Redacción El País
El sindicato de trabajadores del INAUinsiste en la necesidad de que se implemente un plan de emergencia infantil y adolescente. El gremio ya había solicitado un abordaje integral durante la campaña para las elecciones nacionales, en encuentros que mantuvo con los candidatos.
Sus apreciaciones y planteos están plasmados en un extenso documento —que se elaboró a partir del intercambio con funcionarios del instituto— que se presentó el viernes a la mañana en el Parlamento.
El sindicato enfatiza en el informe que bajo la órbita del INAU hay niños y adolescentes “pobres, más pobres que antes, con altos grados de medicalización y psiquiatrización, cuyos derechos son vulnerados fuera y dentro de las instituciones que dicen protegerlos”.
El presidente del Suinau —sindicato de INAU e Inisa—, José Lorenzo López, señaló que se entregó un documento con medidas para “no quedarse solo en la declaratoria" y en su lugar "hacer propuestas concretas para buscar soluciones”. “Planteamos la necesidad de erradicar el problema alimentario que hay en la niñez, lo que tiene que ver con problemas de salud mental, y lo vinculado a la violencia intrafamiliar dado que en el 90% de los casos son dentro de la familia”, sostuvo.
El sindicato entiende —según el documento— que se debe reforzar la disponibilidad con la “creación de nuevos centros juveniles en zonas del país donde la oferta actual es insuficiente y nuevas modalidades de atención” para “dar respuesta a las necesidades específicas de los adolescentes en diferentes situaciones, como madres y padres adolescentes, jóvenes en conflicto con la ley”.
Para aquellos centros que brindan asistencia 24 horas, en tanto, el gremio propone un “cambio en el modelo de atención” al “asegurar que el ingreso al sistema residencial sea el último recurso, priorizando estrategias de apoyo a las familias y redes comunitarias”. También se coloca encima de la mesa la necesidad de “avanzar hacia modelos de atención personalizados y en entornos familiares o comunitarios”, y “mejorar las instalaciones” para un “mejor abordaje de las situaciones de violencia”.
A su vez, los trabajadores afirman que se deben “implementar estrategias para prevenir y atender el consumo de drogas y la explotación sexual”. Así como también “abordar integralmente la violencia, garantizando apoyo a víctimas y reparación del daño”.
Sobre las adopciones aseguran que se debe hacer un “cambio de enfoque en la política” al centrarse en el “niño y no tanto en los adultos adoptantes”. En esa línea, argumentan que “debe ser vista como una restitución de derechos del niño y no como un derecho del adulto". "Esto implica preparar a los niños para la adopción y trabajar con las familias adoptantes para que puedan satisfacer las necesidades específicas de cada niño”, indican.
El sindicato, a su vez, se refiere a las condiciones laborales, sobre las que dicen es de “urgente consideración la necesidad de fortalecer los equipos técnicos y especializados” del instituto. A su entender, hay una “crisis de gestión” porque —entre otros motivos— “hay una insuficiencia de recursos humanos”.
La escasez de recursos humanos, dicen en el documento, se debe a las “demoras en los concursos, las pérdidas salariales en los escalafones de ingresos —aunque no solo— que hacen escasamente atractivos los cargos en el INAU y la mala planificación de la política de reposición” de personal. En ese sentido, señalan que el instituto “sigue sin una política de carrera administrativa, con un sistema de encargaturas que alimenta discrecionalidades políticas, que genera inequidades en el acceso a los cargos y funciones y descontentos, etcétera”.