BALANCE DE EJECUCIÓN PRESUPUESTAL
El déficit acumulado de la Intendencia se sitúa en los US$ 60,5 millones.
La Intendencia de Montevideo durante 2018 recaudó US$ 701,5 millones, según se desprende de su último Balance de Ejecución Presupuestal que se encuentra a estudio de la Junta Departamental. Esta cifra representa un aumento de la recaudación de US$ 10,5 millones con respecto al año anterior. Y un ingreso diario para las arcas municipa- les, de lunes a domingo, de US$ 1.921.917.
Parte de los ingresos adicionales corresponden al aumento de la recaudación por el Sucive, el incremento del parque automotor y las multas aplicadas por el Centro de Gestión de la Movilidad (CGM).
Los ingresos se reparten de la siguiente manera: 44% a salarios, 33% a gastos de funcionamiento, 19% a inversiones y el 2,4% a la Junta Departamental.
El Balance 2018 también marca un pequeño saldo financiero positivo (el tercero consecutivo), que responde más a una decisión política que a la relación de ingresos y gastos.
A comienzos de semana, la IMM comunicó que tuvo un saldo a favor de $ 103 millones (US$ 3.350.000), equivalente al 0,5% de los ingresos y a menos de dos días de recaudación.
Esto se debe -precisó la comuna- a “una rebaja tributaria de casi $ 240 millones, un mayor nivel de inversión, el mantenimiento de los valores del boleto y una mejora continua en la calidad del gasto, que son algunas de las acciones que están detrás de este nuevo saldo positivo”.
El endeudamiento
El endeudamiento de la IMM comprometido hacia adelante, básicamente con el BID, se encuentra en US$ 203 millones, tomando en cuenta el dólar promedio de 2018 de $ 30,71. Esto supone un incremento de US$ 1 millón respecto al ejercicio anterior.
De ese endeudamiento, solo US$ 9 millones corresponden al Fondo Capital, la herramienta con la que se están haciendo distintas obras viales. En su totalidad, el Fondo Capital representa casi US$ 100 millones, que serán pagados por las próximas administraciones.
El Fondo Capital es un fideicomiso para obras que en campaña electoral Martínez anunció sería de US$ 500 millones. Después bajó a US$ 250 millones y por falta de votos en la Junta terminó acordándose con el sector mayoritario de la oposición (la bancada de Edgardo Novick) en US$ 94 millones.
Entre otras cosas, comprende la repavimentación y ensanche de la avenida José Belloni entre camino Boiso Lanza y el Colector Perimetral, el ensanche de camino Cibils en su tramo sur hasta la ruta nacional Nº 1, y la construcción del túnel en Avenida Italia y Centenario.
Déficit acumulado
El déficit acumulado de la Intendencia se encontraba al cierre del ejercicio 2018 en US$ 60,5 millones, es decir US$ 2 millones menos que el año anterior.
Según informó la Intendencia, “se continúa consolidando la sostenibilidad económica financiera de la institución, cumpliendo con el compromiso de generar una trayectoria descendente del déficit acumulado. Con los resultados positivos de los últimos tres ejercicios se logró reducir el déficit acumulado sobre ingresos, del 23% que se encontraba en 2015, al 9% en 2018, superando de forma anticipada la meta del 10% trazada para el final del quinquenio”.
Un informe crítico
Pese a que el Balance de Ejecución Presupuestal recién ingresó a la Junta, el despacho del edil Javier Barrios Bove (PN) ya hizo un análisis crítico del documento.
“En materia de gastos, en 2018 crece 3,3% respecto a 2017. El gasto de funcionamiento crece fuertemente en 2018 (16%), cuando el mismo venía constante desde el período de Ana Olivera. Y las inversiones caen 9,2% respecto a 2017”, señala un informe elaborado por un economista que asesora al legislador departamental.
“En definitiva, se puede decir que el resultado del ejercicio cae respecto a 2017 debido a que hay expansión del gasto que no se ve compensada con la expansión de los ingresos. Si se analiza el interior del gasto, se ve que además de incrementarse hay un deterioro en la calidad del mismo, ya que suben los costos de funcionamiento, se mantienen los sueldos y caen las inversiones”, añade el informe de Alianza Nacional.
Como complemento, el documento de la oposición analiza, en términos reales, tres años de gobierno de la exintendenta Ana Olivera (2012-2014) y los tres últimos de Daniel Martínez (2016-2018). No considera 2015 porque fue un año compartido por ambas administraciones.
“En el período Martínez se recauda 13% más debido, básicamente, al incremento en la recaudación de multas y a los ingresos por transferencia desde el gobierno nacional. Como contrapartida, el gasto en el período Martínez se incrementa 4%, siendo el mismo de peor calidad, ya que gasta 2% en retribuciones personales, 11% más en funcionamiento y 1% menos en inversiones”, concluye el informe.
Una de las cajas más poderosas del estado
El endeudamiento de la Intendencia de Montevideo comprometido hacia adelante, básicamente con el BID, se encuentra en US$ 203 millones. A su vez, mantiene un déficit acumulado de US$ 60,5 millones.
Con la Contribución Inmobiliaria y la Patente de Rodados como sus tributos más recaudadores, es una de las cajas más poderosas del Estado. El año pasado ingresaron a sus arcas US$ 701,5 millones, casi US$ 2 millones por día, de lunes a domingo. Tuvo un superávit anual de US$ 3,3 millones.
Una leve disminución del gasto en salarios en el período
Según el Balance de Ejecución Presupuestal de la Intendencia de Montevideo, del total de ingresos de 2018 se destinaron US$ 309,5 millones a retribuciones personales, US$ 235 millones a gastos de funcionamiento, US$ 136 millones a inversiones y US$ 17 millones al funcionamiento de la Junta Departamental.
A su vez, el documento aclara que dentro del monto de inversiones hay un gasto en salarios de US$ 18, 5 millones. De esta manera, el gasto en retribuciones personales de la Intendencia durante el ejercicio 2018 representa el 44% de su Presupuesto y supone un leve abatimiento de la carga salarial con respecto a otros años, en los que llegó a pisar el 50%. Los gastos de funcionamiento representan el 33% y las inversiones el 19%.
El leve abatimiento de los salarios obedece entre otras cosas al número de personal que se ha mantenido y a la disminución de las horas extras, aunque el sindicato de los municipales viene denunciando la pérdida de sectores de trabajo que han sido privatizados. Adeom también ha cuestionado la contratación de oenegés para ocuparse de diversas tareas.