Redacción El País.
En pleno conflicto con el sindicato pesquero, la Cámara de Industrias Pesqueras del Uruguay (CIPU) convocó a un llamado para personas interesadas en embarcarse. Según informaron a través de su cuenta de X (Twitter), en 24 horas se presentaron 1253 postulantes, "casi el doble del total de marineros que trabajan actualmente en el sector y cinco veces el total de los que trabajan en la flota costera". A su vez, fomentaron a los interesados a presentarse.
A 72 días de iniciado el conflicto, la medida de la cámara empresarial es inédita y se desconoce cuál podría ser el desenlace la disputa. Por eso era notoria la tensión en el puerto, informó El País en una nota publicada este sábado, ya que se esperaba que nuevos tripulantes serían embarcados en pesqueros pese al rechazo del sindicato.
El diferendo se originó por el reclamo del sindicato del sector de que se incorporase a otro tripulante a cada una de la treintena de barcos que capturan corvina cerca de la costa.
La cámara informó entre los más de mil postulantes registrados, "casi 100 ya tienen libreta de embarque". Indicaron que aquellos que no la tienen, pero serán seleccionados se los convocará para que cumplan con la capacitación básica necesaria. En los próximos días, dijeron, se presentarán iniciativas al gobierno para poder "concretar la contratación de la mayor parte posible de esos trabajadores que quieren trabajar en el marco de este proceso" y buscarán hacer un "contrato de enrolamiento elaborado en base al convenio colectivo vigente".
"Asumimos la responsabilidad de estar generando expectativas en miles de uruguayos de poder acceder a un buen empleo. Esperamos poder crear las condiciones para poder disponer de la mayor cantidad de vacantes posible", resumieron.
Nathalie Barbé, secretaria de Conflictos del Pit-Cnt, había dicho este viernes que la decisión de las empresas "es una medida antisindical que en vez de mejorar la situación enlentece la negociación y dificulta los pocos avances que se habían registrado". "El conflicto se mantiene por las empresas que se niegan a incorporar un tripulante más pese a que se les ha planteado, con sustento jurídico, que es necesario (...) Incluso el Estado se ha ofrecido a afrontar el costo de ese tripulante. Ahora las empresas quieren incorporar personas que no están calificadas", argumentó.