Por Pamela Díaz
La polémica por el título universitario de Adrián Peña estuvo arriba de la mesa del Comité de Ética del Partido Colorado durante los últimos días. Después de que sus integrantes intercambiaran opiniones el martes y analizaran los descargos que presentó el anterior ministro el jueves, resolvieron recomendar que se lo “aperciba”, siendo la medida más leve entre las que podía aconsejar este organismo asesor.
El informe que realizaron lo elevarán al Comité Ejecutivo Nacional (CEN), que se reunirá el lunes. La comisión podía recomendar las siguientes medidas: apercibimiento, suspensión de la afiliación, censura que importe el descrédito partidario, solicitud de renuncia o remoción de los cargos partidarios o públicos que ocupe el dirigente en cuestión en representación del partido.
El Comité de Ética trató la mentira -como el mismo Peña calificó- sobre su título universitario después de que él mismo lo pidiera y que recibiera tres denuncias desde dentro de la fuerza política. En pocas palabras, el colorado se presentó -o dejó que se lo presente- como licenciado en Dirección de Empresas cuando en realidad aún no había terminado sus estudios.
Los descargos de Peña ante el comité llegaron antes de que se venciera el plazo, tal como informó el miércoles El País. Allegados al colorado indicaron que reconoció su error aunque destacó que entiende que solamente se vio afectada su reputación personal. En ese sentido, planteó en su defensa que el título nunca lo usó para provecho personal y tampoco actuó como licenciado en Dirección de Empresas en el ámbito privado.
También destacó que el título universitario no tuvo “nada que ver” para que fuera designado ministro y “menos” cuando fue electo senador. En esa línea, Peña explicó que este episodio no afectó al gobierno ni a la valoración que pueda tenerse sobre su gestión al mando del Ministerio de Ambiente, la cual entiende fue elogiada por integrantes de todos los partidos políticos.
Por otra parte, Peña presentó a la comisión colorada una circular del Ministerio de Ambiente con fecha 5 de setiembre de 2022 donde se comunicaba a las gerencias, divisiones, departamentos y asesorías de la cartera que en caso de realizar algún tipo de documento donde se lo nombrara debían describirlo como Adrián Peña Robaina, sin la palabra licenciado, justamente para evitar la equivocación de adjudicarle un título que no tenía.
Después de que estuvo varios días en el ojo de la tormenta, renunció a su cargo como ministro de Ambiente, el último lunes de enero, en una conferencia en la que estuvo visiblemente emocionado y no recibió preguntas de la prensa. Se apartó de la cartera sin que se lo pidiera el presidente Luis Lacalle Pou, aseguraron ambos en ese momento.
Quien se refirió a la situación fue el dos veces presidente Julio María Sanguinetti, hoy secretario general del partido. “La renuncia del ministro Peña es una pérdida para el gobierno, en cuanto a que venía desempeñando una formidable gestión en medio ambiente”, dijo. También afirmó que se trató de un “un tropezón importante” para la carrera del exministro, pero no una caída.
Además de renunciar, pidió licencia en la coordinación del sector Ciudadanos, siendo su principal referente.
Tiene previsto volver a su banca en el Senado en marzo y, de esa manera, relevar a su suplente Pablo Lanz. Ahora realiza una transición en el ministerio con quien quedó en su lugar -Robert Bouvier- y se apresta a realizar el curso breve de la carrera universitaria que le queda pendiente.
Bouvier estaba en la vicepresidencia de Antel, por lo tanto el sector Ciudadanos deberá definir quién ocupará ese cargo. Pero por el momento “no hay apuro” en resolver la situación, dijeron desde el sector. Y, de hecho, Peña ya informó a Lacalle Pou que el proceso tomará su tiempo.
El momento de la renuncia al Ministerio
Por la tarde del último lunes de enero, después de reunirse con su sector Ciudadanos, Peña se sentó solo en una mesa de la antesala de la Cámara de Diputados, comunicó su renuncia al Ministerio de Ambiente con una voz un tanto acongojada, aclaró que tenía la tesis de la carrera aprobada y contó que pidió inscribirse “en la primera oportunidad que exista” en el seminario práctico de seis días que, precisó, es el último requisito que le falta para obtener “el famoso título”.