en el Pereira Rossell. “Nosotros no pedimos nada extra, simplemente que se corrija una inequidad”, indicó.

“ASSE se comprometió a que en este Presupuesto iba a estar la solución definitiva”, algo que no se incluyó en la propuesta enviada al Parlamento por parte del Poder Ejecutivo, subrayó a El País el titular del SAQ, Daniel Montano.

Ante la situación de no contar con un mensaje del gobierno para lograr la equiparación salarial, pero sobre todo ante la inminente caída del convenio puente, hubo una reunión de la Sucipe, y el sindicado planteó una serie de consideraciones. Por un lado, que frente a la “ausencia de previsiones presupuestales para eliminar dicha brecha salarial tal como fuera oportunamente comprometido por ASSE”, el sindicato ya no tiene elementos para persuadir a los especialistas que acepten nuevas suplencias. De manera que “quedará librado a la decisión individual” de los cirujanos suplentes el aceptar o no el ofrecimiento de nuevas guardias, dejando de manifiesto que la responsabilidad de faltantes de la cobertura será “responsabilidad exclusiva” del prestador público.

En este escenario de tensión, que a nivel del SAQ y Sucipe descartan que sea de conflicto, el sindicato de cirujanos pediátricos se declaró en asamblea permanente, dando aviso a ASSE de que deberá “planificar y garantizar la cobertura” de la atención a los usuarios del Pereira Rossell.

De esta forma, Sucipe dejó de pedirles a sus asociados que cumplan las guardias. “Es muy factible que este mes, cuando llamen a ofrecerles guardias, muchos de ellos opten por no agarrarlas y no tienen ninguna relación laboral”, señaló Montano.

“Hay médicos que no van a tomar más guardias de ASSE porque están cansados de no recibir un reconocimiento. No es un conflicto, no es un paro y no es un abandono de cargo”, dijo el titular del SAQ.

En mutualistas, estos médicos hacen guardias de retén (a la orden, sin estar en el lugar de trabajo), cobrando más (viáticos, por llamado y el doble por cirugía), mientras que en el Pereira Rossell se exige estar en el lugar y cobrando menos. “Hay cirujanos que dicen que no les interesa trabajar por esa plata”, graficó Kierszenbaum.

Montano recordó que desde abril se han reunido dos veces con el directorio de ASSE, y que ahora reiteraron el pedido de un encuentro porque es “muy grave” la situación.

Montano sostuvo que esta brecha salarial se generó porque el Sindicato Médico del Uruguay (SMU) “dejo por fuera” al SAQ de los convenios salariales por estos cargos.

Si bien hay un “sentido de pertenencia” con el lugar de formación, una esperable fuga de estos cirujanos impactaría en el servicio del Pereira y en la formación de futuros especialistas. “Hay mucha gente que cuando deja de trabajar en el Pereira no vuelve más”, lamentó Montano, recordando conflictos similares de otros años.

Fuentes del Pereira Rossell indicaron a El País que el conflicto salarial no depende de dicha unidad ejecutora, sino que se negocia a nivel de ASSE central, y que se prevé llegar a un acuerdo para no afectar la asistencia. Como suele ocurrir en otros casos, los informantes apuntaron que los cirujanos pediátricos cobran el VAQ, a diferencia de otros especialistas.

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