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A. N.

El candidato oficial del Frente, José Mujica, es visto por ex dirigentes tupamaros hoy en los partidos tradicionales como un caudillo populista, comprometido con la vida democrática, pero apoyado por aparatos carentes de espíritu republicano

Luis Alemañi Viñas, de 60 años (cinco hijos) revista hoy en el Partido Nacional, militando ahora junto a Juan Andrés Ramírez (antes en Por la Patria) y participando de las actividades de la Fundación Wilson Ferreira Aldunate y se especializa en temas de ciencias políticas y trabaja como consultor. Su conexión con el Partido Nacional, además de su matriz familiar, se dio en el exilio, en Francia, junto a Wilson Ferreira, luego de huir de Argentina en 1975. Comenzó a militar en el MLN en 1969.

El núcleo duro. "Mujica es rehén de su propio destino", señaló Alemañi en diálogo con El País. Considera que la incorporación de Mujica a la vida parlamentaria y democrática fue una señal de que "el grueso del MLN podía entrar a convivir en el marco de las leyes del juego democrático, lo que se ha visto confirmado con el tiempo".

No obstante considera que el MLN "se mantiene dentro de sus fuentes ideológicas más duras, marxista-leninistas"

Agrega que esta organización y el Partido Comunista son "el núcleo duro" del apoyo a Mujica y en estos sectores "están todavía muy vivas las ideas del socialismo autoritario". Admite que este "caudillo toma mucho de su experiencia anterior al MLN como militante nacionalista". Mujica militó en la Unidad Popular de Enrique Erro, un dirigente nacionalista que luego fue fundador del Frente Amplio.

A su juicio, esta alianza entre rivales como el MLN y el PC bajo el liderazgo de un dirigente como Mujica obedece "a conveniencias políticas". Considera que esta izquierda "se mueve en un gran vacío intelectual pero los núcleos duros mantienen fuerza" en la interna del Frente.

"Mujica no piensa igual que estos aparatos, su práctica política es diferente y es rehén de su destino porque su candidatura y eventualmente su gobierno dependerá de esos aparatos".

Admite que Mujica ya le ha disputado votos al Partido Nacional y considera que esto, hoy, es "una señal de alerta" para los blancos que deben "dar respuesta" a sus electores.

Considera que la candidatura de Mujica, posicionado más a la izquierda, favorecerá a un Jorge Larrañaga centrista en una segunda vuelta, lo que se verá su-brayado por la prevalencia de los aparatos de inspiración marxista-leninista en el apoyo al candidato del FA.

"El FA no va a recoger los votos de la elección pasada, sea cual sea su candidato", asegura.

Alianza peligrosa. En tanto, Kimal Amir (68, tres hijos, 10 nietos) es hoy jubilado bancario y milita en filas de la llamada Red Batllista del Foro Batllista, cuya figura más destacada es el ex ministro de Economía, Luis Mosca.

Nacido en una tradicional familia colorada de Flores, se incorporó muy joven al MLN y tras el exilio, se integró a la lista 99 orientada por Hugo Batalla. Con él se fue al Partido Colorado. Su periplo ideológico es un compendio de la historia política de Uruguay: fue socialista, comunista, pro chino, tupamaro, dirigente disidente de la organización y miembro del Partido Socialdemócrata francés, ante de volver a sus orígenes batllistas.

Amir no duda en señalar que hay "peligrosidad" en los aparatos del MLN y señala que la militancia expresada en el congreso "está con la bomba en la mano". No obstante no cree que estas fuerzas vuelvan a empuñar las armas y a desestabilizar el sistema democrático.

Para Amir la alianza MLN- Partido Comunista "es peligrosa". Cree que si gana el Frente en segunda vuelta, Mujica tendrá que negociar, dentro y fuera del Frente Amplio.

Destaca que Mujica "ha sido un factor fundamental" del proceso de integración a la vida democrática de estos sectores.

"Sin el liderazgo fuerte del Pepe en algunos momentos el gobierno se la hubiera visto muy fea, la gobernabilidad hubiera sido muy difícil", indicó.

Entiende que la "matriz ideológica" de Mujica, que considera similar a la del principal líder guerrillero, Raúl Sendic, puede llevarlo a "hacer alianzas fuera del Frente" y a procurar el afianzamiento de la democracia.

"Mujica es una garantía para momentos difíciles, pero ni el Partido Comunista ni el MLN tienen en su matriz integrados los principios republicanos y de la democracia representativa", afirmó. "Se ven tentados y sometidos a las corporaciones. Además, me cuesta saber qué piensa el Pepe en última instancia".