Redacción El País
La muerte de José Mujica no fue una sorpresa para nadie en el sistema político, cuyos dirigentes -cercanos al expresidente, pero también de otras tiendas- esperaban que sucediera de un momento al otro, tras haber atravesado una larga enfermedad.
Por eso, aunque el tuit que publicó el presidente Yamandú Orsi a las 16:15 de este martes 13 de mayo fue un cimbronazo para muchos en Uruguay, la región y el mundo -la noticia, perfiles en profundidad y análisis de la significación de su muerte ocupó portales de hasta medios europeos-, no se puede decir que haya sido algo inesperado.
A los pocos minutos del anuncio de Orsi, a la chacra de Rincón del Cerro comenzaron a llegar políticos de primera línea del Frente Amplio, sobre todo del Movimiento de Participación Popular (MPP) -varios de los cuales integraron su gobierno (2010-2015)-, así como figuras artísticas como el cantante Mario Carrero -quien en rueda de prensa subrayó que Mujica “quiso cambiar el mundo” y que “así se fue, con esa intención”. También se hicieron presentes vecinos y periodistas.
El cuerpo de Mujica fue trasladado en una camioneta de la empresa fúnebre Martinelli, escoltada por dos motos policiales.
El ambiente en la chacra, sobre la tardecita, era de silencio, con abrazos que dejaban en evidencia el pesar de sus seguidores más cercanos, y un desfile de autos que salían y entraban.
Poco antes de las 18.00 horas arribó el secretario de Presidencia, Alejandro “Pacha” Sánchez, y media hora después llegó Orsi. El presidente decidió bajarse de su camioneta antes, y caminar unos 100 metros hasta llegar a la vivienda de Mujica, donde se fundió en un abrazo con los cercanos al líder del MPP.
Ambas figuras del Frente Amplio, con una visible cara de tristeza por la noticia, prefirieron no brindar declaraciones a la prensa. Lo que está previsto es que Orsi hable este miércoles en Torre Ejecutiva, poco antes de que parta el cortejo fúnebre hasta el Palacio Legislativo (ver recuadro).
Conmovido y con lágrimas en los ojos, Gabriel “Turco” Hernández -histórico encargado de la seguridad de Mujica- dijo a los más de 25 periodistas que estuvieron agolpados allí unas cuatro horas que la exvicepredienta Lucía Topolansky se mantuvo “entera” y “estoica” tras conocerse la muerte de su pareja.
Además del movimiento de autos entrando y saliendo a la chacra para acompañar al entorno más cercano de Mujica, se acercó un grupo de militantes frenteamplistas para despedir a su líder. Entre ellos, había una pareja que vive en Paso de la Arena con banderas del Frente Amplio en los hombros. “Se fue un grande”, sostuvo uno de ellos.